Peonia 29

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Jin GuangYao, ve con la señorita Jiang, mi padre los espera en la sala ancestral. —La voz de Jin Cheng se escuchó frente a todos, aún estaban dentro de los territorios de la secta Nie, pero ambas sectas estaban en excelentes términos.-

—La calmada sonrisa de Jin GuangYao estaba firme, aunque ahora mismo tenía dudas sobre la visita al líder Jin.- Gracias joven maestro Jin Cheng, este siervo se retira.

La señorita Jiang caminaba detrás de Jin GuangYao, sentía miedo, no sabía por qué, pero no estaba cómoda. Hasta que una mano se posó en su hombro.

El carácter es una virtud que apreciamos en el clan Jin, mi hermano mayor ama a Lan XiChen, usted debería considerar una relación con alguien más. Y no se preocupe, Cheng-Cheng, es feliz con nosotros, si usted hubiera querido, pudo haber sido mi hermana mayor, pero decidió la lealtad a su familia, eso nos agrado a ZiXuan y a mí, quizá tenga una oportunidad para irse de la tiranía de su madre, pero la elección es suya. Además GuangYao sería un excelente esposo, elegante, humilde, recto, respetable, una persona con honor y dinero, eso es algo que elista sus cualidades, considero, que quizá pensó en mí oferta del pasado, incluso si no sabe lo que pasará cuando salga de los territorios ajenos a sí secta. —Jin Ying habló con sabiduría, tenía el apoyo de sus hermanos y su prometido, así como la iniciativa para realizar elaborados planes, mostrando así su capacidad intelectual. Y además podía predecir con casi exactitud lo que podría pasar.-

¿Cómo un vil sirviente caminará a lado de mí hija? —Reclamo Madame Yu.-

Mi señora, deja de avergonzar a la secta con esos comentarios. —Solicito Jiang FengMian mientras sostenía a su esposa, ante la atenta mirada de los demás.-

Madre… disculpe, Madame Yu, debería controlarse, a decir verdad Jin GuangYao es un elemento valioso, su padre era un gran líder y fue mano derecha del antiguo líder de la secta Jin y después de mi padre hasta que murió. Su madre era una bella doncella del pueblo. —Jin Cheng explicó mientras trataba de racionalizar, aunque vio la mirada furiosa de la dama Jiang.-

Dejemos de lado toda esta estupidez, si la secta Jiang no desea acoplarse, no lo hará y no hace falta seguir con esta pérdida de tiempo. —Demandó Jin ZiXuan, quien iba acompañado por su prometido y Nie HuaiSang, quien fue por él cuando escucho las palabras de la dama Jiang.- Líder de la secta Jiang, si ustedes desean realmente colaborar con nosotros, calme a su esposa y ordene que ella sea útil, de lo contrario, será mejor que se nos unan en campo el día marcado.

Los miembros de la secta Jiang estaban sorprendidos, pues la voz de Jin ZiXuan nunca tembló al hablar y realmente parecía molesto.

La Peonia de la Adversidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora