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Kokichi se asomó por la pared y logró ver hacia dónde se dirigía Kirigiri.

–––  Se fué a...¡ah, es de la clase 78! ––– Decía Kokichi como si hubiera descubierto América.

––– ¿La clase 78? Espera...¿tú no tenías un amigo allí? ––– Le preguntaba su amiga con curiosidad.

––– Oh...sí. ¿Te imaginas que están saliendo? ––– Exclamó el pelimorado.

––– E-Eso ya es mucho decir, Oma... ––– Le decía la rubia soltando una dulce risa.

Repentinamente, el timbre sonó...

¡Ring, ring...!

Los dos vieron cómo Shuichi se paraba de la silla de la biblioteca. Así que, Kaede agarró a Kokichi de la muñeca y los dos salieron corriendo de allí para que el peliazul no los viera.

La rubia y el pelimorado fueron los primeros en llegar al salón, y luego vieron a algunos de sus compañeros entrar, como Maki, Rantaro, y Miu.

Los dos se preguntaban por qué Shuichi no llegaba, hasta que justo entró.

Vieron que Rantaro lo saludó, y parecía que el peliverde le quería presentar a su compañero Kaito.

Kokichi estaba reflexionando sobre algo en su silla... Por alguna razón, él no podía parar de mirar a su compañero Shuichi, se le aceleraba el corazón. Pero no quería enamorarse, ya que a su amiga Kaede le gustaba el peliazul.

La rubia estaba leyendo algo en su celular, según el punto de vista de Kokichi.

––– ¿Qué estás haciendo, Akamatsu-chan? ––– Le preguntó el pelimorado mientras se asomaba al banco de Kaede.

––– Estoy leyendo unas partituras de piano, mira. ––– Le decía Kaede mientras Kokichi se acercaba a ver.

––– Vaaaya, sabes tocar eso, ¿no? Porque yo no le entiendo nada. ––– Kokichi no entendía nada de piano. Kaede asintió, confirmando que sí sabía tocar lo que estaba en sus partituras.

El pelimorado quería que su amiga le enseñe a tocar el piano, y ella aceptó enseñarle.

Los dieciséis escucharon a la profesora de fisicoquímica entrar, así que todos se quedaron callados.

Tuvieron su clase, y luego, todos se fueron a sus habitaciones. Kaede le insistía a Kokichi sobre que fueran a espiar a Shuichi otra vez.

––– No, no, no, Akamatsu-chan. ¡Ya pareces una acosadora de wattpad! ––– Decía Kokichi mirando a su amiga. ––– Además, Momota y Harukawa-chan están en su habitación, no da ir. –––

––– Bueno...ya comprendí, lo siento. No tomé en cuenta lo tonta que estaba siendo. ––– Le decía la rubia.

––– Nishishi...está bien, ¡yo me iré a mi habitación! ...Buena suerte si acabas estando a solas con Saihara-chan~... –––

Y Kokichi salió de allí dejando a Kaede con una cara de sorpresa. La ojirosa también fue a su propia habitación.

[ En la habitación de Shuichi ]

––– Bueno, ¡Shuichi, ¿qué te gusta hacer?! ––– Le preguntaba Kaito a Shuichi.

––– ¿Lo acabas de conocer y ya lo llamas por su nombre? Es algo...inrespetuoso. ––– Decía Maki viendo a Kaito.

––– E-Está bien, no hay problema. Bueno, contestando tu pregunta, Momota-kun, pues...me gusta leer, me gusta ver novelas, y...ya no sé. ––– Respondía el ojiazul viendo el suelo.

––– Pff- ¿sólo eso? eso es cosa de perdedores. Con razón no tienes amigos. ––– Exclamaba Kaito con un tono burlón hacia Shuichi.

Maki se había sorprendido, pero pensaba igual que el astronauta.

––– ¿Qué...? Pero... tú fuiste el que me preguntó, Momota-kun... ––– El ojiazul estaba confundido y tenía algo de miedo.

––– ¡Y claro, era para ver si eras un fracasado o un chico como la gente! Pero seguro solo lees para hacerte el interesante. ––– Le decía el astronauta.

––– Ya estuvo bien, Kaito. Vámonos, no perdamos el tiempo con este perdedor. ––– Maki, quien había estado modo espectadora, le dijo a Kaito que se fueran de allí.

El astronauta aceptó irse, pero antes, le empujó el hombro a Shuichi con su mano, murmurándole "idiota".

Shuichi no sabía qué hacer. Sabía que, en aquella escuela, nadie era normal. Nadie.

Continuará...

𝘌𝙉𝖠𝗠𝖮𝗥𝘈𝗗𝖮𝗦 𝘗𝙊𝖱 𝗡𝖠𝗗𝘈 ᵒᵘᵐᵃˢᵃⁱ ˢᵃⁱᵐᵃᵐⁱ ˢᵃⁱᵐᵃᵗˢᵘDonde viven las historias. Descúbrelo ahora