Sofía

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Primero, hablemos de ella. Es este tipo de chica que le gusta solo estudiar y trabajar. Su objetivo siempre fue ser independiente, así tuviera que estar toda su vida trabajando para lograrlo. Muy empoderada y por consecuencia, muy ocupada. Lleva seis años soltera, y no por falta de interés en el amor, a todos les gusta, en especial a los que dicen que no, pero ella fue una de las que olvidé después que la impulsé a su caminata hacia el amor y suficiente decir que debo pagarle con intereses mis deudas aunque no sepa que a causa mía vivió tantos amoríos.

De padres ausentes y sin hermanos, de niña encontró refugio en los libros, en las palabras y en sentir el tiempo pasar. Creciendo siempre tuvo interés en la psicología y cuando llegó a su adultez, parece que fue esa la única conexión correcta que logré hacer con ella, porque sin pensarlo quiso concentrar todas sus energías en ella y hasta el momento, le va bien, si bien con mucha energía, o ansiedad como ustedes le llaman.

Es de las que piensa que solo necesita un café y puede conquistar el mundo. Trabaja como psicóloga en su propia consultoría donde pasa la mayor parte de su vida, sumergida en los desórdenes y trastornos de las personas que a veces tienen más en común de lo que está dispuesta a aceptar.

Su alta estatura y piel pulida la hace ver como una monumental estatua griega, y con su interés por la filosofía, no me sorprendería que lo haya sido en su última vida. Ha usado estos y su atributo de la inteligencia para combatir todas las situaciones que han llegado a su vida, desde la presión de sus estudios, las preguntas de sus propias habilidades para lograr sus metas, lo que llamarían ustedes crisis existenciales, y las perdidas en el amor, de igual manera.

Cada día ahoga su silencio con melodías de piano clásico, que la transportan a una era de la historia que aunque, según lo que he podido ver de su carácter, hubiera sin duda ha sido una de las mujeres conquistadoras y no otra víctima más de las reglas de la civilización de aquel momento, la ayudan a romanizar su presente. Dentro de todas las defensas que ha tenido que imponer en su corazón, su amor al arte la han permitido construir uno de los castillos normandos más opulentos que cualquiera se ha podido imaginar. 

Sr. DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora