Capitulo 22

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La pequeña interacción hizo que Olivia y Amanda intercambiaran una mirada extrañada.

— ¿Por qué la tienen esposada? — cuestionó Eliot confundido.

— ¿La conoce, detective? — inquirió la capitana ignorando  la pregunta del hombre,  necesitaba saber quién era está mujer lo antes posible.

— Claro. Es la agente Tia Leonetti, trabajé con ella en Italia varias veces y nos hicimos amigos — respondió recibiendo una suave sonrisa de la italiana ante su última afirmación.

— Muy bien, le quitaré estas. — anunció señalando las esposas — Sin embargo, la agente aún tiene mucho que explicar. — afirmó con una mirada dura puesta en la nombrada —  Rollins, por favor lleva a nuestra invitada adentro. — pidió, las mujeres se marcharon y la castaña centró toda su atención en el ojiazul.

— Tu amiga estaba forcejeando con la joven Vitale, por eso la arresté. — contó, en la expresión de Eliot se notaba que estaba extrañado por las acciones de la agente — Ell, ¿qué tan bien la conoces? — el detective pensó por un segundo que su pregunta podría tener otras implicaciones, pero una mirada a sus ojos le aseguró que por ahora su inquietud era profesional.

— Lo suficiente como para estar seguro de que debe tener una buena explicación para esto. — afirmó.

— Bien, entonces vamos a escucharla — empezaron a caminar hacia la entrada, pero cuando Eliot iba a abrir la puerta, Liv recordó algo y lo detuvo.

— Casi olvido preguntarte, ¿Cómo les fué a ti y a Noah? — el rostro de ambos se iluminó ante la mención del pequeño.

— Increíble, estaba muy emocionado cuando me vió afuera de la escuela — la sonrisa de Eliot casi no cabía en su rostro — Preguntó por tí, se aseguró de que estabas bien, después de eso no paró de hablar sobre su día, cosas que le gustan, planes para hacer los tres, también me hizo un interrogatorio completo sobre mi vida y mis gustos — ambos rieron un poco con lo último — Bueno, fuimos a comer a un restaurante y después lo llevé a tu departamento, Lucy lo recibió — finalizó, la castaña sentia que podría echarse a llorar si no se controlaba, la hacía muy feliz que sus dos hombres se llevarán tan bien.

— Me alegra que se divirtieran. Gracias, Eliot. — habló con su voz algo entrecortada.

— Liv — tomó su mano con ternura — Debes dejar de agradecerme, soy yo el que tiene que estar agradecido contigo. — aclaró, Olivia negó con la cabeza e iba a refutar, pero él la detuvo tomando su mejilla — Si, es verdad. Así que gracias, Olivia Benson, gracias por dejarme formar parte de sus vidas y regalarme está bonita experiencia con Noah. Prometo que no los voy a defraudar. — la castaña lo abrazó con fuerza y el la rodeo con sus brazos con la misma intensidad. Ella ocultaba la cara en su pecho, apretando sus párpados para evitar las lágrimas y él sobaba lentamente su espalda. Luego de un rato, Liv habló.

— ¿Tenemos que ir a trabajar? — dijo en broma.

— Tenemos — asintió el ojiazul, ella se separó con un puchero y Ell no pudo evitar reir. Finalmente entraron al edificio, sus sonrisas se borraron al pensar que tenían mucho por resolver antes de que acabara el día.

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Adentro, la detective Rollins estaba terminando de informar a los presentes el resultado de lo que debió ser un acercamiento normal con una víctima. Cuando Eliot y Olivia llegaron sus compañeros tenían una mirada algo recelosa puesta en la mujer que había entorpecido el camino de su investigación.

— Bien, agente Leonetti, es momento de escuchar su versión de lo que ocurrió hace rato — habló la capitana.

— Mi oficina en Italia está rastreando hace tiempo a un grupo que distribuye armas de contrabando en el país, lamentablemente no hemos dado con la identidad de los principales en dicho grupo, pero notamos los movimientos irregulares de Alex White y su hotel, creemos que a través de él sería posible descubrirlo. — empezó a explicar, sus movimientos y forma de hablar se les hacían familiares a la mayoría — Hoy estaba intentando entrar en su mundo, al parecer quieren incluir un menú italiano en su restaurante y aproveché la oportunidad...

— ¿Tu cocinando? Eres terrible, Tia. — intervino Eliot burlándose de la mujer.

— ¡Hey! He estado aprendiendo estos años — se defendió — O tal vez consiga que me contraten como mesera. — agregó y ambos rieron pequeñamente.

— Todo bien hasta ahí — interrumpió Bell notando la expresión ligeramente tensa de la capitana Benson — Pero, ¿Cómo se relaciona con Antonella Vitale? — cuestionó para redireccionar la conversación.

— De ninguna forma, mi encuentro con la chica fue fortuito. — afirmó ganando una mueca incrédula de parte de las oficiales al mando — Me pareció que estaba en problemas, así que pregunté por ella a una de las empleadas, me dijo que no sabía mucho porque la joven no maneja muy bien el inglés, pero se enteró que provenía de Italia. Quise ayudarla, pensé que la barrera del lenguaje no le permitía recurrir a alguien, al terminar mi supuesta entrevista de trabajo en el hotel pasé por la parada del autobús, la ví allí y decidí acercarme. Apenas empecé a presentarme se espantó, murmuró velozmente algunas palabras en español e intentó correr, yo solo traté de evitar que se fuera y comprendiera que yo no representaba un peligro. — pausó su relato y su mirada se posó unos segundos en Olivia que se encontraba sentada en la mesa de un escritorio cercano — De hecho, lo estaba consiguiendo, cuando la "policía ruda" apareció para derribarme — comentó. La capitana se puso de pie y se enderezó en toda su altura, hasta una mujer tan dura como Tia se sintió intimidada ante ella.

— Ah, ¿entonces es nuestra culpa? — dijo con tono mordaz. Eliot estaba sorprendido por la actitud de su compañera y algo preocupado por la integridad física de su amiga italiana. Miró a Fin y por la tranquilidad del hombre supo que esta era una reacción esperada, la capitana Olivia Benson no toleraba que se metieran en su camino y el de su equipo, además no iba a permitir que nadie cuestionara su posición — Por cierto, soy la capitana Benson para usted. — indicó con dureza.

La agente frunció ligeramente el ceño al escuchar el apellido, olvidó por un momento que la estaban acribillando y centró su atención en Eliot, ¿era esta la mujer de la que alguna vez le contó?. Una mirada al hombre lo confirmó, la admiración con la que veía embelesado a Benson era un reflejo de lo que halló en sus ojos la noche en la que, algo pasado de copas, le habló de ella, su mejor amiga. Claro, ahora habia algo más, algo que no podía identificar o quizá no quería.

— Capitana, ¿me permite unos minutos en mi oficina? Hay una información que quiero discutir con usted. — la sargento Bell fue quien cortó el tenso momento y aunque todos sabían sobre que iban a hablar, agradecieron internamente su intento de pacificar el ambiente — Sargento, detectives, sería adecuado que se presentarán e indicaran a la agente dónde debe ir si necesita beber algo u otra cosa. — sugirió y los nombrados asintieron de acuerdo. La morena le hizo a Eliot una seña para que las acompañara y los tres se dirigieron escaleras arriba hacia la oficina de la sargento.

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¡Hey! Quería publicar algo hoy y aquí lo tienen. Muy pronto el siguiente. Is a promise.

Un poco de tensión y Olivia demostrando su autoridad, majestuosa.

Dejen aquí algo que esperen leer en el próximo cap, los estaré leyendo.

Gracias por leer, votar y/o comentar. ❤️

Eliot... my friendDonde viven las historias. Descúbrelo ahora