Sultanas: Guerra por el poder

Capítulo 20

Una hermosa joven de cabellos chocolates y ojos grises corría sin parar por el tenebroso bosque, a la luz de la luna y con los aullidos de los lobos junto todas sus fuerzas y echo a andar más rápido, los pasos que la seguían iban cada vez más cerca y el sudor frío bajo por su frente.

Estaba perdida si la atrapaban y la tomaban, debía correr con todas sus fuerzas y luchar hasta morir.

Del otro lado del bosque una figura de cabellos rojizos y ojos verdes alzó el carcaj y con su ojo busco el objetivo, al dar con el disparo sin fijarse en que el objetivo era una figura delgada que aullo de dolor al ser atravesada por la flecha.

—¡Agh! - todos alzaron sus espadas alertas por el quejido, Selim se alejo del grupo con camino en busca de la persona que se quejaba sin parar.

—¡Por aquí majestad! -dijo su gran visir, Selim se acercó y miró el cuerpo de la joven tendido en el suelo, la tomó en brazos y camino hacia su caballo para ir de regreso a campamento.

—Iremos al palacio de caza, recojan todo -dijo una vez subió al caballo y partió rápidamente.

En el harén la hermosa Halime disfrutaba de los placeres de ser una favorita, recibía un pago más alto que las demás y portaba vestidos hermoso, había solicitado hablar con una vidente y en secreto partió con Menekşe hatun para hablar con ella.

—Así es Hatun, darás a luz a un şehzade y a una sultana  -dijo la mujer moviendo sus manos por el caldero— pero debes ser cuidadosa, hay mujeres poderosas y ambiciosas cerca -dijo cerrando sus ojos, Halime asintió y le tendió la bolsa con oro.

Ella juro ese día proteger a su príncipe sin importar quien se atravesara en su camino.

En el palacio de caza la joven que había sido herida con una flecha permanencia inconsciente, Selim miraba apenado la situación pero le gustó aquello ya que pudo admirar la belleza de aquella joven, apesar de sus ropas sucias y su rostro lleno de tierra era realmente hermosa.

—¿Le gusta? -dijo su agha fiel, Selim rodo los ojos recordando que aquel hombre siempre mencionaba a sus mujeres — Es muy linda, ¿la quiere agregar al harén?

—Deja de hablar boberias, ¿por qué no despierta aún?

—No debe tardar, pediré la comida para ella -el hombre hizo una reverencia y salió rápidamente de ahí.

Selim acarició sus labios con emoción y miro su cuerpo cubierto con la fina tela, aquella joven le había robado algunos suspiros.

—¿mmm? -exclamó de dolor la joven, Selim se alejo por inercia y espero a que estuviera completamente despierta para hablar con ella —¿En donde estoy?

—Estas en el palacio de Caza del sultán - ella brinco en su lugar y lo miro fijamente— Cálmate.

—¿Quién es usted? Por favor no me haga daño, no tengo dinero. - Selim alzo una ceja divertido.

—¿Crees que el sultán quiera tu dinero? -la joven abrió sus ojos sorprendida — estas ante tu sultán niña, mi nombre es selim ¿el tuyo?

—¿Sultán? -el asintió — Soy Helena.

—Helena -saboreo su nombre — lindo como tú.

Dos mese pasaron Selim y Helena en el palacio de Caza, Helena le contó que había llegado como esclava y había sido vendida a un burdel, pero que escapo y al ser perseguida acabo encontrándose con el.

Selim la acogió y le dio todos los lujos posibles, las criadas del palacio la trataron como una favorita y cuando estuvo recuperada completamente la llevó a sus aposentos para hacerla suya.

Su nombre fue cambiado a Handan y en dos meses logró conquistar al sultán y embarazarse para tener en sus manos.

Mientras que en Topkapi Halime daba buenas noticias a la valide, Nurbanu, Safiye y Hürrem no le prestaron atención y se concentraron en sus hijos, más no sabían que lo que venía para ellas cambiaría sus vidas para siempre.