Yo te escucho

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Liam se pasó la mano por el cabello soltando un suspiro, se dejó caer sobre el sofá cerrando sus ojos, estaba agotado, nunca creyó que ser capitan de un equipo de fútbol sería tan agotador, pero sabía que valdría la pena al final.

Sintió los pasos adentrarse a la sala, no abrió sus ojos, solo sonrió levemente al sentir las caricias en su cabello, el cuerpo contrario se sentó al borde del sofá, sin mirar levantó su brazo y abrazo por la cintura a aquella persona, se acostó de costado, pegando su espalda al respaldo del sofá, pegando la espalda del contrario a su pecho.

— ¿Cansado? — Pregunto el moreno acariciando lento el cabello del menor

— Agotado — Suspiro Liam abriendo sus ojos para mirar a su esposo — ¿Como estás?

Zayn se encogió de hombros, sonrió levemente, sin parecer feliz, sin tener ánimos — Sabes como es esto

Liam hizo una mueca, acarició la cintura del mayor, luciendo preocupado— Mi amor...

Zayn no respondió, se puso de pie estirándose, soltando un bajo quejido — Pedí la cena, ve a darte un baño

Liam se puso de pie con cuidado, abrazando la espalda de su esposo — ¿Zayn? ¿Estás bien?

Malik acarició sus manos con delicadeza, cerro sus ojos soltando un suspiro — Estoy bien... — Susurró tan poco seguro que Liam sabía que mentía

Le dejo un suave beso en la mejilla, alejándose para dejarlo ir, sabía que Zayn necesitaba espacio, pensar y intentar relajarse con todo lo que estaba pasando, pero no significaba que no se preocupara, llegaba a preocuparse tanto por ese hombre y sabía que él estaba tan mal, que habían ambos dejado de dormir como se debía, sufrían de insomnio y fuertes dolores de cabezas.

Se dio una ducha rápida, con agua fría, su cuerpo se sentia tenso y cansado, parecía un zombie andante, y lo único que necesitaba ahora, era dormir.

Cenaron juntos, en un silencio que se sentía como cuchillas clavando sus pechos, llevaban semanas así, donde no podían hablar, Zayn callaba todo y Liam no insistía, creyendo que era lo mejor.

Que equivocado estaba.

La hora de dormir llegó rápidamente, se fueron a acostar y dándose las espaldas intentaron dormir, ambos despiertos, sus ojos se mantenían cerrados de todas formas, pero no se dirigieron la palabra.

Los minutos pasaban lentamente, se convirtieron poco a poco en horas hasta llegar a esa hora, tres con veinte de la madrugada, todo parecía normal, hasta que un  enorme rayo de luz  alumbró su habitación de golpe, ambos dieron un salto asustados, se dieron una mirada mutua, y Liam se puso de pie.

No espero que Zayn dijera algo, solo salió del cuarto, escuchando un “ten cuidado, Li" de parte de su esposo, bajo las escaleras encendiendo las luces, caminando directamente hacia la puerta que daba hacia el patio.

Dio una mirada hacia afuera, no parecía haber nada, salió con cuidado, dejando la puerta abierta tras su espalda, bajo los escalones y sus pies descalzos tocaron el césped, todo en su patio parecía estar totalmente  normal, hasta que lo sintió tras su espalda.

Sintió a alguien o algo parado detrás de su cuerpo, se giró lentamente sintiendo su cuerpo temblar levemente, y su corazón latir lo más rápido posible, creyendo que le daría un ataque al corazón.

Zayn dio un salto en la cama cuando escucho un grito proveniente de su esposo desde el patio, se levantó rápidamente, y tomo un palo de golf que tenía Liam en el clóset, bajo corriendo las escaleras, casi cayendo de estas, llamo a Liam varias veces saliendo al patio, quedándose congelado en la puerta, dejando caer el palo de golf de sus manos

Locos One Shots de ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora