𝟏.𝚃𝚎𝚊𝚌𝚑𝚎𝚛'𝚜 𝙿𝚎𝚝 || 𝙼𝚊𝚢𝚕𝚘𝚛

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Brian estaba terminando su trago cuando vio que un chico y una chica se acercaron a Roger. El pelirrojo tomó el rostro del rubio entre sus manos, a lo cual May iba a protestar de no ser porque notó que este solo estaba pintando el rostro de su pequeño, quien lo veía curioso esperando saber qué es lo que le había dibujado

Al terminar con Roger, repitió el proceso con Brian y, antes de irse, la chica que lo acompañaba, le puso al menor una tiara, a Brian algo parecido a una bufanda peluda de color rosa pastel y besó las mejillas de ambos para dejar marcado su labial fosforescente en su piel

—Gracias— Les dijo Roger, a lo cual los dos extraños sonrieron y se despidieron con la mano. Roger miró a Brian con diversión, señalando con su pulgar como el chico y la chica hacían lo mismo con una pareja de lesbianas a la distancia —Que lindos—

—Tienes un sol en la cara— Dijo señalando el dibujo en la mejilla del chico contraria a donde estaba la marca del labial

—Tu una luna... Y el beso— Brian sonrió y se levantó del asiento para extender su mano a Roger

—¿Quieres bailar?—

—Claro— Aceptó tomando su mano y se dirigieron a la pista de baile, donde el rubio comenzó a moverse al ritmo de la música frente al mayor, quien le dió una vuelta para quedar abrazándolo por la espalda, besándolo de vez en cuando

Pasaron así los siguientes minutos. A veces los acompañaban extraños que se acercaban a bailar con la pareja y ninguno de los dos se quejaban, como cuando aquella drag se había acercado para decirle a Roger un "Una tiara para una princesa porque la reina siempre sere yo" que hizo que estallara en carcajadas, asientiendo con la cabeza

🐇

Ya el alcohol empezaba a tener efecto en sus acalorados cuerpos. Brian veía un poco borroso, pero eso no había evitado que notara como un castaño de unos 20 años, sonreía con coquetería mientras miraba a Roger, quien seguía bailando sin inmutarse de lo que sucedía.

—Roggie, vamos a sentarnos por allá— Señaló el sofá donde antes se encontraban los dos jovenes con el señor

—¿Por qué? ¿Pasa algo?—

—Ya estoy un poco mareado y el que va a conducir de regreso, soy yo, así que tengo que componerme— Mintió, pues lo único que querían era hacer que Roger se perdiera de la vista que aquel castaño que lo veía con tanto interés. Él rubio asintió y tomó su mano para guiarlo, asegurándose de que no tropezara

Al llegar, sentó a Brian, mientras él miraba hacia la barra pensando si podían tener agua ahí

—Bri, iré a buscarte algo de agua— Se iba a alejar pero el mayor lo detuvo

—No, dijiste que no te iba a alejar de mi—

—Seré rápido— Lo miró insistentemente con sus grandes ojos azules, que resaltaban por la luz neón del mismo color que iluminaba su rostro. Brian asintió rendido y soltó su mano

🐇

El rubio había pedido amablemente su bebida, a lo cual el lindo bartender le dijo que haría lo posible por conseguir algo sin alcohol. Ahora esperaba solo, sentado en un taburete, o al menos lo estaba pues un hombre joven de cabello castaño se acercó hasta él y se recargó en la barra, mirándolo con una sonrisa

—Hola, me llamo Dany— Saludó el extraño, Roger solo le sonrió con amabilidad —¿Qué hace un chico tan lindo como tu solo?—

Típico. Pensó

—Mi novio se siente un poco mal, así que le llevaré algo para beber—

—¿Cómo? ¿Ese hombre de cabello rizado es tu novio?— Preguntó, haciendo que Roger cayera en cuenta de sus palabras