La caperucita roja y el lobo feroz.

Verdad

Bigby se sentía ansioso, y por el olor Rouge también lo estaba, no pensó que el favor de la muñeca que Baba Yaga le pidió fuera a tardar 6 meses. El lobo siempre apresuro su paso para volver cuanto antes con Rouge y poderse explicar, más el camino realmente era bastante largo y lleno de atajos que confundían sus sentidos.

Pero... ya estaba con Rouge, llego el momento de la verdad.

--- Bigby, ¿te puedo contar una historia? --- la pregunta de la joven dejo un tanto sorprendido al lobo, ya en su forma humana y vestido (pues lo primero que hizo fue abrazar a Rouge olvidando la condición de Baba Yaga... y que esta última le hubiera gritado y lanzado objetos para "enseñarle" a ponerse ropa), y el solo pudo asentir, poniendo atención en lo que diría la chica --- Durante estos meses, aun me seguía debatiendo si perdonarte o no. Es cierto que ya más calmada, ese mismo día, trate de convencerme de la idea de perdonarte. Antes de mi veredicto... quisiera contarte una historia.

--- Dila, no tengo voz con la cual juzgarte.

--- Años después de nuestro primer y desafortunado encuentro, mi pueblo fue engañado por un señor para llegar al poder. El alcalde prometió muchas cosas, principalmente grandes riquezas y quitarle cosas a los de mayores ganancias para dárselas a los pobres. Sonaba bonito, más como ya dije, solo eran palabras vacías o palabras de un ignorante (desconozco cual eran sus intenciones realmente, a excepción de la más obvia: la del poder) --- relato Rouge, agarrando la mano de Bigby la cual empezó con un dedo a seguir las líneas de la palma de la mano --- Al llevarlas a cabo, sumió al pueblo en una miseria que tardara mucho en recobrarse. Primero fue el dinero, después fueron los valores y lo triste es que el alcalde ya no dejaba a las familias marcharse (las que se fueron lo hicieron porque ya sabía cómo iba a acabar o lo vivieron y pasaban de repetirlo de nuevo). Junto a esa decadencia los crímenes se alzaron y la muerte paso de ser solo de gente ya anciana o gravemente enferma a cualquiera que tuviera algo de valor o tuviera algo para sobrevivir y traer el pan de cada día. Es bajo todo esto, donde empieza mi historia --- Rouge suspiro y miro a Bigby a los ojos --- Para salvarme de la miseria, mi familia iba a utilizar la costumbre de que la esposa debe irse a vivir a donde está el marido. En ese momento solo podía ver que me querían desposar con el primer desconocido extranjero y sacar ganancia, sigo viendo esa tradición mal, pero también entiendo que es un boleto de salida de mi pueblo; en fin, mi familia me quería comprometer con un señor más viejo... creo que incluso mas que tú.

--- No soy tan viejo.

--- Para mí luces de 30 para arriba.

--- Hmm, ¿pero te parezco bien?

--- Si, bastante bien, incluso más que... --- musito Rouge para después aclararse la garganta y proseguir con su relato --- bueno, continuando, eso del compromiso llego a cierto oídos... más bien al hijo de uno de los "guardias" del pueblo.

--- ¿El hombre apestoso y desagradable?

--- Siden, líder de los cazadores... si, él es su padre --- la chica agarro la mano de Bigby con fuerza --- mandaron matar a mi prometido, yo lo vi. Estaba durmiendo en el mesón de una amiga, debido al toque de queda y porque no alcanzaba a llegar a casa antes de este, cuya pared tenía un agujero  que dejaba ver una especie de parque pequeño y este hoyo solo era lo suficientemente grande para ver con un solo ojo. Esa noche me desperté por gritos y un llanto, la curiosidad me pudo y mire por el agujero... ahí pude ver que Siden y sus amigos se llevaban arrastrando a mi prometido que se quejaba y lloraba de dolor debido a que lo torturaron, su rostro era un desastre (hasta día de hoy me sigue sorprendiendo como es que logre reconocerlo). Creo que le dieron una paliza tan grande ya que recuerdo que no podía ni caminar, así que no podía huir. Ese grupo de monstruos estaban decidiendo que hacer con él, casi como jugando con el... y eso hicieron, lo amarraron a uno de los postes de vela y empezaron a practicar su puntería con él, prepararon sus arcos y apuntaron. No fue una muerte rápida, evitaban darle en la cabeza o en el pecho... ya hartos y saciados fue cuando lo mataron degollándolo, ocasionando que se ahogara en su propia sangre. Esa noche no pude dormir y hasta día de hoy puedo escuchar los gritos de un pobre hombre que pude haber salvado.

--- No es tu culpa, solo tratabas de sobrevivir

--- Y tú te culpas por lo mismo.

--- Es diferente

--- No y si --- contesto Rouge --- siempre he agradecido que el leñador estuviera ese día para salvarnos, que de algún milagro mi abuela estuviera bien. Es por eso por lo que puedes redimirte, porque ambas seguimos aquí... en cuanto a mí, no puedo pedir perdón a un muerto. Después de eso, fui a mi casa y le conté a mi familia; no soportando más la situación agarré todo el dinero que podía de mis ahorros y hui del lugar; obviamente esos repugnantes seres me siguieron hasta... hasta que me topé contigo.

--- Por eso no querías regresar

--- Si... con el tiempo me di cuenta de que no solo era eso, que de verdad me gustaba estar contigo. Ya fuera como amigo... o algo más.

--- Te diría te amo, pero creo que no soy muy bueno ocultándolo --- contesto Bigby, haciendo que Rouge lo mirara sorprendida --- espera ¿de verdad no lo sabias? Pensé que era demasiado obvio.

--- Bigby Heftig... eres un tonto --- lloro Rouge abrazándolo llena de felicidad --- pero así te quiero.

--- No soy tonto... solo nuevo en esto.

--- Pues aprendamos juntos, y si esto no llegara a funcionar... sigamos siendo amigos por favor.

--- Tratare de dar lo mejor de mí.

--- Y yo de mí.

--- Ay que tiernos ustedes dos --- la pareja miro a Baba Yaga con un sonrojo en su rostros al verlos en un íntimo momento --- Ya que esta todo solucionado, que su amor por fin se cumplió, que lo van a intentar... hablemos de nietos.

--- ¡BABA YAGA!