Te ví en la esquina

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La plástica es un cuerpo extraño

¿Que ves?

Veo miedo.

Terror.

Abandono.

Una fruta muerta.

Masticación.

Frenesí.

Un tono.

Algo que está y por sólo estar.

Lástima.

La chica de la Rosa, sosteniéndose sobre sus tobillos, fría, casi transparente, etérea, beautiful.

No soy yo.

Nunca soy yo.

Siempre es otra, atrás, al fondo, completando la triada.

El padre, la amante , el hijo.

La esposa, el guante que calza, perfecto, cierra todo.

No soy yo.

Nunca soy yo.

Mí yo real no pinta, se desdice , se levanta la nariz, no es un problema, ataca.

Al final , la biología no era un problema , es cosa de salir , romper la linea que nos separa de la intemperie, perecer. Perecer muriendo. Perecer en la repetición, volver. Nunca cruzo la calle, nunca tengo sexo, nunca lo conozco. Esto no pasó. Vuelvo al inicio, en el valle. Él sólo queda prendado de su vieja autonomasia. De repente , encuentra su cómo. Mientras cruzo la calle del supermercado , se besan. Es completo. Nadie supo porqué, ¿será que deje la llave puesta? Giran los planetas , el desierto va más lento , bendita ignorancia, nos hacemos plomo. Los de arriba , los de abajo. En carriles , yendo al nunca , por inercia, siendo incógnitas , cartografía difusa. Una cara que no puedo reconocer. Son demasiados. Tanta gente , se rebalsa de nadies. ¿Cómo se llama? ¿Cuál es su deseo? ¿A qué te instalas, que te arma?

En lo más hondo , se clava la pregunta. Puedo recitarlo de memoria : caída a cuerpo. Si no soy la mujer , si no tengo sexo , caída a cuerpo. En reverso, que se pudra. Caída a tiempo. Nunca pedí nacer, tampoco tuve el privilegio. Caída , al piso, hasta abajo, restregando las fauces contra el pavimento, es mí cielo, es la verdad, no hay nada más que yo, que vos, cuando estás enfermo y sólo. Descarnado, un poco bobo. Vivo. Pícaro, hilarante. Creíste que iba pero regresaba , a casa, como quien no quiere la cosa pero se la aguanta. Cómo un gato, un perro, una rata mugrienta. Fea. Delesnables. La Wacha del barrio , corrida, yo no nací acá, bancate el misterio. Laucha gris, lluviosa , húmeda, la que ataja y pasa hambre, la loca. Se acerca a la pierna , despacito. No le importas a nadie, sólo sos uno más de carne y hueso ¿Querés pelear? Ni a palos, si sos como un alfiler. Alfiler de cielo, a lo mucho de Almagro. Y basta.

Ad Sidera VisusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora