8 | Siempre has sido tu.

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        Los meses pasaron, hasta llegar a ser un año

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        Los meses pasaron, hasta llegar a ser un año. Tantas cosas había pasado con el pasar de las estaciones, uno de los eventos más importantes fue el cumpleaños dieciocho de la pequeña Longbottom, sus amigos la celebraron con una pequeña fiesta en la sala común, Albus estuvo presente, la abrazó y le deseo mucha felicidad. La relación entre ellos no volvió a ser la misma, el chico de cabello ruloso aún necesitaba tiempo para superar todo lo que su "mejor amiga" le ocasiona con una simple mirada, por lo cual él seguía manteniendo su distancia.

       Alice pasó una gran noche, pero se sentía incompleta al leer una carta que le había llegado aquella mañana de otoño, cierto azabache le escribió para desearle un feliz cumpleaños y para disculparse el no estar presente. La castaña entendía, James se encontraba de gira con su equipo de Quidditch, de hecho siempre estaba pensando en si este se estaba alimentando bien o dormía las horas necesarias.

        James y Alice aun no habían oficializado nada, la castaña decidió enfocarse en terminar sus estudios en Hogwarts y saber que haría al graduarse, el mayor de los Potter entendió su decisión, pero él siempre estaba pendiente de ella, felicitándola por sus logros y acompañándola. Se escribían cartas de manera seguida y cuando se podía ambos se encontraban en las vacaciones para salir a pasear o simplemente pasar tiempo en la madriguera.

      Pero en momentos como este día era donde la castaña quería más que cartas o recuerdos, necesitaba verlo, abrazarlo y por fin decirle que estaba segura que siempre sería él

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      Pero en momentos como este día era donde la castaña quería más que cartas o recuerdos, necesitaba verlo, abrazarlo y por fin decirle que estaba segura que siempre sería él. Alice se encontraba mirando el Gran Comedor por última vez, aun vestida con su uniforme de Ravenclaw, su cabello castaño caía con gracia sobre sus hombros, su mirada estaba cargada de nostalgia, al ver el gran lugar vacío, ya que todos los alumnos se encontraban en los jardines, celebrando a los graduados.

       — Por fin te encuentro, pequeña Longbottom. — susurró una voz masculina a sus espaldas.

       Alice se volteó rápidamente para ver al dueño de aquella voz que hacía sus mejillas cambiar a un color carmesí. Una sonrisa enorme adornó su rostro al ver a cierto azabache con los brazos extendidos a solo unos pasos de ella, la castaña no se lo pensó dos veces y corrió a su encuentro, al llegar hasta él sus brazos la rodearon en un cálido abrazo.

      — Estás aquí, realmente estás aquí.

     — No podía perderme este día por nada del mundo.

    Murmuró James cerca del oído de la castaña, para después dejar un beso en su cabello. El azabache había hecho todo lo posible para tener algunos días libres y poder ayudar a la castaña en sus planes fuera del colegió. Alice no podía con toda la felicidad que estaba sintiendo, solamente faltaba una cosa para hacer aquel momento mágico.

     La castaña deshizo el abrazo, con una de sus manos libres acarició una de las mejillas del azabache y por fin conectó su mirada con la de él. Su corazón comenzó a latir aún más rápido, su vista se volvió borrosa en un principio para después poco a poco cada cosa comenzaba a cobrar color, lo primero que sus ojos lograron apreciar fue un color oscuro pero brillante en la mirada del azabache, quien la miraba nervioso.

    — Es que siempre has sido tú. — habló Alice después de unos minutos de silencio que se había tomado para apreciar al chico que tenía frente a ella.

      La sonrisa que apareció en el rostro de James era una que la castaña jamás había visto, el azabache no se contuvo más y tomándola de la cintura la acercó hasta él, rozó tiernamente su nariz con la de ella, pidiendo permiso para lo que estaba apunto de hacer, la castaña ni siquiera se tomó el tiempo de responder, simplemente rompió todo espacio entre ellos juntando sus labios y siento que esta parte que faltaba esta por fin con ella. 

Your Eyes Tell | James S. PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora