❛あなたの腰❜, HeeJay

011

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❝La Noticia❞
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[Old with you-Grentperez, ♡]

Heeseung

Su mirada viaja de un mostrador a otro, sus ojos no pueden despegarse de aquellos circulos relucientes y bellamente adornados con un enorme y reluciente diamante, sus labios forman un pequeño puchero al notar los elevados precios, y no puede evitar tocar desesperado el vidrio del mostrador con las yemas de sus dedos.

Jay pudo haberse adelantado, pero su plan aún seguía en pie, él entregará el anillo.

─Joven, estos anillos de compromiso son únicos, le sugiero que elija este que significa amor puro, ¡se que su pareja amará el diamante!

Sus mejillas no tardaron en teñirse de un lindo rosa, la chica que le atendía en cada movimiento que realizaba está le mostraba otro anillo y cada vez más elevado en precio.

─Mi prometido es un hombre simple, los diamantes no son sus favoritos

Dijo con un poco de vergüenza, quería deshacerse de ella, él mismo quiere encontrar el anillo perfecto para su lindo prometido.

─¡Oh, vaya!, entonces es prometido, ¡entonces con más razón debería comprarle un anillo con un precioso diamante!

Sus mejillas ahora se encontraban de un lindo tono rojizo, sus labios se curvan en una tierna sonrisa y su mirada se desvía a un anillo en particular.

─Créame cuando le digo que a mi prometido no le importaría que su anillo no tenga un diamante

Soltó con una pequeña risita, recordar lo simple que es Jay como persona le hace sentir afortunado.

No tardó mucho cuando señalo el anillo que le había robado su atención, un precioso aró de color dorado con una pequeña piedra adornándolo, siendo está de una hipnotizante tonalidad rojiza, es perfecta.

─¡Oh!, ese es perfecto, le aseguro que su futuro esposo lo amará para toda su vida, ay, el amor

Una pequeña risa se escapo de sus labios en cuanto la chica canturreo lo ultimó.

Después de unos minutos esperando que su anillo este listo, pagó, agradeció y se retiro de aquel elegante lugar.

Sentía su pulso ir a toda fuerza, espera con todo corazón que su Jongseong le encante el anillo.

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─¡Mi hermanito se casa mañana!

Gritó emocionado Sunoo, acto que les hizo saltar en su lugar, era oficial, Sunghoon y Ni-Ki se casarían mañana.

─¡No puedo esperar ver a ambos con un traje blanco!, ¡se verán tan apuestos!

Los saltitos que Jay dió con emoción en su lugar captó la atención de todos, haciéndoles sonreír con ternura.

Heeseung ante ello no pudo contenerse, sosteniéndole por detrás, lo abrigó con sus brazos, sintiéndo lentamente como Jay correspondía a su afecto, acariciándole las manos.

Se encontraban almorzando en un lujoso restaurante, el cual pertenecía al cuñado de Jay y Jungwon, Hwang Hyunjin, conocido por la estética y obviamente los deliciosos platillos que ofrece, suena asombroso el solo hecho que su restaurante sea básicamente reciente en su ciudad, tres meses de abertura y los clientes no paran de llegar, y la cantidad aumenta en demasía.

No tardo mucho cuando por fin llego la comida, los cuatro no dudaron en degustar, todo aquello, mientras repartían anécdotas sobre su relación o simplemente anécdotas absurdas sobre lo que suelen realizar en horarios libres, o en su trabajo, cosas triviales, cosas del día a día.

Sin evitarlo, de reojo miro hacía el lado contrarió, donde su prometido se encuentra, una linda sonrisa se asomó en sus labios, le está mirando, ama demasiado cuando hace eso, a los ojos de Heeseung es una piedra valiosa, es como un ángel, tan delicado, tan precioso, tan brillante, tan único, ante sus halagos siempre suelta un risa atontada, se siente amado, se siente tan bien.

Dándole la cara, esté se sonrojó, lo atrapó y ahora se avergonzaba, sin importarle que no están completamente solos, le robó un beso, uno de esos que se regalan de a poco y se demuestran mucho.

Jay sorprendido le miro después de que se haya alejado, pero no se espero que le devorará sus labios con rapidez, aquello le hizo sonreír entre aquel apasionado, pero lento beso, disfrutando los segundos que duró, al separarse no pudieron evitar mirarse con amor.

──Sunoo, cariño, ¿me regalas también un besito de ese tipo?

El tierno pedido de su cuñado le hizo reaccionar, y no pudo retener una carcajada, por otro lado la otra pareja discutía tiernamente sobre los tipos de besos que se dan y que bastan, él y Jay se miraron con diversión para luego dedicarse a admirar a la linda pareja al frente suyo.

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Al día siguiente
(Dos horas antes de la boda)

Jay

─¡Mierda!, ¡mierda!, ¡mierda!

Repetía una y otra vez Ni-Ki, se encontraba en la casa de los señores Nishimura, había quedado desde un inicio junto con Sunoo y JeongIn que ayudarían en lo que necesitara Ni-Ki, pero esté se encontraba muy ansioso, justo después de ponerse su traje, recordó que sus zapatos siguen en la tienda, ¿cómo se le pudo ocurrir olvidar sus zapatos?

──¿Es qué eres tonto?, solo a ti se te ocurre olvidar los benditos zapatos

Los presentes se rieron, mientras que los hermanos se miraban, si las miradas matasen, estos dos ya andarían en los suelos.

Fue cuestión de minutos cuando la madre de los Nishimura se apareció con los dichosos zapatos, lindos, por cierto.

Él novio en cuestión de minutos terminó de arreglarse, se veía tan lindo, demasiado lindo, los halagos por parte de su familia, amigos cercanos y él se hicieron presentes y terminaron en cuanto se dieron cuenta de la hora.

¡Ya era hora!, sus mejores amigos se casarían y él se sentía tan honrado de participar en esté momento tan memorable.

Todos salieron con prisa del departamento, hasta salir del edificio, todos corrían o simplemente confundidos se miraban, el auto no había llegado, demonios.

Ni-Ki había vuelto a sus ansías, le pedía a su madre y Sunoo que se comunicarán con él chofer, ambos se miraban ansiosos de igual manera y acataron inmediato el pedido del novio.

Ninguna señal, y ya pasaba los diez minutos de la hora.

──Perderé la apuesta con Sunghoon, puta madre

Soltó Ni-Ki con una sonrisa nerviosa, no necesitaba ser o estar en el lugar de su mejor amigo para ponerse nervioso, por que ante todo esto lo ponía ansioso de igual manera, y claro que no dudo en soltar una pequeña risa ante sus palabras.

─¿Neta se te ocurrió hacer una apuesta con Sunghoon para ver quién de los dos llegaba tardé?, eres increíble Ni-Ki

Ni-Ki solo sonrió nervioso, mientras que su madre a su lado reía muy bajito, viendo a sus dos hijos tirarse odio.

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