. ·ʚĭɞ𝗴𝗶𝗿𝗮𝘀𝗼𝗹

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Bien, apenas conseguían trabajo y ya estaban llegando tarde, ya que punto número uno: no podían llevar ropa sumamente oscura, debido a que el ambiente de la florería era de tonos muy cálidos

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Bien, apenas conseguían trabajo y ya estaban llegando tarde, ya que punto número uno: no podían llevar ropa sumamente oscura, debido a que el ambiente de la florería era de tonos muy cálidos. Punto número dos: se querían ver muy bonitos si atenderían a muchos clientes. Y número tres: se habían levantado tarde.

-Vamos Jeongin, ya vamos como media hora tarde.

-Mira al inútil que habla.

Minho le lanzó un calcetín sucio para hacer que se apurara. Bien, ahí estaban dos chicos corriendo también, debido a que el autobús no había llegado. Vaya inicio de trabajo.

Finalmente, después de casi una hora, habían llegado.

-¡Ah, si llegaron!- Felix ni siquiera se veía enojado- pensé que se habían arrepentido.

-No, no, lo sentimos, nos levantamos tarde, perdón.

Felix sonrió y les dijo que no se preocuparan, él era una persona muy linda en realidad.

-Claro, no hay problema, bueno, si no hay algún otro inconveniente, iré a comprar más flores, semillas y eso.

Minho y Jeongin asintieron, minutos después, el joven se fue.

-Bien, creo que primero deberíamos limpiar.

-Sí, parece que un anciano que no hace nada vivía aquí.

-Oye, no seas tan maleducado, aunque sí, pero antes, deberíamos poner música.

Jeongin buscó por todo el lugar alguna bocina o radio, hasta que dio con ella. Conectó su teléfono poniendo música a alto volumen, ocasionando que las personas que pasaban por ahí escucharan su ruido.

-¡Carajo, un gusano!- gritó Minho.

El contrario comenzó a reír mientras tomaba al animal en la mano y comenzaba a asustar a su amigo.

-Jeonginnie, aleja esa cosa de mi.

-Mira Honnie, está tan lindo.

-Innie, hablo en serio, sabes que le tengo miedo a los insectos.

Bueno, solo a los que se retorcían por la tierra, porque las mariposas de hecho eran sus favoritas.

-¿No lo quieres?- comenzó a perseguirlo por toda la tienda, hasta que Minho salió del lugar asustado.

-Jeongin, en serio, aleja eso.

-Agárralo un poquito.

Todos los miraban extrañados debido al alboroto de Minho.

-Me voy.- habló dispuesto el mayor para emprender su camino hasta algún otro lado.

-¡No! No, ya, ven Honnie- habló dejando al animal en un árbol de la calle y siguiendo al mayor.

Hyunjin miraba divertido desde la otra calle, al parecer su pequeño Felix había contratado a dos jóvenes, que más bien parecían niños jugando con los insectos

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Hyunjin miraba divertido desde la otra calle, al parecer su pequeño Felix había contratado a dos jóvenes, que más bien parecían niños jugando con los insectos.

-¿Y tú qué tanto miras?- habló su amigo a su espalda.

-Oh, habían unos chicos en la florería jugando con un gusano, creo.

Lastima que cuando Chan se asomó, los dos ya estaban dentro de nuevo, arreglando el lugar y las flores.

-Deja de perder el tiempo.

-Si, si, lo que diga el señor Bang.

Hyunjin se apartó del ventanal con una sonrisa en el rostro debido a la graciosa situación que había podido apreciar hace un rato.

Ambos chicos eran como un girasol.

-Tengo hambre, y Felix aún no llega

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-Tengo hambre, y Felix aún no llega.

-Oh, podemos pedir una pizza.

-Mejor.

El sonido de la campanita les avisó que un nuevo cliente había entrado, por lo que se decidieron para ver quién iba a atenderlo.

-¡Hola! ¿Puedo ayudarlo en algo?

-Sí, ¿Tendrás algo como esto?- dijo sacando su teléfono y enseñándole una foto de un arreglo de distintas flores bonitas.

-Creo que si, ¿Lo quieres para hoy?

-No en realidad, venía a hacer un encargo con diez de estos.

Minho abrió la boca mientras asentía, finalmente le explicó todo el proceso para realizar su pedido, el joven asintió mientras prestaba atención a todo lo que decía.

-Bien, y por último tendrás que dejar un pequeño adelanto para asegurar la compra.

-Claro.

Jeongin tomó una de las notas amarillas que tenía en la mesa anotando todas las flores que necesitarían, cuántos arreglos serían, y el precio final.

-¿Y tú nombre es?

-Oh, Han Jisung.

Sonrió mientras lo decía. Finalmente pagó lo que le habían indicado y salió de la tienda. Casi media hora después, llegó Felix, se le veía algo cansado.

-Hola Lix, ¿Qué tal te fue?

-Bien, creo, logré comprar todo lo que necesitaba.

-Sí, hablando de eso, tenemos un pedido de estas flores.

Felix observó la hoja y sonrió, les dio el número de la persona que se encargaba de traer las flores y de nuevo, se fue.

-Pobre Lix, realmente se ve agotado.

-Ve el lado bueno, con nosotros podrá descansar un poco.

-No es como que nosotros seamos de mucha ayuda.

-Estamos aprendiendo.

Ambos observaron como una motocicleta se estacionaba frente la tienda, finalmente había llegado su pizza.

-Listo, gracias.

Bien, solo debían estar ahí tres horas más y podrían irse.

*El girasol es considerado símbolo de la felicidad.

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