Gajes del oficio

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Pese a que había dado tiempo para poder reunirse con esos dos que todavía seguían siendo parte de su pasado, no pudo evadirlo más, ya en una primera instancia había cancelado la reunión para comienzos de la semana ya que no quería verse atrapada entre esas novedades y las cartas que habían llegado.

Pero hoy era el día, no podía evitarlo más, era un tema importante la seguridad de la comunidad mágica, no había nada más importante en su agenda, y pese a que quería dejar su vida privada, sabría que no podría hacerlo del todo.

Llego temprano a su oficina y se dispuso a adelantar trabajo que sabía no podría hacer después, algo le decía que esa reunión se alargaría tanto como esos dos pudieran y todavía quedaba ir hasta Hogwarts, donde Minerva la había solicitado para una reunión que alguien pidió con ella, todavía no sabía de qué trataba con exactitud, y ella tampoco había querido decirle. Pero definitivamente su día iba a ser largo.

Tras unos minutos en silencio, el golpeteo de la puerta perturbo la tranquilidad del despacho de la ministra de magia, suspiro pesadamente, para dar paso a esa encantadora mujer que era su asistente.

_Buenos días Hermione, traje tu café.... Conseguí medias lunas en la cafetería muggle que tanto te gusta, aún están calentitas. Ya que llegaste temprano puedo traerte tu itinerario del día.

_Te lo agradezco.... Realmente te lo agradezco.... no sabes cuánto te quiero en este mismo instante, deseaba un café- Cerro sus ojos degustando el delicioso sabor de esa oscura bebida e invito a la mujer para que tomara asiento del otro lado y desayunar ambas mientras discutían su agenda del día.

_Hoy si vienen Malfoy y Potter- Suspiro con pesadez y asintió notando la leve sonrisa que ella le regalaba, era una mujer muy intuitiva y podía adivinar a simple vista que las cosas no estaban bien con esos dos- Luego del almuerzo deberías tener una reunión con el jefe del departamento de relaciones internacionales debido a los llegados del próximo mes con respecto al torneo de Quidditch entre escuelas- Hizo una leve mueca de asco al recordar ese espantoso juego así como su hijo arriba de una escoba siendo incentivado por su padre y tía abuela, una sonrisa triste empaño su rostro luego de ese recuerdo- También una reunión en Hogwarts de último momento, pero la directora no me dijo la causa en sí, solo que era importante que asistas.

_Si Alex no se mandó alguna de las que hace siempre no sé qué podría ser.... A mí tampoco me dijo que, cuando me mando la carta. Creo que deberías decirle a Armand que la reunión la pasamos para mañana, pero que estoy al tanto de todos los preparativos, deberíamos decirle a Potter para que también esté presente corroborando con la seguridad, tanto de los invitados como del alumnado. No permitiré que ningún incompetente entre al colegio y solo se quede viendo un partido de eso que llaman deporte.

_Tienes razón.... Admito que, si me gusta el deporte, pero respecto a la seguridad es cierto- Ambas sonrieron y terminaron de desayunar hablando de cosas fuera del trabajo. Pasaron un tiempo de calidad, antes de sumergirse completamente en sus respectivos trabajos.

Se despidieron tras avisos de próximos eventos o notificaciones que iban llegando, pero la sorpresa se la llevaron ambas cuando estando en la puerta notaron a ambos hombres que no quería ver una hora y media antes de lo citado.

_Si me disculpan señores.... Llegan antes, dejen que modifico la agenda para hablarlo con la señora ministra.

_Está bien, con un poco de suerte podré asistir a la cita posterior sin tener que cancelarla como habíamos planeado. Aguarden quince minutos que termino unos recados importantes- Ambos hombres asintieron, pero Draco no pudo evitar fruncir el ceño al escuchar cita, el solo pensar que se encontraría con alguien fuera del trabajo lo dejaba más nervioso de lo que ya se encontraba. Era poco común en un Malfoy sudar de la forma que lo estaba haciendo.

ALEXEIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora