Hoy es jueves

Capítulo Cuatro Chico.

"La perdimos" fue la frase más popular de ese año.

El primero en decirla fue Ron, a sus hermanos gemelos Fred y George, cuando les narraba el partido desde su punto de vista. En medio de un complicado análisis de jugadas y vuelos en escoba, se dio tiempo para hacer notar que durante el partido Hermione no apartó la vista del jugador búlgaro.

—¿Hermione? —preguntó Fred incrédulo —Me temo que sólo te proyectabas, hermanito.

—Oh, el pequeño Ronnie encontró el amor —dijo George al tiempo que fingía limpiarse una lágrima.

—¡Oh, cállense! —gritó Ron mientras los gemelos cantaban algo sobre que amaban a Viktor y lo mucho que lo extrañaban.

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"Los perdimos" fue lo que pensó Hermione, refiriéndose a sus amigos, pues durante el discurso de bienvenida de Dumbledore, también llegaron unas invitadas muy especiales: las estudiantes de la Academia Beauxbatons. Las guapísimas francesas hicieron que Hermione estuviera segura de que, si el año anterior no había pasado tanto tiempo con sus amigos, este año no les vería ni el pelo.

Eso fue antes de que supiera que las señoritas no eran las únicas invitadas. Cuando los estudiantes del colegio Durmstrang hicieron su aparición, no pudo evitar verlos fijamente. Después de todo, ella era sólo una muchacha de quince años frente a un mar de jóvenes bien parecidos. No tardó mucho para notar que, en ese grupo, venía él. Se sorprendía que aún fuera un estudiante, parecía mayor.

Dumbledore anunció el porqué de las visitas y con eso, se aseguró que todas las miradas fueran para él. El Torneo de los Tres Magos.

Esa noticia causó revuelo entre todos los estudiantes de Hogwarts. Harry, Ron y Draco rápidamente se imaginaron ganándolo y cuando el director anunció que sólo los estudiantes mayores podrían postularse para campeones, se unieron a las protestas que encabezaban Fred y George. Hermione secretamente se alegró. Al menos este año no tendría que enterrarse las uñas en la cara durante cada partido de quidditch, temiendo por sus amigos.

La elección de los campeones se llevó a cabo una semana después, y con eso las ansias para la primera prueba aumentaron aún más. Todos querían saber a qué se tendrían que enfrentar Fleur Delacour, campeona de Beauxbatons; Viktor Krum, el campeón de Durmstrang; y por supuesto, Cedric Diggory, el orgulloso campeón de Hogwarts.

—Diggory es tan guapo —le dijo Ginny a Hermione, durante el almuerzo del día siguiente —Seguro que gana.

—Si gana, será por inteligente —contestó Hermione, quién no se fijó que Harry y Ron acababan de llegar —Pero si, es muy atractivo.

Los chicos pensaron que era muy extraño que la castaña se refiriera a alguien como atractivo. Según ellos, para Hermione todos los hombres entraban en la categoría de "amorfos". Últimamente, había estado un poco más rara de lo normal. Además, estaba pasando demasiado tiempo en la biblioteca. Ellos no la entendían. ¿Qué interés podía tener un sitio así, dónde lo único que puedes hacer es leer?

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Los chicos creían que lo más emocionante que harían antes de que terminara el año, sería ver la primera prueba. Pero en realidad, lo más emocionante vino cuando esta concluyó.

Les dieron la noticia de que ese año, como parte del Torneo, habría un baile de Navidad. Una especie de prueba grupal que nadie esperaba. Cuando Harry y Ron entendieron que tendrían que pedirles a las chicas que los acompañaran, decidieron que enfrentar a un dragón, como lo habían hecho los campeones, habría sido más fácil.