Taeyong manejaba sin decir ninguna palabra, Seungmi estaba callada también ya no sabía que hacer. Ella había comenzado eso, claro que quería seguir pero había un voz en su mente que le decía que lo detenga.
Llegaron al departamento de Taeyong y ahora el era el que se estaba arrepintiendo, no decía nada pero esperaba que las cosas no pasaran a más. Abrió la puerta de su departamento y los dos entraron, cruzaron miradas y solo eso fue la señal para ambos que podían continuar.
Taeyong acorraló a Seungmi mientras la besaba de nuevo, ella ignoro esa voz y le prestó atención al chico que estaba desesperado por tocarla — ¿De verdad quieres seguir? — dijo Taeyong con la voz entrecortada, ella asintio mientras el dejaba besos por su clavícula y su cuello, tomo su cintura cargándola, ella enrrolo sus piernas alrededor de el y mientras seguimos el beso comenzó a caminar hacia su habitación.
La sento en la cama y ella comenzó a desabotonar su camisa de el — ¿Tienes condones? — pregunto Seungmi y Taeyong asintio mientras le quitaba el vestido. Volvió a besarla mientras la recostaba en la cama, sus manos estaban inquietas tocando sus piernas, cintura y su pecho de Seungmi mientras ella dejaba salir pequeños gemidos y suspiros.
— De verdad quiero hacerlo ya — dijo besando su cuello de ella — pero quiero que esté momento dure para siempre, se que mañana me vas a ignorar por lo que pase ahora ya que los dos estamos perdidos en el deseo que ambos tenemos — Taeyong tomo su mano mientras la miraba a los ojos — entonces está noche se mía — el beso su mano para luego acercarse al rostro rojo de Seungmi — por qué yo siempre seré tuyo.
Lo último lo dijo en un susurro antes de besarla, su corazón de Seungmi dolía y sintió las lágrimas aproximarse.
— Lo seré y siempre lo fui — ella quito la camisa de Taeyong mientras el se desabrochaba su pantalón.
El volvió a besarla mientras la alzó de la cintura, ella se agarró del cuello de Taeyong y el la levantó para sentarse en la cama con ella encima — Tu mandas yo obedezco.
Seungmi sonrió — Me gusta más obedecer — comenzó a besarlo tratando de no separarse de él, el momento era de ellos y no quería desperdiciar la oportunidad.
Sentada en su regazo comenzó a moverse para tener fricción sobre la erección de Taeyong, pequeños gemidos y suspiros por parte de el eran música para Seungmi. El hecho la cabeza hacia atrás cerrando sus ojos — Seungmi no te muevas más por favor.
Ella se acercó a su oído — ¿Por qué? — dijo susurrando y comenzando a darle besos por su cuello bajando a su pecho, se bajó del regazo de el y se arrodilló tomando con su mano la erección de el — ¿No puedes aguantar? — ahora el la miraba y sonrió al ver lo impaciente que estaba.
— Veremos quien sonríe más al final Seungmi — dijo cerrando sus ojos cuando ella tomo la erección y comenzó a masturbar a Taeyong, ahora el gemía sin aguantar, ella se sentía poderosa al ver a Taeyong de esa manera así que si previo aviso lo puso en su boca — ¡Ah Seungmi! — su pecho subía y bajaba, Nara lo habia hecho antes pero no era la misma sensación que sentía en ese momento. Sin que el se dieran cuenta ya tenía sus manos en el cabello de Seungmi mientras la empujaba sobre su miembro que estaba a punto de venirse, Seungmi estaba exitada pero ver a Taeyong de esa forma la ponía más — ¡Ah! — dijo en voz alta al venirse en la boca de ella.
Ella tenía los ojos llorosos, Taeyong le acercó un pañuelo para que escupiera pero ella ya lo había tragado — ¿perdiste la cordura o de por sí eres así?
Taeyong sonrió sentando a Seungmi en la cama — Perdí la cordura por ti — el la iba a besar pero ella se alejo — ¿Que?
— Acabo de tragarme tu...— Taeyong la besó y aunque ella lo alejaba el seguía besándola — ¿No te da asco? — Taeyong sonrió negando — supongo que haces esto seguido con Nara.