Eternidad

V.- Darach

Stiles se comportó un poco extraño después del pequeño incidente del "sourwolf" pero con los días se le paso y ya volvía a ser él con la manada y el alfa. Derek se acercó mucho más al brujo para conocerlo, no quería perder el sentimiento de tranquilidad y hogar que tenía cada vez que estaba a su lado.

Los chicos se encontraban en clases cuando notaron el ceño fruncido del brujo que no paraba de mirar a la ventana y el cielo tormentoso. La maestra Jennifer se había presentado unas clases atrás y la manada la odiaba y más por la manera en la que veía al castaño como si quisiera algo de él pero Stiles solo la ignoraba.

Un cuervo chocó contra la ventana asustando a la mayoría, Scott quiso acercarse a Stiles, quien se sentaba justo al lado de la ventana pero el chico se mantenía tranquilo. Muchos más cuervos se estamparon contra la ventana, una y otra vez hasta que lograron romper el cristal y todos se arrojaron al suelo. El brujo se levantó en medio del caos sin importarle las pequeñas heridas que dejaban los picos y garras de las aves en su rostro y cuerpo, llegó hasta la mujer.

- Deja el acto. – le ordenó con voz dura y fuerte dejando brillar sus ojos en verde.

La mujer sonrió y en tan solo unos segundos la paz volvió.

- ¿Todos están bien? ¡Oh, señor Stilinski está bastante herido! – exclamó Jennifer con fingida preocupación.

- Estoy bien, señorita. Debería de ver a los demás. – le dijo Stiles con una sonrisa falsa mientras se acercaba a su lugar pero antes fue abordado por la manada.

Danny tomó el rostro del castaño entre sus manos absorbiendo un poco de su dolor, tenía algunos cortes en el rostro, uno de ellos estaba más profundo en la ceja mientras que otro en la barbilla. Tenía unos pocos en los brazos pero nada grave. Los lobos ya estaban corriendo a la enfermería arrastrando al castaño que rio levemente mientras se dejaba hacer, les diría que de seguro los paramédicos irían en unos minutos pero sabía que no era bueno ir en contra los deseos de los lobos.

Mientras Stiles s encontraba sentado en una de las camillas sonrió al ver a los lobos buscando gasas y otras cosas para sanarlo. La puerta se abrió dejando ver a un Derek frunciendo el ceño que se acercó al castaño tomando su rostro con cuidado.

- Estoy bien, los chicos son un poco exagerados. – dijo Stiles mientras disfrutaba del tacto del lobo aunque no lo parecía.

- Fue peligroso. ¿Qué sucedió? – preguntó Derek mientras comenzaba a limpiar los cortes con un algodón con alcohol que Jackson le dio. Stiles siseo ligeramente por el ardor pero no se movió ni un centímetro.

- ¿Quieres la verdad? – el alfa alzó la ceja provocando una pequeña sonrisa en el castaño – Bien, hay un darach en el pueblo. Su magia es la que está causando todas estás anomalías, los animales son los primeros en sentirlo y luego se nota en el clima.

- ¿Qué es un darach? – preguntó Theo mientras sostenía a Liam que quería correr y abrazar al castaño.

- Es un druida oscuro, perdió su camino y utiliza una fuente de poder oscura. Si no me equivocó los sacrificios serán pronto. – suspiro – Sé quién y tal vez pueda hablar con ella, ahorita no esta tan loca por el poder y la venganza. – les dijo Stiles mientras presionaba el puente de su nariz.

- ¡Espera! ¿Acaso ese darach es la maestra Jennifer? – preguntó Allyson mientras todos los lobos lo miraban con sorpresa.

- Si. – miró hacia la ventana – Digamos que es una muy vieja conocida a la que si pudiera mataría con mis propias manos pero tengo que averiguar unas cosas antes.

- Entonces hablaremos con ella. – dijo Derek frunciendo el ceño, no le gustaba nada lo que estaba sucediendo.

- También tengo que advertirles que lo más probable es que venga una manada de alfas, son viejos conocidos y el alfa es bueno. Le hice un pequeño favor hace un tiempo. – comentó Stiles con una ligera sonrisa a lo que Derek alzó una ceja molesto.

- De acuerdo.

- Yo hablaré con Jennifer, necesito que se mantengan lejos cuando suceda. Si libera sus poderes podría dañarlos así que solo déjenme esto. No soy manada pero les pido que confíen.

- Hemos confiado en ti desde el momento en que te conocimos. – le dijo Scott con una gran sonrisa mientras colocaba una gasa en uno de los cortes del brazo.

Stiles bajó la mirada pero los lobos sonrieron al ver las puntas de sus orejas ligeramente rojas.

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El castaño se encontraba sentado sobre el nemeton, sabía que la manada estaba en la mansión y estaban nerviosos. Unos pasos se escucharon y para cuando abrió sus ojos Jennifer se encontraba frente a él.

- Es bueno verte de nuevo Stiles. No pensé que nos volveríamos a ver. – le dijo la mujer mientras se sentaba a su lado.

- No puedo decir lo mismo. No pensé que alguien recordaría, ha pasado mucho tiempo. – su mirada se mostro nostálgica y cargada de tristeza. La mujer tomó su mano sorprendiéndolo.

- Esta vez las cosas no son las mismas. Aunque no lo parezca lo aprendí la primera vez y no importa que haga el resultado será lo mismo. – suspiró mientras miraba al cielo – Muchas cosas han cambiado y tú también. Ya no eres un niño que solo quiere ayudar.

Stiles dejó que la calidez y cariño de la mujer lo relajaba mientras trataba de retener las lágrimas.

- Los años pasan y alguien como yo no puede permanecer como antes. – suspiró de manera temblorosa – Creo que simplemente deje de intentar y me resigne, de nada sirve solo me quedo solo una y otra vez.

Jennifer abrazó al chico entre sus brazos. Stiles cerró los ojos reteniendo las lágrimas, no las dejaría salir, no lo merecía.

- Todo estará bien. Quien sabe quizás todo cambie esta vez, lo siento.

El castaño se quedó callado.

- Deucalion y los demás vendrán por ti. – comentó Stiles después de unos minutos.

- Lo sé, esta vez no voy a luchar. Ya vive demasiado, creo que puedo morir por las manos de la persona que alguna vez ame con todo mi corazón.

Stiles se separó de la mujer con una sonrisa cálida. Jennifer acarició el cabello del chico, se levantó y se alejó de ahí.

- Todos tenemos nuestro final Mieczyslaw.