ABRE TUS BRAZOS A LA VIDA

12

No es nada Angie - La tranquilizó abrazándola. Pero Angelique no se tragaba ese cuento de que nada pasaba, las manos de Anahí estaban estrangulándole los brazos. Trató de separarla de su cuerpo para mirarla pero no pudo.

-Anahí no estás bien - Tomó su celular que estaba sobre la mesa y trató de llamar a Poncho, pero Any no la dejó.

-Ya - Dijo suspirando. -Es uno de esos "peores dolores de cabeza de la vida", pero nada grave.

-¿Nada grave? No soy tonta Any, puedes tener un accidente cerebro vascular ¿Lo sabes? - Any sonrió y negó.

-No me va a pasar. ¿Qué no se te tiene que paralizar la mitad del cuerpo? Yo lo siento normal, es solo un dolor. Y quizás si sea más fuerte por mi operación, pero no creo que sea nada grave.

-Llamaré a Poncho - Negó -No voy a ser la cómplice si algo te ocurre.

-Angie no quiero preocuparlo. Ahorita está trabajando.

-Con más razón. Nos vamos al hospital - Dijo incorporándose. Any se negó.

-Odio los hospitales - Expresó entre dientes. -Más luego de lo que pasó.

-Any, por favor. No esperes a tener más síntomas, cuanto más tiempo transcurra, más difícil será reparar el daño causado. Así que nos vamos - Tiró de su mano para incorporarla y fue un acto erróneo. Anahí se mareó y volvió a tomarse la cabeza. -No, no Any - Angie tuvo ganas de llorar. -¡No seas cabezota y vamos! ¡¡María!! - Llamó a la empleada que estuvo en un instante en el jardín. -Te quedas con las niñas por favor. Vamos al hospital.

-¿Le sucede algo a la señorita Anahí? - La miró y Any mantenía los ojos cerrados, apoyada sobre Angelique.

-Se siente mal - Contestó. Nicky llegó corriendo a su lado.

-¿A dónde van? - Preguntó la chiquita.

-Nicky, mi amor, te quedas con Elisa y María. Tu mamá y yo regresamos en un rato - Le dio una miradita para tranquilizarla, pero Nicky miró a Any.

-¿Mamita? - Anahí abrió los ojos y trató de sonreír. Angelique notó que no pudo hacerlo.

-Esto es grave - Susurró. -María, quédate con ellas. No sé a que hora regreso. Por favor, hasta que no venga Alfonso a buscar a Nicky no la dejes ir con nadie - Previno. La empleada asintió y ambas ayudaron a Any a caminar. Llegaron al garaje y Angelique acomodó a Any en el asiento de copiloto, colocándole el cinturón.

-Any... ¿Qué sientes? - Preguntó saliendo de la cochera. Any no pudo hablar, solo tenía los ojos cerrados. -Contéstame por favor - La miró y notó la expresión de confusión en su rostro. -Any - Sollozó. Verla en ese estado y sabiendo que algo grave podría sucederle, no pudo contener el llanto.

Condujo lo más rápido que pudo, afortunadamente su casa no quedaba a más de quince minutos del hospital, y en seguida estuvieron allí.
Apenas aparcó, dos médicos vieron la desesperación de la castaña y se acercaron. Inmediatamente acercaron una camilla y subieron a Anahí, ingresándola al hospital.

-Es la prometida del Doctor Herrera - Habló Angelique preocupada, siguiendo a los médicos. -Por favor avísenle - Los médicos asintieron.

-¿Qué le ha pasado? - Preguntó uno de ellos.

-Tiene un fuerte dolor de cabeza, no puede hablar y temo que sea algo grave - Los médicos se miraron.

-La ingresaremos para atenderla, se queda aquí por favor, no puede pasar - Angie se quedó allí, preocupada por lo que le podía ocurrir a su amiga.

Mientras esperaba pensó si debería llamar a la familia de Anahí, ellos tendrían que saber que Anahí había ingresado a urgencias... ¿o sería preocuparlos con anticipación, sin saber nada aún?
Mordió sus uñas sentada en el banco de la sala de espera, hasta que Dulce se cruzó con ella.