Capítulo 4: Ángel de nieve

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Desde la muerte del mayor de los hermanos Zaraza, han pasado siete años, ahora la que era una niña de diez ahora es una joven de diecisiete años

Durante estos años la ojiazul se mantuvo fuerte, aunque sí le tomó aproximadamente unos cuatro meses poder ir a la tumba de su hermano sin sentir que perdía toda esperanza de que el futuro sería mejor

La peliblanca durante todos estos años se dedico a entrenar, ahora tiene más fuerza, mayor movilidad y flexibilidad, además de que entre las cosas de su abuelo encontró un libro con movimientos de katana que perfeccionó de manera que a ella le sean funcionales

Hace seis años

Se podía ver a peliblanca limpiando los cuartos de su casa y del dojo, llevando botes de agua y algunas cajas

*Me falta acomodar las cosas de esa caja* se acerco a ver el interior de la caja

*Son... ¿Cosas del abuelo?, al abuelo no lo recuerdo mucho, lo único que siempre recuerdo de él es el verlo blandiendo una katana* mientras recordaba acomodaba las cosas de la caja

La caja era bastante grande y al fondo de ella se encontraba un grupo de libros

*¿Libros? ¿Por qué el abuelo tenia libros aquí escondidos?, lo mejor creo que es no leerlos, si los tenía escondidos es porque no quería que los leyeramos* decidió solo mover los libros y acomodarlos en un cajón, aunque no pudo evitar el leer lo que decía la portada

*¿Respiración de agua?* la pequeña un tanto confundida por el título del libro no pudo aguantar la curiosidad

*Lo siento abuelo, pero la curiosidad me va a matar* con eso decidió leer los libros

Regresamos al presente

En un cuarto del dojo se puede ver a la ojiazul con un grupo de cinco niños de entre siete y nueve años

-Bueno, hagan los movimientos que les dije- los niños al oír lo dicho por la peliblanca se pusieron todos rectos 

-Sí- dijeron al unísono

*¿Por qué se portan tan raro cuando les habló?* pensó lo joven

*Ella da miedo* ese era el pensamiento en conjunto de los niños del lugar

-Voy a estar en el otro cuarto, cuando terminen de hacer las repeticiones, hablenme- lo último, sin que ella lo quisiera, sonó con un tono más intimidante

Todos los niños asintieron con la cabeza fuertemente un tanto aterrados

Ya en la otra habitación, la ahora única Zaraza se preparo para seguir perfeccionando sus movimientos

*En su momento intente recrear los movimientos que mencionaba el libro, pero la mayoría no me terminaba de convencer como los realizaba, lo mejor es a ver creado mis propios movimientos con base a los del libro* tomo entre sus manos una espada de madera 

*Ahora que lo recuerdo los movimientos que decía el libro eran de asesinato total, la mayoría iban dirijidos al cuello del enemigo* mientras pensaba todo eso realizaba los movimientos que ella misma creó

*Ahora que lo recuerdo los movimientos que decía el libro eran de asesinato total, la mayoría iban dirijidos al cuello del enemigo* mientras pensaba todo eso realizaba los movimientos que ella misma creó

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