Cabello Rubio

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Como de costumbre, Oboro copiaba mi tarea tan rápido que seguro el lápiz prendería fuego en algún momento, él profesor aún no llegaba y eso era muy raro pero era mejor aprovechar el tiempo que quejarse.

–¿Puedes prestarme la tarea también?

Iida Tensei:hijo de él dueño de una de las empresas automotrices más grandes en Japón, alto, cabello negro, problematico como cualquier chiquillo de una familia de 5ta categoría (que es rico solo lo sabemos sus amigos), no había día que no se involucrara en una pelea escolar o callejera, por suerte no era un bullying.

–No le prestes nada, no quiere prestarme dinero.

Shirakumo Oboro:sus padres trabajan para él padre de Tensei, alto, cabello negro, idiota por naturaleza, ni siquiera él sabe como diablos terminó el preescolar y al parecer tampoco se sabe el abecedario.

–Si les prestas la tarea a ellos también a mi.

Kayama Nemuri:sus padres son dueños de una gran sucursal de ropa, altamente atractiva, cabello negro, coqueta de nacimiento, sus cambios de ropa le hacen competencia a sus numerosos novios, esa chica si que sabe sacarle provecho a su belleza.

–Hagan lo que quieran...solo cambien unas cosas para que no sea tan obvio.

Aizawa Shōta:ese soy yo, mi padre trabaja en unas oficinas de una empresa de aerolíneas, soy algo bajo, CABELLO NEGRO, y al parecer amargado como un ¿limón?, no se ni como tengo amigos con mi actitud, pero lo compensaba mi inteligencia.

–Dame el cuaderno.

Mientras ellos peleaban yo recosté mi cabeza entre mis brazos, tenía sueño y no era mala hora para dormir. De un momento a otro todo el salón se quedó callado, levante la cabeza y él profesor entró al salón mire a Oboro y ya no tenía mi cuaderno, no podía ser verdad.

–¿Dónde está mi cuaderno?—me miró nervioso y apuntó atrás, debí habérmelo imaginado antes, lo tenía Sensoji.

Sensoji:no sabemos nada de su familia pero todos creen que lo criaron en una prisión, y por si fuera poco pertenece a una pandilla, alto, cabello negro, molesto como nadie más en esta escuela, su manera más "graciosa" de burlarse de ti es llamarte de todas las formas homosexual, no hace falta decir que no nos llevamos bien.

Mire a Iida y él solo sonrió mientras giraba a Sensoji y su grupo, les dijo algo y le dieron el cuaderno que le paso a Oboro.

–Perdón Shōta, pero—no lo deje terminar, le arrebate mi cuaderno y revise las hojas hasta encontrarme con lo más obvio que tendría después de que lo tuviera en sus manos.

–¿Lo ves? por eso no presto mis cosas—yo con un pene deforme y grande en la boca dibujado en tinta negra estaba en una hoja, bufé mientras arrancaba la hoja y la guardaba en mi mochila para tirarla más tarde.

–Buenos días clase.

Nakaoji Tenma:maestro de adolescentes hormonales por el día, striper de adultos hormonales por la noche, alto, cabello negro, un completo loco cuando se lo propone, la verdad me cae bien.

–Perdón por la tardanza pero el día de hoy tenemos una noticia para ustedes—dejo sus cosas en el escritorio y se sentó en este—tenemos un nuevo alumno, les pido que sean amables con él y pacientes ya que se acaba de mudar desde Estados Unidos hasta aquí—todos comenzaron a murmurar cosas, hasta yo le dije algo sobre eso a Oboro, no todos los días venía un extranjero a tu clase y desde tan lejos—bueno calmense, you can pass—la puerta se volvió abrir dejando pasar a ese chico—¿Can you introduce yourself to the class?

La Excusa Perfecta Para Dedicar Canciones Donde viven las historias. Descúbrelo ahora