Eliot... my friend

Capitulo 3

Querido Eliot:
Sé que debes estar bastante confundido por mi repentina petición, por lo que te explicaré aquí todo lo que no seré capaz de decirte a la cara.

Hace mucho que soy consciente de que nuestro matrimonio es solo una ilusión. Sinceramente no te culpo por permanecer a mi lado cuando ya no era yo la mujer de tu vida, siempre supe que tu sentido del deber no te permitiría dejarme y me aproveché de eso, solo pensé en lo que sentía, ignoré deliberadamente tu sufrimiento y me regocijé un poco por el de ella.

Por mucho tiempo la odié, la culpé de todo, pero comprendí (un poco tarde) que no se puede controlar de quien nos enamoramos. Fui una egoísta, te acusaba de serme infiel con ella, mientras tú renunciabas al sentimiento más puro con tal de no herirme.

Eliot, te convencí de venir a su ceremonia de premiación, te ayudé a escribirle esa carta y al volver de la fiesta te entregaré los papeles del divorcio. Esta es la única forma en la que puedo compensar mi mal proceder, no te sientas culpable, desde hace más de veinte años que sacrificas tu felicidad por mi, ahora es mi turno.

Olivia es una mujer increíble, ahora que no me ciega el odio puedo reconocerlo, se que te hará feliz y que tú te esforzarás todos los días para retribuírselo, nuestros hijos la adoran y ya son lo suficientemente maduros para entenderte. Es decir, no tienes más excusas, Eliot Stabler. Ella también te ama, pero tú abandono debió dejar muchas secuelas, lucha por su perdón, por recuperar su confianza... Nunca será tarde para escribir su historia de amor.

Con mucho amor y deseándote lo mejor en tu nuevo comienzo... Kathy.

Eliot terminó de leer y notó que lloraba, Kathy le daría el empujón que necesitaba para atreverse a apostar por su felicidad y aunque ya no estaba las palabras en su carta cumplieron con su objetivo.

(Fin del flashback)

Poco a poco las dudas se aclararon, la culpa desapareció. Agradecía a la rubia lo que hizo por él y reconocía que la culpa no fue toda de ella, estaba decidido a seguir su consejo, pero Olivia y su terquedad no se lo pondrían fácil, sonrió ampliamente cuando la castaña volvió a sus pensamientos... Estaba más que perdido y no le importaba.

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Ella tenía un plan y de cierta manera funcionó... Luego veremos qué tantos estragos causo ese beso en Olivia.

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