Compañeros T2 {Remington leith}

1.

Narrador Remington

Doblaba mis camisas y camisetas para meterlas en la maleta pues mañana temprano saldría mi vuelo a Londres, salí de mi habitación y baje por las escaleras al primer piso para buscar una de mis chaquetas del perchero que estaban en la entrada cuando vi el paraguas que Mattwen había dejado el día que todo había terminado.

Flasback

Salí tras de Mattwen llamándolo en voz alta pues comenzaba a alejare de la casa pero me ignoro así que acelere el paso para agarrarlo del brazo y detenerlo

-qué- su mirada me fulmino haciendo que mis bellos corporales se erizaran también por el frío de la ciudad
Sus ojos parecían cristalizarsen pero no salió ninguna lagrima

- qué vas a decir?, cuándo ibas a decirme?- se soltó de mi agarre y yo no pude contestar, me había esquivando y no quería decírselo por temor a herir sus sentimientos

- no habías dicho que todo estaba bien!? - enarque mis cejas por la culpa que sentía pero había llegado el momento que había estado esperando

- eres un cobarde!, sabía que no tenía que confiar en ti! -

con dificultad hable -lamento haber alargado esto...- sus ojos ahora parecían perdidos mirandome, no tenía nada más que decir.... Eso era todo lo que Mattwen debía escuchar

-no te preocupes, sabes qué?, no tienes que decir nada- me confundió su respuesta - a qué te refieres?- pregunté

-a qué nisiquiera estamos en una relación, así que olvidalo y que bueno que volvieras con tu novia- mi corazón se sintió pesado al oírlo pero era cierto
Me quedé parado viéndolo alejarse mientras que el sol se ocultaba

Fin del flasback

Desde ese día no volví a verlo a él ni a ninguno de los chicos de la banda a excepción de liam, me había equivocado con Mattwen, había sido un error todo lo que paso y solo me había dado cuenta luego de que volví hablar con céline, que había terminado con su novio y en sus propias palabras me extrañaba y a nuestra relación igual.

Cerre la maleta con toda mi ropa ya lista dejándola al lado de la puerta de mi habitación para empezar a empacar una de mano con mis cosas de aseo personal y algo de ropa por si pasaba algo con mi equipaje.

Aunque no debía pensar en la culpa que me producía mi romance fallido con Mattwen a veces algunas cosas me lo traía a la cabeza, como el anocheser o las sábanas con las que habíamos dormido y tenido intimidad por primera vez, encendí la pantalla de mi teléfono para distraer mi mente.

***

-hola- sonreí dejando mi maleta en el suelo y extendiendo mis brazos

- hola- céline sonrió emocionada abrazándome, hacia tanto tiempo que no nos veíamos que me quede rodeando su cintura con mis brazos, disfrutando de su perfume y el olor frutal de su cabello, estaba muy feliz de verla...

Narrador Mattwen

-ya se fue- liam estaba sentado en mi escritorio mientras que yo me encontraba acostado en mi cama bajo las cobijas en silencio con la mirada fija en la nada

- Matt, qué fue lo qué pasó?- preguntó él mirandome, suspiré recordando

-nada...- respondí con el tono más cortante que podía.

Todo se había derrumbado en segundos, pensé pero después recordé todos los momentos en que sospeche de que remington había estado "engañandome" y solo llegaba a la conclusión de que poco a poco se había desmoronando ante mis ojos, mi corazón estaba herido pues si ya había sido difícil confiarselo a alguien ahora tendría que recoger los pedazos otra vez además de que me había mostrado vulnerable frente a él como un idiota,estaba harto de sentirme así, otra vez había sido abandonado por un imbecil que no sabía lo que quería pero estaba aún más enojado conmigo mismo por haber confiando, tenía miedo de las repercusiónes en mi estado de ánimo, era consciente de todo lo que había pasado y debía hacer pero era ciego al mismo tiempo por el dolor de mi corazón y el arrepentimiento de haber confiado en Remington. Todo había sido una mentira, un pasatiempo antes de que regresará con su novia.

Mi habitación se había convertido de nuevo en mi habitad natural por toda una semana en la que estuve encerrado en ella, explotaba en llanto y frustración al menos una vez al día recordando todas las veces que Remington había actuado como si me amara como decía,como si todo hubiese sido real, como si todos los buenos momentos hubiesen sido hechos con el propósito de arrebatarme la felicidad y hacerme miserable.

Estaba destruido a lo que los chicos de  solo esperaban a que terminará de desahogarme y luego entraban en la habitación para ver como estaba, Ronie me daba palmadas en la espalda después de mis crisis, liam escuchaba todo lo que decía en medio de mi frustración y Víctoria había comenzado a dormir conmigo casi todas las noches, me hacía sentir tranquilo al igual que la compañía de los demás chicos, estaba aliviado de tenerlos conmigo, luego de una semana más de llanto y frustración con ayuda de los chicos decidí salir de la habitación pues el mundo ni mi vida iban a terminaría por Remington, volví a terapia donde mi psicóloga me decía que llorar y afrontar a mis sentimientos eran la clave para sanar y por suerte no hubieron cambios en mi medicación.