🍘ི෭་༚ capítulo 19

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Jimin abrió los ojos.

Los días siguientes le depararon tristeza y vacío al Omega. Esperaba en secreto no volver a atravesar lo que estaba viviendo.

El mundo entero no le parecía más que una tortuosa prisión y todos los días, y todas las noches eran frías.

Esa noche, sin embargo, se sentía como la más fría de todas. Yoongi estaba acostado junto a él, una de sus manos lo abrazaba mientras que la otra colgaba ligeramente de la cama. Le acarició el cabello y le beso la frente haciendo al Alfa buscar más calor corporal.

El Alfa siempre olía bien, era una mezcla de canela y clavo, no importaba el momento, la suave brisa de su olor hacía que el corazón de Jimin latera con fuerza.

— ¿Ya estás despierto, Mochi? — Bajito el Omega hizo un ruido para que supiera que sí.

— No te levantes aún — El Omega abrazo con sus piernas el cuerpo del Alfa.

— Hoy te sientes un poco mejor — En un murmullo Yoongi le beso el hombro.

El Omega sonrió.

Le gustaba lo que estaban construyendo; las sonrisas, el tacto y las miradas, las madrugadas de desvelo, los abrazos y las conversaciones donde no estaban de acuerdo.

No sabía que el amor podía sentirse así. No creía posible que el instinto pudiera dejar de lado todo lo carnal sin ser prioridad.

— Debería hacer yo el desayuno hoy.

— Apuesto que no sabes cocinar, Jimin — Sintió la sonrisa del Alfa sobre su pijama y pronto su piel perlada comenzó a teñirse de rojo.

Yoongi soltó una carcajada. Cuando la vergüenza llegaba al Omega soltaba olores y una risa chistosa, contagiosa casi silenciosa dejándolo en evidencia.

— Debería pedir algo.

— Vamos, Yoongi, no estoy discapacitado. Ya paso, solo siento un pinchazo en el cuerpo... Aparte, tengo que regresar a casa el lunes.

No mentía. Ya no dolía, no de forma física, pero ahora solo se sentía incapaz de separarse del Alfa, por miedo a la soledad.

— ¿Cuándo conoceré a tus padres? — Escupió. Yoongi no era bueno hablando, no ante temas delicados.

— Cuando yo conozca a los tuyos — Jimin por su parte, era demasiado honesto.

Tan honesto que al verlo podías descifrar la verdad.

Fue como si a los dos les hubieran dejado caer agua hirviendo o helada al corazón; se sobresaltaron. La sangre de pronto se les había subido a ambos a las mejillas.

— Podemos dejarlo para después — Ambos estuvieron de acuerdo ante las palabras del Alfa.

Las relaciones nunca debían de ser impulsivas.

— ¿Hablarás con Taehyung? Hoy me mandaron un mensaje preguntando por ti.

El Omega se encogió de hombros. Taehyung le había mandado mensajes y le había marcado. No dio respuesta. Necesitaba tiempo, no sabía si su amistad estaba muerta ya, seguía viva o simplemente tenía un arreglo que de momento desconocía.

Estaba sometido en un estado donde sus emociones y sentimientos lo hacían exaltarse.

Taehyung tenía que aprender a desprender, tenía que dejar de ser tan egoísta y pensar únicamente en él.

Jimin no lo quería cerca.

Estaba en desacuerdo con que el pasado era el destino del futuro. Se podía cambiar. Y Kim tenía que dejar atrás todo eso si quería que sus relaciones funcionarán.

ᗪOᑕTOᖇ ᒍEOᑎ  ˡ ≠ ˡ  KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora