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— Entiendo lo que dices pero la solución no era la violencia –

— El me golpeó primero Mina que esperabas –

Kirishima estaba contando una anécdota de un chico que lo confundió con un estúpido que se había metido con su pareja y pensaba que era él y le dio el primer golpe después de estar discutiendo por mucho tiempo, decía que no podía haberse quedado así ya que no fue el que lo había hecho, si no un chico llamado Chisaki.

— Perfecto pero lo que trata de decirte Mina es que esa no era la manera de responderle –

Observé a Denki y a Mina con una expresión cansada, intente hacerlo razonar pero aún así no quiso el chico es bastante terco.

— ¡Pero me golpeó! –

— ¡Se había confundido! –

— ¡Mina aún así me golpeó! –

Reí por los gritos que tenían en la cafetería de la universidad, mientras trataba de no mirar mucho a Katsuki que se encontraba retorciéndose de placer al tener mi pie en su miembro moviéndolo de arriba a abajo.

Quise desesperarlo aún más así que empecé hacer la fricción de lado a lado arriba y abajo logrando que golpeará su frente con la mesa de la banca y quitará mi pie al Uraraka auxiliarlo.

— ¡Estoy bien no me toquen! –

Sonreí grandemente y me levante acercándome a él, este que me miraba con una mirada de súplica y le ofrecí mi mano para que se levantara.

— Anda tómala, te llevaré a enfermería –

Intentaba no reírme ya que como tenía una erección si se ponía de pie todos la verían, pues por el drama que teníamos todas las miradas estaban puestas en nuestra mesa.

— Cr-creo que me marearía si lo hago solo –

Me crucé de hombros y dejé el espectáculo cargándolo como princesa, oculto su rostro en mi cuello y cubrió sus partes con sus manos.

— Volvemos enseguida, puedo ir solo –

Le respondí a Kinoko que quería acompañarnos. En el camino estaba que me explotaba de la risa de la nada y este se enojaba exclamando que me callara todo sonrojado.

De vez en cuando le mostraba la lengua como un niño y depositaba besos cerca de su oreja provocándolo.

— ¿Porqué ahora me acosas sexualmente? –

— No es acoso si tú lo aceptas y más si lo disfrutas Katsuki –

Sentí el temblor del anterior mencionado así que lo observé extrañado y este preguntó.

— ¿Porqué me llamas por mi nombre? –

No respondí mirando fijamente sus ojos y este al tiempo desvió la mirada.

— ¿Cómo quieres que te llame? –

Se encogió aún en mis brazos y suspire.

— No espere tanto tiempo para que me contestes con otra pregunta estúpido nerd –

Llegamos a enfermería y no había nadie, así que lo acosté en una camilla y ya se sentía un poco mejor.

— Gracias –

— No hay de que –

— ¿Porqué cabellos de puntas te llama por tu nombre? –

— Es mi ex –

Sentí como mi corazón dio un vuelco extraño y como mi estómago cada vez se sentía mal. Su ex, así que eso es lo que es.

— ¿Porqué se dejaron? –

Trate de preguntar indiferente pero al tener mi mirar en el suelo y mis manos puños apretando la esquina de la camilla no ayudaba.

— Porque no somos compatibles –

No dije más nada y me acosté cubriendo mis ojos.

— Katsuki recuerdas esos tiempos donde estábamos enamorados del otro –

— ¿Y te diste cuenta después de madurar imbécil? –

— Siempre lo supe –

Suspiro

— Pero no podía estar con una persona como eras antes –

— ¿Porqué te fuiste? –

Mi voz salió como un quejido y suspire enojado tomando asiento mirando sus ojos, estos que me observaban como un fuego ardiente.

— Para darte una lección –

Aún continuaba mirándolo y después de unos segundos pase a decir.

— Esa lección se te fue de manos, te pusiste incluso más bueno que el pan maldito nerd –

— Y tú no te quedas atrás –

Me guiñó el ojo y me acosté debidamente en la camilla a descansar un poco y aprovechar la oportunidad. Antes de irme a los brazos de morfeo escuche como Deku decía "descansa chico explosivo".

💣

— ¡Vamos Bakugou golpea! –

— ¡Gol! –

Todo el público que se encontraba observando el juego nos gritaba y felicitaba.

Estaba observando de reojo, no estaba buscando a nadie en específico, entonces porque a lo lejos, en aquellas gradas; pude ver a Deku sonriéndome y lanzándome un beso para después despedirse con la mano y darme la espalda, aquella espalda que tanto quiero aruñarla.

Nos colocamos en fila, y me quedé observando a todos con una expresión seria pensativo.

El cabello de puntas es su ex, por lo que me ha dicho no son compatibles, pero será de parejas porque como amigos se llevan de maravilla. Me los imagino de parejas y...no se ven tan mal.

Mordí mi labio inferior sin entender mis emociones.

Tome mis cosas cuando terminamos de saludar al público y al salir todos comenzaron a cantar mi nombre en celebración.

— ¡Bakugou, Bakugou, Bakugou! –

Continué caminando normal, y después de salir de los establecimientos de la universidad pude ver nuevamente a Deku, pero esta vez acompañado, y al verlo con el idiota de las mitades, solo pude apretar el largo de la mochila y desviar tanto mi mirada como mi camino.

Al llegar a mi casa, me duché y me vestí con unos bóxers negros y una franela del mismo color un poco ceñida a mi cuerpo.

Estaba en la cocina sin saber que hacer pero seguro era que me estaba muriendo.

Observaba el ventanal que tenía enfrente y apoyé mis manos en la meseta de la cocina recordando la última escena que vi en la universidad.

Ese mitad y mitad es un pervertido, igual lo soy pero a mi se me perdona ya que lo conozco desde hace mucho tiempo a decir verdad y nos gustamos desde hace más de diez años. Y al parecer eso no ha cambiado.

Continué cortando los vegetales al decidir que hacer e inesperadamente sonó el timbre por toda la casa.

"¿Quién será?".

Los viejos están trabajando a estás horas y los extras están aún tomando clases en la universidad.

Al abrir la puerta me llevé una sorpresa al punto que mi expresión fue una muy asombrada con la boca bastante abierta.

– ¿Qué haces aquí y cómo supiste dónde vivo? –

¿Qué pasó?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora