¿Es posible querer tanto a alguien?

V

Marinette

Entre corriendo a mi habitación.

—Ahhh porque hice eso Tikki.

Me tire en la cama y me tape la cabeza con una almohada.

—Se supone que no me cae bien.—Dije con la almohada en la cara.

—Tal vez estés equivocada Marinette.

—No lo sé Tikki. Ni yo misma se, no sabría cómo responderte.

—Pero no me tienes que responder a mi Marinette, respondete tu misma–Dijo Tikki

Félix

Hagamoslo otro día.

Llegué a la mansión pensando en lo que Marinette me había dicho.

¿A qué se refería? ¿Era una cita? No, no podría ser una cita ¿O sí?.

Concéntrate Félix, no te dejes engañar por una cara bonita.

Si, tenía una cara bonita.

—Ah, ya llegaste. Te demoraste un poco.—Dijo Adrien bajando las escaleras.

—Si, estaba con una...—Me quedé pensando como decirle a Marinette.

—¿Con...?.—Dijo Adrien entrecerrando los ojos.

—Con una amiga... Si, con una amiga.—Dije mirando el techo.

Marinette era una amiga. Tenía pocos amigos, casi nadie me soportaba. O es que yo no los soporto a ellos.

—¿Que amiga? Tu no tienes amigos, que yo sepa claro.

¿Y si le decimos?

Por supuesto.

—Con Marinette.—Dije alejándome de él.

Adrien

¿¡CON MARINETTE!?

Esto no puede estar pasando, Marinette es una buena persona, no podría ser amigo de Félix.

Tal vez este mintiendo para hacerme dudar.

Si, tal vez sea eso.

O puede que sea verdad.

O diablos, puede que si.

—¿Y dónde estaban?.—Dije un poco nervioso.

Félix se quedó pensando un momento.

—Fuimos por unos helados.

Félix

Sabía lo que que está a haciendo Adrien, por supuesto que soy más inteligente que él. Dejaré que haga lo que piensa hacer.

—Helados, que bien.—Dijo Adrien tratando de sonreír.

—Si, fue divertido. Es una chica muy divertida.—Dije.

—Si, lo es.—Dijo Adrien muy feliz.

Pero... ¿que?.

—Bueno, nos vemos para ir a clases.

Fui a mi habitación y me deje caer sobre la cama.

Marinette.

Porque no puedo sacarmela de la cabeza.