SOLAMENTE TÚ, una Historia The Kissing Booth.

Capítulo XL: Volver a casa.

Pov Noah

Los últimos días, a pesar que fueron duros, pasaron rápido. Realizaba entre dos y tres llamadas al día con Matt. Le había enviado una tablet nueva con Lee, para suplantar la vieja de niños que tenía. Por suerte Elle no tuve objeciones y además le daba más independencia a mi hijo para llamarme cuando quiera. Eso también implicó despertarme asustado una madrugada a las 3 am asustado por una llamada de Matt, estaba viendo Los Vengadores y lo entristeció la muerte de Tony Stark, después de charlar un rato con él logré calmarlo y se durmió conectado a la llamada conmigo. Cerca de las 11am después de correr y desayunar viendo la carita de Matty durmiendo apareció su mamá para despertarlo. Podría decirse que no estaba contenta con que nuestro hijo me haya despertado en la madrugada, pero yo no podía quejarme de eso. Con respecto a Elle, fueron pocas las veces que pudimos mantener una charla, si nos mensajeamos varias veces al día, en su mayoría todos temas relacionados a Matt. Con el resto de la familia mantuvimos una conversación fluida tanto por llamada como por el grupo familiar.

Llegue con el tiempo justo al vuelo con destino a Los Ángeles, después del partido del viernes. Justin pudo cubrirme en la rueda de prensa, entre los dos logramos anotar la mayoría de los puntos que nos permitieron una nueva victoria. Tuve una breve llamada con Matt, antes de subirme al avión, él estaba contentísimo porque su tío Justin le envió saludos por la televisión, así que estoy muy agradecido a mi amigo por darle ese mimo a mi hijo. Por lo que sabía él se quedaba a dormir de mi mamá estrenando la habitacion con todos sus muebles nuevos. Así que en vez de esperar al vuelo, que me dejaría durante la mañana en Los Ángeles, aproveche para caer de sorpresa a la noche y poder acostar a mi hijo. La inclemencia climática en el vuelo no me permitió pero llegue aproximadamente a las 2 am. Alquile un auto en el aeropuerto, había hablado con Ethan, el mecánico, el auto de Elle estaría por lo menos todo el fin de semana en el taller y ella querrá devolverme la camioneta. Tengo claro que no voy a subir a Matt a la moto, por ahora. Entre sigilosamente en la casa, no se escuchaba ningún ruido, me dirigí directamente a mi habitación, ahora de mi hijo. Y ahí estaba, su cabecita rubia sobresalía de entre las sabanas, que se movían al compás de su tranquila respiración. No pude resistir la tentación de darle un beso en su pequeña cabeza, para desearle buenas noches.

"¿Papi?" Suspiró entre sueños.

"Dormí hijo, dulces sueños" lo abrace y bese nuevamente.

"No te vayas papi" me abraza y no puedo resistirme. Me acomodo en la cama con él y juntos conciliamos el sueño.

______________________________________

Todos los movimientos nocturnos de mi hijo, sumado a mi falta de sueño por el vuelo, lograron despertarme varias veces durante la madrugada, por eso aproveche para mantener mi rutina y me fui a correr.

Después de dos horas de ejercicios volví con el desayuno para nosotros tres. Cuando estoy ingresando en la casa escucho la voz de mi hijo, espero un momento para escuchar lo que dice.

"Pensé que estaba papá" le decía a su abuela, desilusionado sentándose en la barra de la cocina.

"Ayer hable con él dentro de un rato tenemos que ir a buscarlo." Mamá repite, sin conocer la verdad, la mentira que le dije.

"Entonces... "suspira resignado. Hago mi entrada triunfal para sorprenderlos

"¡buen diaaa!" no termine de hablar que ya tuve a mi hijo colgado de mi cuello.

"Paaaaaapa, te extrañe" repite una y otra vez, y eso me parte el corazón. Sin soltarlo sostengo el abrazo que mi mamá me dio cuando se unió a nosotros.