Aquella tarde buscaba sorprender a su enamorada con una preciosa cena con postre incluido y un precioso anillo de compromiso, pero sus planes se vieron abajo cuando fue secuestrado y obligado a mantener una relación con un pandillero buscado y pelig...
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Mickey amaba a su takemicchy, lo amaba desde el primer día que lo conoció, le costo entender sus sentimientos pero gracias a su difunto amigo llamado draken pudo entender sus sentimientos, ahora que tiene la oportunidad de mostrarle su amor a su takemichi la esta cagando y el lo sabe.
- oye.. hmm.. ¿sanzu? ... me podrías ayudar en algo?.. - un tanto indeciso logro preguntarle a su mano derecha si podría ayudarlo en su cita con su takemitchy.
- claro. - respondió feliz. - en que podría serle útil?
- quíero que prepares una cita para mi y MI takemitchy.- contesto serio.
- claro que puedo hacerlo. - mientras conducía planeaba en su mente todos lo planes que tenía para la cita de su rey y su reína.
Mientras tanto, un pelinegro de ojos azules terminaba de servirle su desayuno al desconocido que conoció hace un momento atras.
- aquí tiene señor. - se agacho e hizo una reverencia.
- gracias ojos bonitos, mi amigo también necesita su desayuno. - dijo tomando el tenedor y empezando a disgustar el platillo enfrente de todos.
- claro. en un momento se lo traigo. - se levanto y fue corriendo hacia la cocina - menos mal que hice más platillos. - tomo el plato y lo puso en una bandeja dirigiéndose de nuevo hacia el par. - aquí tiene señor.
- señor?!, vamos takemichi, ni que estuviera tan viejo. - regaño el de cicatriz hacia su viejo amigo.
- ¡¿kaku - chan?! - grito feliz el ojiazul. - cuanto tiempo!. - corrió y abrazo a su amigo.
- hey, hey, un sirviente no puede tocar a sus amos. - informo.
- a todo esto, usted como se llama? - pregunto el pelinegro deshaciendo el abrazo.
- no tendría porque decírtelo, pero te lo dire por qué quiero que me conozcas, yo me llamo izana kurokawua.
- mm, bueno, ya que ustedes tienen su comida ya pueden irse?
- justo eso iba a hacer, nos vemos , takemichi. - se despidió kakucho agarrando de la ropa a izana y irse.
El ojiazul se retiro de hay dirigiéndose de nuevo a la cocina para comer un poco, todo eso del "trabajo" no le dejo comer ni un poco.
Ya pasando tres horas takemichi termino el ultimo plato de comida que había preparado para el almuerzo, ahora solo tenia que esperar a que los ejecutivos de bonten llegaran ordenando su comida.
Y así fue, primero kakucho e izana llegaron y pidieron su comida, despues los haitanis un tal kokonoi quien ni si quiera le hablo o saludo y terminando la hora un tal takeomi quien tomo su plato y se fue.
