Aquella tarde buscaba sorprender a su enamorada con una preciosa cena con postre incluido y un precioso anillo de compromiso, pero sus planes se vieron abajo cuando fue secuestrado y obligado a mantener una relación con un pandillero buscado y pelig...
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Antes de quedarse dormido mickey había abusado de su cuerpo una vez más antes de dejarlo dormir.
A la mañana siguiente se despertó temprano, el dolor de su cuerpo era más leve que ayer. -"gracias a Dios..."- Al intentar levantarse un dolor agudo proveniente de su entrada le ataco, desencadenando hipidos y lagrimas. -"Dios... por favor"
¿Que clase de hombre en su sano juicio tenía relaciones sexuales con un extraño?, mickey-kun era un extraño, ¿como el podría siquiera querer tener algo con el?
Dios, se acababan de conocer.
¿En qué extraño mundo un extraño quería casarse con otro extraño?
¡Que locura!
-"¡takemitchy!, despertaste, por fin" - pronuncio repentinamente mickey.
-"mick... ¡mickey-kun!"- un dolor más agudo que antes le ataco, solo que está vez era en su vientre -"¡ay!" - al parecer mickey exagero un poco.
-"¿tanto me extrañaste?" - pregunto burlón.
-"¿si?"- respondió con duda, al intentar levantarse.
Más no pudo, ya que un dolor intenso se presentó y como reflejo de volvió a sentar bruscamente.
-"vaya...~, buena vista que tengo..." - pronunció de manera pervertida acercándose a paso lento hacia donde se encontraba sentado.
-"¡Mickey-kun! Detenga se!" - exigió exaltado y asustado, intentando taparse sus zonas íntimas.-"¿¡que intenta hacer?!" - preguntó intentando alejarse de su cuerpo.
-"solo intento repetir lo de ayer...~"- cuando finalmente pudo acercarse agarro el cuerpo de takemichi logrando abrazarlo y colocarlo justo encima suyo.
-"no... No de nuevo." - un jadeo se escapó de sus belfos al haber Sido forzado a sentarse sobre una superficie en constante movimiento causando que se aferrara lo más que podía en los hombros de su abusador.
-"esto no sé trata de si quieres o no, lo vamos a repetir las veces que yo quiera y cuando yo quiera, ¿oíste?"- takemichi lo miro con terror puro, lo que acababa de decir lo hizo temblar completamente. "¿Que persona en su sano juicio diría eso?", Unas pequeñas gotas de lágrimas se escaparon de sus ojos aterrado
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--- mikey-kun, ¡duele! --- soltando lagrimas se aferraba a la espalda del contrario. --- detente , duele! --- llorando a mares pedía y suplicaba al contrario que se deteniera pero envés de seder aumentaba la fuerza de su agarre en la cintura del ojiazul logrando meter más profundo su miembro.
--- me encanta que llores....
Después de tres corridas dentro del blondo se detuvo y se fue de la habitación con una sonrisa dejando solo al ojiazul en un mar de lagrimas.
