❄️hielo cálido❄️

Capítulo 9:Primer nieve

La peliblanca ya está más en el norte del bosque y así como dijo el demonio, la cantidad de demonios era mayor

*Me alegra tener muy buena resistencia, si no ya estaría más que cansada* pensó la ojiazul con alivio, en eso vio a un demonio y lo decapito

-Caw, veinticinco demonios decapitados- Se escucho decir a Yukiro desde el aire

Con el mismo ritmo que llevaba siguió recorriendo el bosque

*Siento la presencia de muchos demonios y me dificultan el encontrar a la víctima*

Ya habían pasado unas horas y seguía sin encontrar a ningún humano, a lo lejos pudo divisar un grupo como de diez demonios en un solo lugar peleando entre ellos, brazos, piernas, de todas las extremidades del cuerpo se podían ver volar de la pelea

*Tal vez desasiendome de estos demonios ya pueda encontrar la presencia que busco* 

-Respiración de hielo, Treceava postura:patinaje sobre hielo- la chica se desplazó entre la pelea de los demonios cortando extremidades y decapitado a los demonios, todo su desplazamiento se veia con gracia y mucha facilidad, más rápido de lo que pudieron darse cuenta ya todos los demonios se encontraban desintegrendose

-Caw, treinta y cinco demonios decapitados-

Y como imagino, eso bastó para que la chica pudiera encontrar la presencia por la que entró a ese lugar

*Solo un poco más*

Ya estaba más cerca que lejos de la persona, y cuando lo encontró le sorprendió el buen estado en el que se encontraba

-¿Se encuentra bien?- dijo lo más suave que pudo

El chico que parecía perdido en sus pensamientos reaccionó ante la voz de la chica

-Estar distraído en un lugar así es muy peligroso- la ojiazul se arrodilló junto al chico y empezó a curar las pequeñas y pocas heridas que tenía en su cara

-¿Ah?, solo pensaba en que volví a lograr escapar de unos demonios  gracias a que se pusieron a pelear entre ellos- dijo el chico aún pareciendo un tanto perdido

*Huele a sangre* pensó la ojiazul mientras le seguía linpiando la cara

-¿Donde está tu herida más grave?-

El chico se destapó el brazo vendado con unas cuantas vendas ya sucias

-¿Te has encontrado con más personas?- pregunto la chica mientras retiraba las vendas viejas y las cambiaba por nuevas

-Sí, el último con el que me encontré fue hace unos días, se quedó a enfrentarse con unos demonios mientras yo huia- el chico pareció haber regresado en sí un poco más

-Probablemente ya está muerto- Lágrimas de frustración bajaron por las mejillas del chico

-Y todo por mi culp- la chica lo interrumpió limpiando sus lágrimas con un pañuelo

-No es tu culpa, el decidió arriesgarse para salvarte, así como yo decidí entrar aquí, aún si fuera sola, con tal de intentar salvar a quien se encontraba aquí dentro- dijo suavizando su mirada y regalandole una pequeña sonrisa al chico

El tener a la persona enfrente y no poder hacer nada para ayudarlo era algo demaciado doloroso de vivir y la peliblanca lo podía entender muy bien

Después de terminar de cambiar las vendas, la chica se puso de pie y sacudió su pantalón 

-Es momento de sacarlo de este lugar- la peliblanca tomo la mano del chico y empezó avanzar con mucho cuidado

*Salir de esta manera es más seguro pero muy tardado, correr no es buena idea porque llamaríamos más la atención y no creo que el pueda correr muy rápido durante mucho tiempo*