Bleeding Out (OUAT)

Capítulo 8 EL JOLLY ROGER

A Pan le extrañaba que su sombra no apareciera.
No tenía ningún ánimo de ir a ver si su mercancía ya había llegado.
Mucho menos si su sombra no estaba para informarle.
Golpeó un tronco, una, dos, tres veces.
Estaba enojado...

...

Garfio miraba por la costa, buscando al menos una señal o parte del Jolly Roger.
Presentía que ya se encontraba ahí, que estaba cerca, pero no había nada que lo comprobara.
Escuchó las olas yendo de un lado a otro y al hacerlo, cerró sus ojos.
Era irónico como el mar era su todo, pero a la vez lo odiaba.
En el mar, pudo estar con Liam y Milah, pero en el mar murieron... No por su culpa pero si en él.

No quiso voltear una vez que escucho los pasos de Pan.

-¿Aún buscando tu barco, capitán?

Prefirió ignorarlo aunque sabía muy bien que no sería útil.

-Vamos, no ignores a un viejo amigo.

Esta vez, se giró amenazante.

-No te incumbe nada de lo que este haciendo aquí.

-Sólo quería decirte qué si vez a un niño, me avises.

-¿Se te perdió uno de tus niños, Pan? -Preguntó burlón.

Pan lo miró serio y hasta enojado.

-Aún no es un niño perdido. Aún no.

...

Emma se abrió paso entre las ramas y encontró a Garfio mirando dando la espalda con la mirada fija en el mar.

-Garfio...- Le llamó, él se giró y cuándo lo hizo, Elsa se acercó detrás de Emma.

-Encontramos un barco.

...

La historia no era larga.
Después de haber arrojado a la sombra al acantilado, Emma notó algo en una orilla, al parecer algo había escondido ahí.
Bajaron como pudieron, de vez en cuando con ayuda de la magia de ambas y en donde Emma había encontrado ese "algo extraño", encontraron madera.
Madera que crecía conforme las hierbas se alejaban y dejaban notar que la madera era de un barco.
Escucharon ruidos, y tratando de memorizar algún camino por si regresaban con Garfio, escaparon de ahí.

Ahora, Garfio se encontraba con ellas admirando el barco.
Garfio sonrió y sus ojos brillaron.
Emma pensó que en cualquier momento, Garfio correría al barco llorando de felicidad, abrazándolo como pudiese.
Pero se había equivocado, si acaso, podría "llorar" para sus adentros.

-¿Es ese?- Elsa interrumpió el silencio y Garfio asintió feliz.

-El mismísimo Jolly Roger.

Subió disfrutando cada rechinido que las tablas hacían y una vez arriba, extendió su brazo invitándolas a subir.

-¡Todos a bordo!- Sonrió de lado y ellas subieron -. Lo sacaré de aquí, ustedes investiguen si hay prueba alguna de que la reina malvada y tú hijo estuvieran aquí.

Emma entró al que supuso debía ser el camarote principal.
No había nada de lo que pudiese decir sobre que un niño se había sentado a jugar ahí, ni mucho menos de que alguien se haya quedado ahí.
Siguieron buscando, pero no encontraron mucho.

Intercambiaron lugares, el Jolly Roger donde Garfio había dejado el anterior barco y el barco donde se había escondido el Jolly Roger.
Garfio se burlaba de lo estúpido que había sido Barba Negra.

-¿Encontraron algo?-. Preguntó pero lo único que recibió fue una negación por parte de ambas.

Emma estaba triste y ambos lo notaron.
Elsa tomó el hombro de su amiga para reconfortarla.
Y Garfio le dio una sonrisa.

-Encontraremos a tu hijo, lo prometo-. Dijo Garfio.

Gracias a ella, había encontrado y recuperado a su amado Jolly Roger.
Quería devolverle el favor.

Emma sonrió.

Quizá el pirata no era tan malo después de todo.