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La única cosa extrema que Soonyoung planeaba hacer ese día era declarársele al chico que le gustaba, no terminar peleando a puño limpio contra zombies.

Y es que, su "arma" había salido volando cuando intentó apartar a algunos, y no tuvo de otra que seguir defendiéndose con sus manos. Era algo peligroso, considerando que al parecer si le mordían, se convertiría.

—¡Agáchate!— Ni bien escuchó la orden la acató, sin detenerse a pensar en el porqué.

Y que bueno que lo hizo, considerando como ni un segundo después una de las criaturas había saltado al intentar taclearle, pero Wonwoo le alertó a tiempo, y no dudó en clavarle la "estaca" por el cuello.

Habían notado que esa era la forma más efectiva de detenerlos.

—Gracias...— Musitó, una vez se reincorporó.

—No es nada...

Habían logrado hacerse paso hasta las afueras del segundo piso, donde se supondría estaba el hermano de Jihoon. Sin embargo, para poder avanzar tuvieron que enfrentarse a unas diez de esas criaturas porque les habían pillado.

Costó un poco, pero pudieron hacerse frente.

—¿Cuál es su salón?— Preguntó, tratando de recupera el aire.

—El "1-C"— Respondió el menor, y Soonyoung abrió sus ojos al reconocer dicho grupo.

Sus amigos pertenecían a este.

Por la adrenalina y el mantenerse vivo...se olvidó por completo de ellos.

Le reconfortó saber que ni Jun ni Seokmin estaban en la escuela por lo del torneo, pero, ¿Qué hay de Seungkwan? ¿Habría logrado escapar?

Hasta el momento no han visto a ningún sobreviviente, y recién cayó en cuenta que salir de allí sería más difícil de lo que pensaba.

—Mi amigo también es de allí— Musitó mirando a la distancia el salón, y afortunadamente tenían el paso libre.

Al menos por delante.

—Corran.

Ni bien Wonwoo dio esa orden, se escucharon pisadas apresuradas por detrás, alertándoles del peligro inminente.

Lograron llegar al aula, sin embargo esta estaba bloqueado desde dentro, y por las ventanas podían ver a otros estudiantes apilando escritorios en ambas puertas.

—¡Déjennos entrar!— Pidió Wonwoo, tocando fuertemente con su puño la madera— ¡Abran!

—¡¿Cómo sabemos si es seguro?!

—¡Por favor!

Fue a último minuto que les dejaron pasar, pero por lo menos habían salido ilesos.

Por ahora.

Ni bien ingresaron, los inspeccionaron de pies a cabeza. Incluso les hicieron quitarse ciertas prendas para verificar que todo estuviese en orden, lo cuál fue incómodo, pero entendían que era necesario.

Al terminar, Jihoon empezó a buscar a su hermano para saber si estaba allí, y Soonyoung hizo los mismo pero con Seungkwan.

Tal parece que ninguno tuvo mucha suerte, a juzgar por la mirada decepcionada del menor.

—¿Ustedes son de este salón?— Le preguntó al resto de estudiantes, recibiendo una mayoría de respuestas afirmativas— ¿Acaso han visto a Lee Jung...?

Soonyoung se volteó hacia otros más, para también preguntar por su amigo, lo que le dejó con una pizca de esperanza.

—Lo vi escapar de la cafetería...— Le aseguró uno de los menores con voz temblorosa, que estaba abrazado a sí mismo, hecho bolita en una esquina del suelo— Iba con otro de nuestros compañeros...pero no recuerdo su nombre.

Instituto Sebong [SEVENTEEN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora