Camille 2 - Carl Grimes |TERMINADA|

2. "Mentiroso"

Camille

Actualidad

— no los pierdan de vista — susurré mientras seguíamos caminando, siguiéndolos, pretendiendo ser nada más que muertos pero ellos sabían que no se trataba solamente de caminantes comunes. — rodeenlos, no los dejen escapar.

Sus respiraciones agitadas junto con los gruñidos eran el único sonido en el bosque.

Corrían con rapidez, huían de nosotros pero la cantidad de muertos detrás de ellos era inmensa, no tenían salida.

Parecían exhaustos, pero seguían corriendo, cada vez más lento.

Al verse completamente atrapados, se detuvieron, cubriendo sus espaldas y apuntando las armas a nosotros, sin embargo, también nos detuvimos y fue ahí cuando la realización golpeó sus rostros.

— están atrapados — me burlé, inmediatamente sus miradas buscaban la fuente de aquellas palabras, sin éxito, el terror en sus rostros me hizo sonreír — y en mi territorio — hablé nuevamente, caminé unos cuantos pasos más hacia ellos haciendo que retrocedieran ligeramente — creí que Alfa había sido bastante clara sobre esto la primera vez.

Quité la piel sobre mi rostro y con una sonrisa amarga, miré a cada uno por unos segundos.

— ¿Cami...? — Rick fue el primero en hablar, su voz en un susurro, como si tuviera miedo de preguntar, sus ojos llenos de confusión, sorpresa, como si yo fuera un fantasma.

— hola Rick, Michonne... — sentí las miradas de los susuradores en mi, los había hecho perseguirlos durante un tiempo ya.

— ¿cómo...?

— este es nuestro territorio, ¿Qué mierda hacen aquí? — interrumpí cuando el líder quiso preguntar nuevamente.

Sabía la respuesta, en realidad, sabía todo lo que ocurría en Alexandria y ahora en Hilltop y el reino.

— necesitamos provisiones... — Michonne respondió — Pero, ¿cómo es...? ¿qué haces con ellos?

— no es mi problema, Alfa no estará feliz, suelten sus armas... — respondí ignorando aquella pregunta llena de inquietud.

— Camille, ¿qué haces? —Rick volvió a preguntar, tan confundido como Michonne.

— suelten sus malditas armas — ordené y levanté el bate en mi mano, sus miradas fijas en él por unos segundos antes de mirar mi rostro nuevamente — y mi gente me llama Gamma. — miré a los susurradores detrás de ellos y asentí, con un fuerte golpe ambos cayeron inconscientes sobre las hojas secas del bosque.

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— yo me encargo, Alfa, si me lo permites.

— ¿quieres que te deje encargarte de esto? ¿Por qué? Me han dicho que parece que los conoces...y que te han llamado, ¿Camille...?

— Así es, son personas de mi pasado...

— no estarás pensando en traicionarme, ¿o si? — la mujer se acercó a mí, rompiendo mi espacio personal pero esta vez mantuve mi mirada en la suya.

— lo que busco es venganza, Alfa — confesé y una sonrisa se formó en su rostro.

— ¿venganza? ¿Qué te hicieron esas personas?

— intentaron matarme, me traicionaron.

— ¿por qué no lo dijiste antes? — preguntó, profundamente interesada.