ya no puedo olvidarte (morat J.V)

Capitulo 45

Cuando llegamos al edificio polarizado ví que habían varios carros parqueados ya estaba empezando a oscurecer, pasamos por la portería del edificio, supongo que habían más empresas en los otros pisos, era bastante moderno y elegante, al entrar en el ascensor saque mi teléfono y nos tome una foto en el espejo aprovechando que éramos los únicos y el aprovecho para darme unos besos, al llegar ví una puerta de cristal, Juan abrió con una tarjeta de acceso que había, en el pasillo había varias Oficinas que estaban cerradas, al fondo podía ver un tipo de salón, visualice varios meseros
- amor mira - me señaló con su mano libre, una puerta que tenía una pequeña placa que decía J.P Isaza
- oye que lindo, me muestras tu oficina?
- no, en rato te hago el tour
- oye que malo yo quiero verla de una vez, pues aprovechando que no hay mucha gente
- ehh si pero mejor en rato - se acercó dandome un beso
- bueno, no se que escondes pero bueno
- sigamos por acá - me atrajo para seguir nuestro camino - mira aquí está la cocina donde me hacen un café muy bueno
- me imagino que eso fue lo primero que mandaste arreglar
- si eso y la nevera para las cervezas- yo solo gire los ojos - aunque no puedo tomar mucho, siempre vengo conduciendo así que no puedo
- te va tocar conseguir chófer
- si que bueno que mi novia conduce
- pero no dices que conduce rápido?
- pero es llevadero todo por unas polas- dijo riendo y dejando un beso en mi mejilla
- que tal - dije dandole un golpe suave en el hombro
- ya está bien, yo si sería tu chófer te llevo al paraíso si es necesario - dejo que yo pasará primero al salón
- aunque ahora lo eres en teoría
- si oye es cierto, creo que voy a tener que cobrarme y no quiero dinero
- a no? Entonces?
- ummm no se que me puedes ofrecer- bajo leventeme su mano por mi espalda abriendo sus dedos para dejarlas en el inicio de mi trasero
- comida
- ummm yo quiero comer pero otras cosas - solo sonreía pícaro acercándose a mi
- disculpe señor Juan Pablo y señorita desean una copa?- dijo uno de los meseros
- claro muchas gracias - Juan tomo una y yo igual
- permiso- dijo retirándose
- un brindis - dije poniendo mi copa frente a el
- está bien
- yo primero, bien brindemos por qué esto será un éxito para ti es el resultado de todo el trabajo duro, Dedicado y excelente que siempre haces- dije sonriéndole
- y yo brindo porque tú has estado conmigo desde el inicio y vas estar en cada uno de estos pasos porque me has aguantado demasiado y me haces muy feliz - finalizó chocando nuestras copas di una probada a mi copa está muy rico
- oye esta deli
- la escogí yo
- no me extraña - dije riendo
- aunque no pude conseguir vino de verano que es tu favorito - dijo riendo
- ahh pero si a ti también te gusta
- si pero me gustas más tu - respondió dandome un beso, cuando escuché a alguien carraspear haciendo que nos separamos
- que pena interrumpir
- perro como va, está todo bello parece doctor - saludo Juan a su amigo Gabriel de un abrazo
- usted también marica está todo pingüino, le faltó la corbata -le dijo a Juan, el las odiaba y solo se puso un traje negro con una camisa negra pero para mi se veía hermoso
- eso ya es demasiado - respondió Juan riendo
- pero parce la que si parece una modelo es tu novia - me miró sonriendo para saludarme con un abrazo - cómo estás Antonia, estás hermosa
- bien gabo, tu también estás muy guapo
- se hace lo que se puede
- hay tampoco te quites tanto
- pues es que nosotros siempre nos vemos igual ustedes las mujeres pueden variar más y por ejemplo hoy tu pareces una famosa
- gracias aceptó tus cumplidos
- es la realidad o que lo diga mi perro - puso su mano en la espalda de Juan
- es verdad
- y que tal nos quedó el salón? - pregunto Gabriel, la verdad es que no había observado nada del salón, era muy elegante la decoración es sencilla, mesas redondas con centros de mesa, una mesa alargada con bocadillos, ya habían varias personas en el lugar
- quedó lindo muy sofisticado- dije
- el buen gusto no se improvisa, oiga ya llegó su hermana?
- no se voy a llamarla - respondió Juan sacando su teléfono del bolsillo
- quieres algo de comer? Hay unas cosas deliciosas - ofreció Gabo
- si dale vamos - nos adelantamos con Gabriel y le hice una seña a Juan de que iríamos a comer algo mientras el hablaba con su hermana
- te puedo recomendar algo?
- claro - Dije mientras miraba los platos que habían
- te recomiendo este queso holandés con jamón serrano está buenísimo, algo salado pero vale la pena
- ok, aunque ese queso no es mi favorito
- no te creo enserio?
- si, hace mucho no lo cómo así que veamos, no lo cómo desde niña- dije tomando uno de los palitos armados y no lo pensé mucho odiaba ese queso y para confirmar seguia odiandolo, mis ojos se llenaron de lágrimas al sentir el horrible sabor, para bajar el sabor tome de la copa que aún tenía en mi mano
- no te gusto? - pregunto Gabriel preocupado
- lo siento pero no está horrible yo odio ese queso
- mira acá hay chocolate con fresas si quieres
- esto si es lo mío - respondi feliz tomando un fresa para ponerla en la cascada de chocolate
- si Juan Pablo había mencionado que te gustaba el dulce - dijo mientras el tomaba una fresa también- que mal que no te haya gustado
- no te preocupes
- volví - dijo Juan sonriendo - ja ya veo porque estabas acá tan contenta - me miro con los ojos entre cerrados yo solo le sonreí
- perro es la recompensa por comer queso holandés
- tu comiste? Pero si no te gusta
- y yo no sabía y le recomiendo el queso con jamón
- es delicioso- dijo Juan tomando un pincho
- que dijo su hermana
- ya debe estar subiendo
- ya llegó - dije mirando hacia la puerta Juan se giró junto con Gabriel
- vamos a saludar - Juan tomo mi mano para acercarnos a su familia
- hijo que guapo - dijo la mamá de Juan abrazándolo
- hola mamá tu también estás muy linda - le regreso su abrazo
- hola hija que linda estas - me saludo de un abrazo apenas se separó de Juan
- usted tambiénd está muy bonita - la mamá de Juan tenía un vestido azul oscuro sencillo con manga larga, ella en definitiva era elegante
- hay no que belleza, en definitiva yo tengo muy buen gusto - me saludo Susana de un abrazo- sabía que te iba quedar hermoso, una vuelta- me hizo girar
- gracias tu también estás muy bella eh, una vuelta igual- ella la dió entre risas, ella tenía un vestido blanco strapless ajustado hasta la cintura y algo ancho en la parte de abajo, tenía el cabello recogido en un moño superior un maquillaje muy suave
- si yo sé, pero es que el vestido fue aprobado por estos ojos cafés
- gracias por delatarme hermana - respondió Juan que estaba abrazado a Ángela
- no le habías dicho que fue con mi ayuda que lo compraste? - dijo susana apenada
- eh no pero ya me sospechaba que había alguien implicado
- dudas de mi? - me dijo sorprendido
- no amor, pero para esto se necesitaba ayuda
- si y más con la talla
- gracias Susan creo que nos quedó claro que me ayudaste - la callo su hermano algo molesto
- Angie tu también estás muy bella - le dije a mi cuñada menor, ella tenía un vestido rojo de amarrar en la cuello era algo ajustado al cuerpo largo, con el cabello medio recogido
- su vamos a saludar ya llegó mauricio- me miró a mi - me acompañas? - yo solo asentí, la verdad no quería ir odio estar entre gente que no conozco y eso de presentarme me irritaba- ya venimos, pueden esperarnos en esa mesa- señaló una con un letrero, supongo que habían mesas especiales ya que estaba más cerca a la pequeña tarima que había y apenas veía, habían instrumentos seguro habría un show en vivo, nos dirigimos donde había un grupo de personas entre ellos reconocí a uno de los amigos de Juan Pablo que no recordaba el nombre, Mauricio y Gabriel, tenía nervios nunca había tenido un famoso así de cerca
- hey mauro - saludo Juan soltando mi mano para saludar a Mauricio de un abrazo
- Juancho entonces como va todo- el aún tenía su asentó marcado
- bien que te parece
- mejor de lo que espere, aunque espero el show principal con ganas
- claro que sí va ser el mejor - entonces si habría show en vivo
- ya verás que va estar del putas- dijo Gabo súper emocionado
- y más con mi artista nueva Susi - mauricio abrazo a Susana
- no te vamos a decepcionar
- yo sé que no
- diana cómo estás - Juan saludo a un chica que estaba al lado de Mauricio, su esposa supongo
- bien mi Juan y tú
- bien Gracias
- mi perro - Juan saludo al otro chico que no recordaba si nombre
- entonces, bueno chicos que les presento a mi novia, bueno a mauro y díana, ella es Antonia - me presento poniendo su mano en mi cintura
- por fin conozco a la famosa novia de Juancho - dijo Mauricio tomando mi mano para darme un abrazo
- como soy famosa?
- como no te imaginas, yo no te conocía en persona pero es como si lo hiciera
- ah bueno eso es un paso más en los amistad
- clarísimo, pero no hay que perder lo tradicional, me presento mauricio Rengifo - estiró su mano
- María Antonia leyton - dije tomándola
- María Antonia te presento a mi esposa Diana
- mucho gusto, Diana - me saludo con un abrazo, ella parecía una modelo
- no se si me recuerdas, yo soy Pablo - se presentó el amigo se Juan, me di un golpe mentalmente se llamaba Pablo como no lo recordaba
- si claro si, Antonia - le sonreí amablemente
- ve Antonia verdad que vos también sos de cali no? - pregunto mauricio
- si igual que tú y tu hermano
- verdad que ustedes son calentanos - dijo Gabriel
-hace cuánto no vas a cali? - pregunto mauricio
- fui en diciembre, mis papás viven allá
- ah mi mamá igual, nosotros fuimos en enero, ese calorcito hace falta
- uff no te imaginas
- te juntas con un vecino y se te marca el asentó - dijo Juan burlándose de mí
- hola Juan - escuché que alguien saludo a mi novio con una voz muy chillona y prácticamente se le había colgado en su cuello para darle un beso en la mejilla, eso hizo que todos nos sorprendiera en especial a mi
- hola Camí como vas - dijo tratando de separar a "cami"
- como estás - no lo soltaba
- bien y tu? - Juan se empezó a incomodar - oye te quiero presentar a alguien - logro separarla, nunca he sido de marcar territorio pero si tenía que hacerlo lo hacía sin problema
- si dime - ahí fue cuando la pude ver mejor era blanca, rubia teñida oscuro, delgada, un poco más baja que yo, tenía ojos claros y un vestido negro brillante ajustado strapless un poco más arriba de la rodilla, no era fea pero tampoco la más bella, yo me veía más llamativa a su lado o eso creía
- te presento a Antonia, mi novia- tomo mi mano, creo que algo ahí paso porque se formó una tensión por ambas al ver cómo ella me miraba de arriba abajo y yo le seguía la mirada sin expresión facial alguna
- mucho gusto Antonia - dije sería parándome segura y como Paula me enseño derecha sacando pecho
- Camila Mendez - ninguna estiró la mano
- hola Camí- saludo mauricio
- hola - dijo ella sin importancia dándole un beso en la mejilla, mis ojos no se apartaron de ella
- bueno vamos a cenar o que? - dijo Gabriel para romper la tensión que formó
- porfa yo creo que lo que pasa es que hay hambre o no Antonia? - me dijo Mauricio riendo
- puede ser - le respondí de vuelta, pude sentir la mirada de "Camí", nos dirigimos a la mesa por suerte solo era la familia de Juan, el aprovecho para presentarle a sus padres a Mauricio y su esposa para luego ir a cenar, la comida estuvo deliciosa, Ángela me pidió que la acompañará a tomarle una foto junto a una de los balcones que había, antes de ir habíamos tomado unas fresas con chocolate, mientras Juan seguía en su ronda de saludos y charlas aburridas junto a susana, está vez decidí quedarme y la estaba pensando bien con Angie en el balcón tomándonos fotos y comiendo dulces, cuando decidimos regresar me choque con alguien que estaba ingresando al salón
- ay que pena no te Vi - dije al ver al hombre que se me hacía conocido pero no recordaba quien era
- wow hola tranquila - me sonrió algo coqueto mirándome de arriba abajo, a lo que me incómodo
- vale que estés bien - le di un gesto tipo sonrisa y me fui con Angie a la mesa de nuevo junto a sus padres pero de camino me encontré a Juan que me pidió que lo acompañe a la oficina
- entonces parcero- dijo el mismo chico con el que choque saludando a Juan
- hola perro como va ya lo extrañaba - bien Juan lo conoce
-ya se va o que? No me digas que llegue tarde me mata mi hermano - dijo buscándolo con la mirada
- no no tranqui apenas cenamos
- a bueno - el me miró y sonrió
- te presento a mi novia - dijo Juan
- es tu novia está belleza?
- si, no te acuerdas que te dije que tenía novia
- si si pero no pensé que así de linda, mucho gusto Alejandro Rengifo - dijo tomando mi mano para dejar un beso ahí
- que tal Antonia - dije quitando la mano lentamente
- mi perro lo dejamos tengo que ir a buscar unas cosas para ahora - dijo Juan despidiéndose
- hágale voy a buscar a mi hermano - se despidió saludo con un gesto de la mano y mirándome con una sonrisa
- vaya al parecer no soy al único que le pareces una belleza hoy- dijo tomando dos copas de la mesa que estaba en la entrada, me entrego una y tomo mi mano para guiarme al pasillo por dónde habíamos entrado
- puedo decir lo mismo
- a qué te refieres?
- tu amiga " cami" muy querida ella - dije sarcástica
- que? Ella es agradable, algo difícil A veces pero es agradable
- bastante, súper querida
- estás celosa? - se detuvo mirándome con una sonrisa pícara
- tengo porque estarlo? - me acerque retador
- ni la menor duda yo solo tengo ojos para ti
- yo lo sé
- pero hay otros que tienen ojos para ti, como Alejandro que casi se le van los ojos al verte
- pero yo también tengo ojos para ti, aunque no voy a negar que es guapo
-con que te parece guapo? - dijo abriendo los ojos con sorpresa- vale tampoco lo niego el man es pinta, tiene lo suyo - dijo riendo conmigo, si algo amaba de Juan es que no era celoso al menos no esos tipos celosos por todo
- y dónde me ibas a llevar?
- oh sí a mí oficina- inicio la marcha de nuevo
- por fin
- ussh tampoco, quería que fuera especial por eso espere, cuando llegamos tenía que revisar el salón, ahora no todo va bien
- ok está bien - dije mientras el abría la puerta dejando que yo pasara primero - oye que linda - era tal como las había visto en tv, tenía una mesa de controles con una cabina, varios instrumentos, cables, al fondo había una especie de sofás y un tv colgado en la pared, bajo este había una especie de caballete como con ropa en bolsas especiales para que no se arruguen, también una mesa con varios documentos y cosas que no tenía la menor idea de que eran supongo cosas para ajustar instrumentos, también había una repisa de cajones, era amplia
- si así es la tuya no me imagino como será la de Mauricio - dije riendo
- es igual amor - respondió sentándose en la mesa tomando un poco de su copa sin dejar de mirarme
- me gusta - era básicamente las paredes blancas y las demás cosas negras
- me alegro que te guste - dejo aun lado su copa- porque déjame decirte que la inversión fue uff gigante
- me imagino, eras consiente de que todo va a juego?
- por supuesto
-desde cuando eres tan fashionista?
- ummm no se creo que siempre tuve claro como quería que fuera mi primer estudio o segundo- el tenía uno pequeño en casa de sus padres, tomo mi mano acercándome a el
- controlador desde siempre
- con metas claro diría yo - me abrazo por la cintura
- como le quieras decir - tome un poco de mi copa - oye si me ibas a traer a tu oficina para que me diste un trago?
- no se - se acercó
- que estas tramando? Esos ojos tuyos hablan solos y están brillando - puse uno de mis brazos en su hombro inclinando un poco la cabeza
- nada, solo quería que estuviéramos solos
- y eso?
- para besarte mejor - dijo rozando su nariz en mi mejilla - abrazarte mejor - sus caricias bajaron por mi cuello dejando pequeños besos, eran más bien roces
- me estás seduciendo? - dije inclinando mi cabeza a un lado
- no se porque crees eso - dijo casi en susurró para besarme con mucha pasión, me tomo un poco de sorpresa pero me encantaba cuando el tomaba esa actitud, tomo la copa que tenía en mi mano para dejarla junto a la de el, se paró de la mesa para girarme y apoyarme ahí, sus manos empezaron a bajar por mis caderas y sus besos subían y bajaban por mi cuello llegando hasta mi pecho, ambos en algún momento hablamos de las fantasías sexuales de ambos y yo mencione algo de hacerlo en una oficina, supongo que eso se quedó por alguna película o serie americana que vi, habíamos quedado en cumplirlas, sentí una de sus manos entrar por la abertura del vestido de mi pierna subiendo por mi muslo y su otra mano en mi mejilla para evitar que me alejará cosa que no pasaria, su mano seguía subiendo hasta llegar al borde de mi panty
- que es esto? - se separó un poco de mi sorprendido, por lo general yo no usaba tanga prefería los cacheteros
- había que usar algo acordé para hoy no quería que se marcará nada
- que suerte que te traje a mi oficina- dijo continuando con sus besos húmedos
- ya lo tenías preparado
- desde hace mucho, no sabes cuánto imaginaba hacerte mía aquí
- ah si? - lo mire ya te tenía las mejillas rojas dandole un toque tierno
- y más que hoy estás como una reina
- si me quitas el vestido corremos riesgo que alguien nos vea - tire mi cabeza hacia atras al sentir como sus dedos se colaban por mi panty generando un gemido de mi parte
- quien dijo que te lo iba a quitar?- seguía con sus movimientos
- me lo vas hacer así?- apreté mis manos en el borde de la mesa
- lo compre con dos propósitos y este es uno de ellos - su mano libre pasaba por mis pechos sin bajar el vestido
- de manera que caí en tu plan - hablaba casi en suspiro mientras dejaba besos en mis hombros
- yo sabía que te iba a gustar - vi como empezó a bajar a la altura de mis piernas dejando besos por mis muslos subio mi vestido a la altura de mi cadera acercando su rostro a dejar besos en aquella zona que el mismo había encendido provocando que la habitación se llenará de mis gemidos olvidando donde estábamos yo solo apretaba los bordes de la mesa y en ocasiones su cabello al sentir los choques eléctricos que el mismo generaba, no se cuánto tiempo paso al retirarse dejando besos por mis piernas para subir por mi cuello y besarme nuevamente, tenía las mejillas aún más rojas mientras sudaba igual a mi, me baje la mesa y lo empuje hacia la silla para que se sentará, el se quitó la chaqueta tirandola al suelo yo solté un par de botones más dejándola su camisa hasta la mitad abierta mientras dejaba besos por su pecho iba bajando quedando sobre mis rodillas solté su pantalón mientras lo miraba mordia mi labio inferior, el solo me miraba mientras su respiración se aceleraba, se veía jodidamente sexy sus mejillas rojas y despeinado me encantaba lo que provocaba en el y que no lo oculta, el tema del sexo oral no fue algo me gustara mucho se puede decir que solo lo hecho con dos personas y después de mucho tiempo ya logré dejar un poco la incomodidad, solo escuchaba los jadeos de Juan y eso me alentaba a seguir, sentí como tomo mi rostro para que parará
- para o esto va terminar y no quiero que acabe ya - me ayudó a levantarme el solo me observo desde la silla y sonrió pícaro me giro de espalda a el rozando su nariz y labios en mi cuello, separó mis piernas con su rodilla, hizo que me inclinara un poco hacía delante, el hecho de saber lo que venía aumentaba más en mi la adrenalina
- estamos algo fogosos hoy - dije mientras sus mano bajaban por mi abdomen
- es tu culpa - respondió en mi oído mientras subía mi vestido hasta mi cadera
- y yo porque - dije en suspiro al sentir su mano apretando una de mis nalgas
- por volverme loco - me dió una palmada justo en la misma que apretó provocando en mi un pequeño grito - y hacer que me enamoré de ti
- no tengo la culpa de ser un encanto - apreté mis manos en el borde de la mesa al sentir como entraba suave en mi, me beso nuevamente mi cuello mientras entraba en mi con movimientos suaves que se iban acelerando, una en mi cadera marcaba el paso mientras la otra simplemente recorría mi cuerpo en ocasiones la usaba para apoyarse en la mesa supongo para tener más firmeza, el calor en la habitación era bastante y solo se escuchaba nuestros gemidos por suerte las paredes tragaban el ruido o eso creo que le escuché a Juan, cuando por fin llegamos al orgasmo Juan apoyo su frente en mi hombro recuperando el aliento, dejo un beso en el y me giro para estar de frente solo me sonrió sin decir nada
- te amo- me dijo, sus mejillas estaban aún más rojas y varias gotas de sudor estaban en su frente
- yo también te amo
- me vuelves loco, no me imagino a este punto de mi vida sin ti
- creo que salió bien el hechizo- le sonríe abrazándolo por el cuello
- mejor de lo esperado - se acercó a besarme, pero era un beso tierno lleno de amor
- creo que es mejor que nos arreglemos antes que venga alguien a ver porque nos tardamos- dije sobre sus labios hinchados
- umm deberían darnos privacidad- rio conmigo
- necesitas más?
- nunca tengo suficiente de ti - me robó un beso para separarse y ayudarme arreglar el vestido que estaba algo desaliñado - era verdad lo que dijo Paula del labial que te puso no se ha quitado
- de verdad?- me acerque a verme al vidrio que dividía la habitación y era cierto - y tú tampoco tienes rastro de el - me acerque a el a mirar si había rastro en su cuello y no - tengo miedo de lo que me aplico Paula - dije riendo - espero salga
- igual se te ve lindo en caso de que no salga - rio conmigo
- amor no hay aire aquí? Tengo muchísimo calor
- que raro porque será - me miró con una ceja levantada mientras tomaba el control que estába en uno de los cajones
- es que mi novio me hace sudar mucho
- no me digas y como? - se acercó a mi sonriendo
- oye tú no te has arreglado y si alguien entra por esa puerta te van a ver así - dije fingiendo seriedad
- no me importa, además la puerta tiene seguro
- estabas seguro que tendría sexo contigo aquí?
- obvio
- que tal, como estabas tan seguro?
- tus ojos me dijeron, cuando me dijiste que querías conocer mi oficina, te brillaron
- no es cierto- negué riendo - hubiera estado en mis días no habrías podido hacer nada
- pero no lo estás y yo lo sabía
- y es que me sigues en eso?
- casi pero sabía que no te había llegado - me tenía acorralada en la pared
- vaya que seguridad
- contigo todo - me volvió a besar un poco más apasionado, lo abrace por sus hombros para que el me levantará un poco por la cintura, nos separamos por el sonido de la puerta, por suerte si no esto se iría por el segundo round
- ves te dije que te arreglarás - dije ayudando abrochar su camisa mientras el se acomodaba el pantalón
- ya?
- si supongo - aún tenía las mejillas algo rosada, era muy blanco, se acercó a la puerta y antes de abrirla se paso la mano por el cabello, cosa que no mejoro nada, ví que le quitó el seguro y abrió un poco
- hola Juani - escuché una voz femenina mientras yo me acerque al frente de la mesa donde hubo todo el agetreo, pase mis manos por mi cabello poniendo los cabellos rebeldes atrás de mis orejas - te estaba buscando, llevas mucho perdido haces falta- me apoye en la mesa, no reconocía esa voz y Juan no me deja a ver quién era, es un grandulon.