Lienzo y Armas || Juliantina

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Miercoles 6:47 pm

La cansada y ojerosa mirada de color azul se paseaba sobre las infinitas lineas de texto en la pantalla de su laptop, desde su nueva sala de estar, la cual tenia una paleta de colores entre gris, blanco, negro y beige, con un ventanal de piso a techo con salida al balcon para tener una vista verde casi en su totalidad, árboles y mas arboles, lógico teniendo un edificio al perímetro de la ciudad y al pie de la montaña, convenientemente mas cerca del apartamento de Juliana que su residencia anterior.

Su tarea actual había sido iniciada el día anterior a las 8:53 pm, por una llamada de Ramírez.

"Se que tienes tus fuentes y tus contactos, también una posición favorable gracias a tu papá. - Por supuesto que aquel ultimo comentario hizo a Valentina rodar sus ojos en fastidio. - Necesito investigar un par de nombres y algunos eventos de..."la alta sociedad" - Su tono sonó pretencioso con burla. - Nuestro amigo adicto finalmente hablo luego de un poco de ayuda, ayuda sana por si dudas cómo, aún no hemos definido que hacer con el, soltarlo puede hacerlo hablar y obviamente no podemos fiarnos de el, por otro lado, su ausencia e interrupción del secuestro seguramente ya puso en alerta a quien este detrás de esto, creemos que lo mas sensato será procesarlo por accidente de auto, lo mantendrá un tiempo en prisión, me asegurare de que sea una donde este seguro, no quiero perderlo, podría ser útil mas adelante."

"-¿El secuestro no va a ser tomado en cuenta?-"

"- Lo creas o no, admiro tu afán por la justicia. No, vamos detrás de un gran caso, todos van a caer en el momento, no puedo permitir errores una segunda vez. "

Posterior a esa conversación, le fue enviado por telegrama la lista de nombres y eventos.

Nombres

Enzo Martínez
Mar Persaud
Zeus González Díaz
Camilo Guerra
Eric Awad Peeters
Isis Nowak

Un nombre en particular se llevó su atención "Camilo Guerra" sin embargo, decidió dejarlo para el final, a donde aun no había llegado, había mucha tela por cortar, y los puntos clave empezaban a aparecer en forma de coincidencias simples.

Eventos

Frieze - Londres, Reino Unido

Artissima - Turín, Italia

Material Art Fair - Mexico

Aquellos dos primeros eventos fueron extraños para Valentina, es decir, ¿Italia? ¿Reino Unido? Que tenía aquello que ver con el caso en México. A parte, Ramírez mencionó "Alta sociedad" pero aquellos eventos de arte eran para todo publico, entonces, los personajes de interés en esos eventos debían ser personas de esa característica, bien, eso reduciría su investigación al menos un poco, casi nada.

A Juliana no la había visto desde el lunes por la noche, la chica había estado agobiada por Amanda encima de ella exigiéndole como era habitual con sus principiantes, lo llamaba algo así como "es mi manera de deshacerme de cualquier eslabón débil en mi equipo" era mortificante, tenían un desfile en Roma en dos meses, y para la lógica de Amanda eran tan solo siete días, así que todos debían hacer el trabajo de un día en dos horas.

Así que, a Valentina le pareció desconsiderado arrastrar a Juliana a su nuevo apartamento cuando estaba cansada y tendría un día igual a la mañana siguiente, pero claro que, los mensajes eran constantes, no había nada que una no supiera sobre las actividades del día de la otra.

El sonido del teléfono retumbo en la silenciosa y oscura sala de Valentina, causándole un ligero sobresalto, tenía horas sentada y no había siquiera encendido las luces.

"Juls"

- Hola, Juls. - Contesto con voz poco enérgica, estirándose y frotando sus ojos con la mano disponible.

- Uh, alguien ha tenido un día agotador. -

- Y estoy segura que no soy la única. - Esta vez habló con gracia.

- Seguro que no. - Rió. - Mi victimario me ha dejado salir hoy con los últimos rayos del sol. - A Valentina le causó una risa corta y silenciosa el nombre que le dio a su jefa.

- Eso es realmente bueno. ¿Ya te vas a casa o ya estas allí? -

- A penas estoy recogiendo un poco el taller y mis cosas, Flavie va a dejarme en el apartamento. - Aquel nombre hizo a Valentina morder su labio inferior, haciéndola recordar el tacto constante que tenía la otra diseñadora sobre Juliana.

-¿No se te antoja hacer algo mas?... Digo, nada agitado, para despejarnos un poco, salir a cenar, ir a algún café, no lo se. - Ni siquiera había terminado de hablar y la respuesta de Juliana fue inmediata, como si literalmente lo necesitara, como si lo esperara.

- Dios, por favor si, lo necesito. ¿Estas cerca de acá? - La sonrisa en la castaña fue instantánea.

- No exactamente, estoy en mi apartamento, pero estaré allí rápido, dame unos 20 minutos. -

- Te espero. Besos, Val. Conduce con cuidado. -

- Descuida, te veo en un rato, Juls. Besos. -

Sin demorar tomo un suéter gris y un mono gris, enfundándose unos Nike blancos, era su típico outfit de salir a la panadería los domingos por la mañana pero no se veía mal y no haría esperar a Juls.

Condujo con prisa sin dejar de ser responsable hasta el trabajo de Juliana, quien estaba aguardando por ella detrás de las puertas transparentes. Salió apenas alcanzo a ver la camioneta negra.

- Vaaal... - Se lanzó en un abrazo seguro hacia la conductora que respondió de igual forma. - Te extrañe en tan solo 48 horas.- Agregó aun sin soltarse.

- Si, dicen que soy adictiva. - Ambas rieron. - Y yo a ti, Juls. Amanda debe dejar de secuestrar a mi chica de ojos chocolate. - Entonces allí se separaron, Juliana dándole una sonrisa coqueta a la castaña.

- ¿Tu chica de ojos chocolate? - Valentina sintió su manos empezar a sudar. - Me temo que no puedo ser tu chica si ni siquiera me has llevado a una primera cita. - Como un flashback vino a su mente la noche de la galería, la diseñadora hablando con la misma sonrisa y el mismo tono.

- Me parece justo, ya sabes, en vista de que si me interesas en ese plan... - La tensión volvió a aparecer, comprimida en el pequeño espacio dentro de la camioneta, ahogándolas y como si su mirada sobre la otra era lo único que les permitía seguir respirando.

- Te tomaste tu tiempo para responder eso ¿no? - Cuestionó Juliana con la misma sonrisa.

- Que te puedo decir... Nunca me he arriesgado a ser rechazada románticamente por una mujer, y menos pensé en empezar por la mujer más atractiva que he conocido en mi vida. - Juliana se acercó, llevando su mano a los mechones que caían cerca del oído de Valentina, simplemente enredándolos en sus dedos.

- Me halaga muchísimo que una mujer como tu me encuentre como "la más atractiva que ha conocido en su vida" porque es absolutamente mutuo, Valentina. - Esta última llevó su mano al cuello de Juliana, haciendo círculos con sus uñas sobre la piel cálida.

- Entonces supongo que... - La castaña bajo la voz al final, acercándose mas a la diseñadora, sintiendo su calor, casi tocando su nariz. - Quieres esto... - Los labios de Juliana se abrieron solo un poco, dejando salir el calor de su interior que chocaba contra los labios de la otra chica. - Tanto como yo... - Un simple roce fue lo primero, demasiado suave, demasiado sutil, casi irreal, entonces Juliana se acercó mas, plantando con seguridad y aprobación sus labios sobre los de Valentina. Eran suaves, húmedos, gruesos, se movían lentamente, reconociendo aquel nuevo espacio, Juliana pensó que los labios de la castaña sabían a fresa, debía ser algún lip gloss y también olía a fresas, era el beso mas delicioso y agradable que había dado en su vida, y no era menos que eso para Valentina, el olor de Juliana inundaba su sentido del olfato y se sentía maravilloso. La mano que estaba en el cuello, se arrastró hacia el cabello negro, enredando los dedos en el, tirando suavemente y pidiendo mas cercanía.