CAPÍTULO 18.

405 81 2
                                    


Contigo...੭ु


   
Un Hoseok completamente vestido se encontraba abrazado a Taehyung sobre el sofá de la sala. Frente a ellos, en la mesita de centro, tres hadas daban vueltas mientras explicaban lo que había sucedido anteriormente.

— ...Entonces nosotros creímos que lo más conveniente era convertirte en un humano.— Decía Soyeon seria.

— Pero... ¿Y la jefa no se ha enojado? — Hoseok estaba preocupado, no quería que esas tres hadas tengan problemas luego.

— Ella sabía que nosotros teníamos la razón, no hemos cometido ningún error, así que no puede decir nada.— Yejin hablaba con una sonrisa en su rostro, estaba feliz de ver al pequeño sano, convertido en humano y también se sentía feliz por el humano, se notaba el amor que sentía por Hoseok.

— Solo no quiero que tengan algún problema por mi culpa, después de todo ustedes hicieron todo esto por mi...— Hoseok estiró sus manos, dejando que las hadas se subieran a estas. Las acercó a su rostro y mostró una de sus bellas sonrisas.— No saben cuánto les agradezco, ustedes me han ayudado demasiado y no se como pagarles.

— No tienes que pagarnos nada Hobi, tu mereces ser feliz, y si esta es la forma, te ayudaremos todas las veces que sean necesarias.— Habló Jimin, este sentía que había logrado su meta. Ayudar al dulce pelirrojo.

— Muchas gracias, realmente se los agradezco mucho.

Las lindas hadas se acercaron al pelirrojo y con sus bracitos le dieron un dulce abrazo, le habían tomado mucho cariño en poco tiempo.

Taehyung miraba la escena con una gran sonrisa en su rostro, no podía estar más feliz. Su Hobi estaba nuevamente con él y se quedaría allí, también les agradecía mucho a las hadas, no solo habían salvado al lindo pelirrojito, sino que le habían dado el mejor regalo de todos. El dejar que puedan estar juntos.

— Muy bien...— Habló Yejin.— Ya tenemos que volver a nuestro hogar, no podemos estar aquí por más tiempo.— Se sentía un poco mal, aún quería quedarse allí.

— Pero... ¿Los volveré a ver?— Preguntó Hoseok triste.

— Por supuesto que sí Hoseokie, se que tu no dirás nada de nosotros y no tenemos porqué temer de ustedes.— Dijo Jimin, quería hacerse cercano a la pareja.

Las hadas tomaron vuelo para dirigirse a la cocina, fueron seguidas por ambos chicos, quienes iban tomados de las manos.

— Nuevamente gracias, aprecio mucho lo que han hecho por mí.— Hoseok no quería despedirse aún, pero también quería tener algo de tiempo para hablar con Taehyung, había extrañado demasiado al rubio.

— No hay de qué Hoseok.— Soyeon se acercó al pelirrojo y acarició su mejilla con cariño. — Mañana mismo traeré tus pertenencias, sé que tal vez no te sirvan de mucho, pero sé que son importantes para ti.

Hoseok asintió y también devolvió el cariño del hada, acariciando la cabecita de ella.

— Adiós chicos, nos vemos pronto. — dijo Jimin.

Taehyung les abrió la ventana, dejando que estas salieran volando para finalmente volver a su hogar.

Un hogar que Hoseok extrañaría, pero que no deseaba volver.

Su verdadero hogar era Taehyung.

Kim tomó la mano de Hoseok y dejó un pequeño beso en ella, para luego llevarlo consigo a la sala. Tenían que recuperar el tiempo perdido.

 

꧁𝑪𝒖𝒆𝒏𝒕𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒉𝒂𝒅𝒂𝒔꧂
V𝒉𝒐𝒑𝒆
 
 


Los chicos se mantenían fuertemente abrazados sobre el sofá mientras miraban una película. Específicamente Tinkerbell.

Hoseok parecía un niño, totalmente metido en la película y prestando atención a cada detalle.

Por otro lado, Taehyung se dedicaba a mirar con cariño a Hoseok, no podía apartar su vista de un ser tan precioso y magnífico como lo era ese pelirrojo. Sus ojitos brillantes, su pequeña naricita y sus labios que parecían corazones.

— ¡Mira Tae! ¡Ellas nacen gracias a la primera risa de un bebé!— Hoseok miraba asombrado la pantalla mientras apuntaba con su dedito.— Eso es muy tierno...

— Tú, eres muy tierno.— Dijo Taehyung, atrayendo la mirada del más bajo, haciendo que sus mejillas se convirtieran en dos tomatitos. Kim quería llenarlo de besos.

Yo no soy tierno. — Dijo avergonzado.

Si dices eso solo pareces más tierno.— Taehyung reía bajito al ver la expresión del contrario.

— ¡Ya~! Cállate... — El más pequeño se acercó a Taehyung y envolvió la cintura de este, apoyando su cabeza en su pecho. Justamente como lo hacía cuando aún era un hada.— Extrañaba esto.

— Yo también bonito, no sabes cuanto...

— Y... ¿Qué ha sido de ti estos días?— preguntó curioso.

— Bueno, los primeros días sin ti fueron horribles, un infierno. — Taehyung acariciaba la suave cabellera mientras relataba sus días.— Solo pensaba en ti y en la falta que me hacías, lo vacío que estaba el apartamento y que te necesitaba aquí... Pero luego conocí a unos buenos chicos que me ayudaron un poco, trataron de distraerme y no dejaron que siguiera lamentándome todo el día, aunque en la noche solo pensaba en ti y si estabas bien.

— Quiero conocerlos.— Hoseok sonrió.— Tengo que darles las gracias por ayudarte, no me gusta que te hayas sentido tan mal...

— Te los presentaré cuando quieras, pero en este momento quiero disfrutar de tu compañía, no quiero perder tiempo.

— No me iré a ningún lado Taehyung, me quedaré aquí el tiempo que tu me permitas...— Dejo un pequeño besito sobre el cálido pecho.

— Pues entonces no te irás nunca, porque te quiero siempre a mi lado...

— Me parece perfecto Tae... Pero con una condición. — Hoseok levantó un poco la vista y miró a Taehyung.

¿De qué trata?— Adoraba tener a Hoseok de esa manera, era muy dulce para su amargo corazón.

— Quiero ayudarte en todo lo que pueda, pero para eso tu necesitas ayudarme primero, tengo que integrarme a la sociedad y así poder trabajar o lo que sea necesario para aportar algo aquí...

— Bien, yo te ayudaré en lo que sea necesario, no te preocupes por eso bebé.

— Muchas gracias Tae... — Hoseok se estiró y dio un pequeño besito en los labios de Taehyung quien lo recibió gustoso.— Pero ahora, ¿Podemos seguir viendo la película? Es muy bonita.

— Por supuesto bonito, miraremos toda la saga si quieres...

Y así estuvieron lo que restaba de la tarde. Mirando películas de Tinkerbell.


















   

  
(N. J. A.)

𝘾𝙐𝙀𝙉𝙏𝙊𝙎 𝘿𝙀 𝙃𝘼𝘿𝘼𝙎 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora