Capitulo 38

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- se te ofrece algo?- dije sin interés acercándome a la puerta
- oye oye - se acercó para tomarme por la cintura deteniéndome - ¿Y eso?
-¿Que?
- me encanta ¿Es nuevo? - se acercó lentamente poniendo sus manos en mi caderas
- no, ¿Te gusta mucho? - pregunté en voz baja tratando de seducirlo  puse mis manos en su cuello para acercarlo a mi y besarlo despacio y seductoramente, Juan se empezó acercar más y acorralarme contra la pared, sus manos empezaron a bajar apretando mi trasero, sentí como algo en el empezaba a crecer así que me separé- si quieres te lo presto - dije riendo mientras el me miraba asombrado, me gire abrir la puerta -¿Vamos amor?  Nos esperan - sali casi corriendo sabía que el chiste me saldría caro pero luego lo soluciono, me tenía que vengar
- que chistosa amor - dijo mientras me alcanzaba en las escaleras - está bien, me lo merezco por iniciar pero luego me vas a tener que ayudar
- eso veremos - lo mire divertida, el solo me miró
- por fin llegaron- grito Martin desde la piscina
- ya nos íbamos a dormir - dijo Paula aventando una pelota de piscina
- patos al aguaaa- grito Simón tirando a Juan al agua que lo tomo desprevenido
- tu también - dijo Kevin levantándome como bulto y corriendo a saltar mientras yo gritaba, por suerte era piscina y podía nadar medianamente
- bienvenidos a la diversión - dijo riendo Paula
- tío - Sara estaba nadando en su flotador en forma de cisne
- hola peque y tú qué vas cómoda
- shii
- oigan juguemos algo - dijo Alejandra
- luchas - dijo paula
- noo voley mejor - sugirió Vanessa
- yo estoy de acuerdo - apoye a Vanessa- las luchas no son lo mío
- armemos los equipos- dijo Laura.

Estuvimos un rato en la piscina jugando y las niñas llevaban el marcador, decidimos salir de la piscina ya era tarde y empezó hacer frío, estábamos frente a la chimenea que estaba en el centro comiendo las pizzas de congelador que habíamos llevado y calentado junto a las cervezas contando historias divertidas
- bueno Martin y Laura cuéntenos el chisme como se conocieron - pregunto Paula, ella tenía una manía por preguntar esas cosas siempre
-bueno pues nosotros nos conocimos en Francia cuando fui niñero
- ¿Fuiste niñero?- pregunto sorprendida Paula
- sii, pues esa fue una experiencia y Laura también era niñera y así
- interesante
- si ha Sido lo mejor que me ha pasado - sonrió mirando a su novia
- bueno yo creo que me voy a dormir - dijo Vanessa acomodando a Sara en sus brazos para poder levantarse
- te ayudo - se ofreció Juan levantándose a recibir a la niña
- gracias- se acercó a Carla que estaba recostada en las piernas de Ángela - Carla levántate
- no la levantes,ven te ayudo - dijo Kevin cargándola
- vale, gracias, es que ya está muy grande y pesa mucho- dijo algo apenada
- yo también me voy - se despidió Ángela.

Después de un rato todos se habían ido a dormir solo quedamos Juan y yo, siempre nos quedamos solos, supongo que es porque no nos da sueño temprano algo muy en común de los dos
- Ven acá - Juan se levantó tomándome de la mano
- para que quieres que me acueste- dije riendo
- ven, házme casó- deje la manta que tenía para el frío al borde de la banca dónde estaba, cuando acepte levantarme me sonrió dándome un beso y Vi como una sonrisa pícara cruzaba por su rostro,  se acostó en la hamaca que estaba al lado de la banca dejándome un espacio invitando a qué me hiciera ahí
- y para que quieres que me hagas ahí?
- ven - dijo tomando mi mano
-  para que quieres que me acueste
- amor - volvió a tirar de mi, acepte riendo
- no es más cómodo dónde estábamos acostados - dije tratando de acomodarme y no caer
- si pero aquí estamos más juntos- puso su cara en mi cuello dejando pequeños besos y acariciando mi espalda
- oye no te basto con la tarde? - dije riendo
- no, yo te dije que era un calmante y hace un rato me dejaste iniciado
- ¿Yo? - pregunté separándome
- si - dijo besándome de manera apasionada, no se cómo logro enredarme con su cuerpo para ponerme sobre el mientras seguíamos besándonos, en un momento trate de acomodarme y sentí como se ladeó la hamaca interrumpiendo provocando risa en ambos
- ves te dije que era inseguro - señale riendo con miedo a moverme de nuevo
- espera- juan se acomodo en la mitad dándonos más estabilidad - listo - me miró sonriendo
- oye y porque te acomodas? si no vamos hacer nada
- eso dices tú - me atrajo nuevamente a su boca, sentí como iba bajando sus manos y jugaba con el borde de mi Panti sonreí sobre su sus labios
- oye para, no vamos hacer nada acá - dije separandome
- amor ya todos están todos dormidos - dijo casi súplicando
- si pero podemos ir a la habitación, alguien nos puede ver aquí - dije mirando que no hubiera nadie
- no hay nadie ya todos están durmiendo, aprovechemos, cumpleme una fantasía
- como tenías una fantasía de hacerlo en una hamaca? - pregunté divertida, si bien en algunos momentos habíamos hablado sobre nuestras fantasías sexuales y cumplido está no estába en lista
- bueno se acaba de crear - me respondió riendo
- enserio me da ansiedad que alguien nos vea
- espera - Juan estiró su mano para tomar la manta que tenía antes y había dejado sobre la banca, la puso sobre mi espalda - listo
- y esto para que?
- pues dices que te da miedo que nos vean
- y se supone que con esto no nos van a ver gimiendo - dije riendo
- si - rio de vuelta
- bien hagámoslo
- eso me gusta, espera- bajo su pierna para mantener estabilidad - así no nos vamos a caer en el movimiento - me sonrio acercándome a el para besarme tiernamente, después de un rato las cosas empezaron a subir de temperatura bajo la manta entre caricias y besos, algo que me gustaba de esta situación era que tenía el control al estar arriba, aunque en general a Juan y A mi nos gustaba esa posición, para ahorrar tiempo y reducir riesgo bajo la parte de arriba del traje de baño que traía mientras  dejaba besos por todo lado donde alcazaba, hizo a un lado el panty, era la opción más fácil, era un poco difícil moverse ya que no teníamos firmeza solo su pierna que evitaba caernos, mi único soporte eran sus hombros que estaban rojos por la fuerza que ejercía y clavaba mis uñas por el placer provocado, evitaba hacer ruidos fuertes para que nadie nos escuchará, en ocasiones dejaba mi cara en su cuello y podía escuchar sus jadeos, el también hacia un esfuerzo para no hacer ruido, después de unos minutos ambos llegamos al orgasmo algo exhaustos, debo admitir que estuvo bien, algo incómodo pero placentero, Juan me ayudó arreglar mi traje de baño, me acomode a su lado, el entrelazó nuestras piernas acercándonos más
- no estuvo tan mal- dijo dandome un beso - incómodo pero placentero
- si es verdad- puedes poner chulito a tu fantasía
- tu también - me sonrió- podemos decir que esto es lo segunda parte de lo otro
- bueno eso de eso me alegro , amor vamos a dormir?
- si - me dijo dandome un beso para levantarse 
- estás cosas son algo inseguras - dije riendo al ver cómo se movía
- no te lo niego, pero las siestas que se duermen son fabulosas, te invito a una mañana - dijo riendo
- acepto- le sonreí al ver que puso la manta sobre mis hombros para que no me diera tanto frío por estar en traje de baño mientras atravesamos hasta llegar a la casa.

ya no puedo olvidarte (morat J.V)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora