Mí Amor y Tú Corazón ᠶ Sunsun ᠶ

ˠ 𝘾𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 𝙨𝙚𝙫𝙚𝙣 ˠ

2 Años después

Usé la poca energía que me quedaba para alcanzar a nashi, pero el cachorro de cinco meses aún tenía mucho dinamismo para seguir corriendo por el jardín, podía escuchar las risas infantiles no muy lejos desde donde estaba e hice un último intento para atraparlo.

Para mi suerte funciono cuando lo acorrale debajo de la mesa.

respire profundo tratando de regular mi cansancio y tome al cachorro de Golden retriver entre mis brazos, para llevarlo de vuelta a su dueño, quien era niña de diez años que salió del abrazo de su padre para correr hasta mí y tomar a nashi.

— Gracias por buscarlo profesor Kim — le sonreí a la pequeña y le dije que prestara más atención desde ahora.

la vi alejarse con el cachorro hasta la puerta de salida de la institución y suspiré aliviado al saber que mi jornada había terminado. ser profesor de los últimos cursos de primaria me dejaba más agotado que cuando lo fui de los iniciales.

mire la hora en mi reloj y maldije cuando vi que se me hacía tarde, para alcanzar el ultimo bus de regreso a la cuidad en la que ahora vivía, tome mis pertenencias de manera rápida y me despedí del conserje que estaba en la puerta.

era en estas ocasiones en la que pensaba que no había hecho mi mejor elección al escoger este sector rural para trabajar, pero fue lo único que encontré y era lo más factible para permanecer fuera del radar por un tiempo.

en realidad, ya habían pasado dos años y eso era un poco más de lo que espere.

— ¡Hey todavía no se vayan! ¡Espérenme! — grite cuando al llegar a la esquina vi que el bus empezó a alejarse, corrí con más fuerza mientras pedía que se detuviera y gracias al cielo así fue.

— Profesor Kim, su rendimiento para correr está mejorando — el señor Lee, quien era el conductor del bus, no desaprovecho la oportunidad de molestarme cuando pague mi pasaje, tenía la leve sospecha de que disfruta ver mi desesperación al casi no poder alcanzarlo.

caminé entre los asientos y sonreí cuando vi el puesto a lado de ventana en el fondo del bus vació.

tomando asiento apoye mi cabeza en la ventana y saque mi teléfono para escuchar un poco de música ya que el viaje era de hora y media por lo menos hasta llegar a mi parada.

Me costó un poco acostumbrarme a esta nueva rutina de mi vida, pero ya en la actualidad lo soportaba mejor que antes y había logrado asentarme en un pequeño apartamento, el cual se había convertido en el centro de mis secretos, esos que no podía contar a alguien más.

Con el pasar de los meses acepte que tendría días difíciles, días buenos y días normales, como era el de hoy, pero aún estaba intentando seguir adelante mientras creía que la dicha todavía volvería a mí.

¿Era feliz?

me preguntaba eso con más frecuencia de lo que creía y cuando buscaba una respuesta sincera, de mis labios no salían nada, pero tampoco estaba tan mal, ya que al menos hacia una cosa que me gustaba y era seguir dando clases, lo que me ayudaba a desconectarme de las necesidades que sabía que no podía cubrir.

algo cayo en mi nariz despertándome de mis pensamientos, toque el lugar para identificar el pequeño copo de nieve que se había disuelto entre mis dedos, me fije entonces a través de la ventana que estaba empezando a nevar y no era para más, si ya estamos a la mitad de diciembre y exactamente en estas fechas, los recuerdos que tenían que ver con Sunghoon golpeaban con más fuerza en mí.

fui yo el que decidió irse y tal vez por eso, mi castigo era que lo extrañara más.

A veces me cuestionaba si esa fue la decisión correcta, o si debí esperar un poco más por él, pero tampoco quería seguir aferrado a nuestra vulnerable relación.