¿Qué hacer después de una confesión?

¿Qué hacer cuando parece aceptar tus avances?

—Ve a una cita conmigo—. Deku casi tropieza después de escuchar sus palabras. Katsuki deja de caminar y lo mira a los ojos. Deku está nervioso, con el rostro sonrojado y los ojos abiertos con sorpresa.

Demonios, Katsuki se confesó hace más de un mes, ¿cómo es que aun así se ve sorprendido? ¿No debería haberlo esperado?

—¿Qué?—. Katsuki rueda los ojos frustrado.

—Me escuchaste, no voy a repetirlo—. Deku se sonroja confirmando que efectivamente había escuchado bien. Katsuki lo mira fijamente esperando su respuesta pero solo logra que Deku se torne cada vez más nervioso.

—Pero Kacchan, yo...

—No fue una pregunta —porque no lo había sido. Quiere una cita y tendrá una cita. Cada día que pasa no puede evitar sentirse más ansioso y sí, sabe que Deku está resolviendo sus propios conflictos internos, pero al mismo tiempo siente que los avances son lentos y no pudo evitar querer hacer algo.

—Pero...

Decide que no dejará que Deku lo piense demasiado e interrumpe antes de que pueda formular la oración.

—Sigues pensando en responderme, ¿no?

—S-sí.

—Entonces ven, tómalo como una prueba.

—Pero nosotros aún no...

—No necesitamos estar saliendo para tener una cita.

—¿No?

—Pff, claro que no. La gente suele tener una o más antes de decidir si una persona le gusta —. Deku abre los ojos como si aquello fuera el descubrimiento del siglo.

—¿En serio?

—Sí, idiota. Así que este sábado a las 10 te espero en la puerta de los dormitorios. Será la mejor cita de toda tu miserable existencia.

—¡Ahí estaré! —responde Deku pasando por alto el insulto, luego da media vuelta corriendo a quien-sabe-donde con las manos en el rostro.

—¡Más te vale! —alcanza a gritar antes de que se aleje de su vista.

Mientras observa como Deku corre sin rumbo (Katsuki está bastante seguro de que el chico únicamente quiere poner algo de distancia para poder entrar en pánico a solas) lanza un suspiro de lo que podría, o no, ser alivio y se prepara para enfrentarse a su siguiente problema.

No tiene ni idea de que piensa hacer en esa cita.

Que no se malentienda, Katsuki tiene una buena idea de cómo son las citas, a decir verdad ha estado soñando despierto con tener una cita con Deku durante tanto tiempo que tiene una lista de las cosas que le gustaría hacer. Algunas son cosas que sabe que Deku disfrutará, otras algunas cosas que él mismo disfruta y que le gustaría compartir con Deku y un par de ideas que le parecen interesantes para intentar juntos. Pero ninguna le parece adecuada.

Descarta inmediatamente la idea de ir al cine o a una cafetería, no es que sea malo, pero le parece bastante común y no quiere que su primera cita sea así de simple; tampoco quiere nada demasiado extravagante no piensa en una cena elegante y su idea de hacer una caminata por una montaña para comer en la cima y quizá acampar para poder dormir bajo las estrellas tendrá que esperar a una situación más adecuada. Ir a un museo no es una mala opción, Izuku estará particularmente interesado en alguno sobre héroes (especialmente ese que está centrado en la historia de All Might), pero tampoco le parece la mejor elección en una primera cita.

Se frustra al darse cuenta de que lo está pensando demasiado. El es Bakugō Katsuki, no tiene por qué estar nervioso al respecto. Va a tener una maldita cita con Deku y será perfecta.