-Los días pasaban, pero Ginger no era popular, sólo era amable, trataba muy bien a cualquiera, era sorprendente y extremista a la vez. Ella sentía que tenía la culpa de todo y que debía arreglar todo, pedir perdón a todos, hablar bien con todos. Sólo pensaba en los demás, pero no era para caerles bien, no, sólo...ella...no sé, simplemente así era.
-Así es, Paula puedes irte, nos vemos mañana. -Paula se levantó del banco giratorio y desapareció de la parte que grababa la cámara. Se escucharon algunos pasos y poco después el abrir y cerrar de una puerta pesada. Las luces dejaron de iluminar la pared con decorado de árbol rústico, el video estaba en completa obscuridad, se escuchó un movimiento y el video término.
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Ginger
Short StorySus ojos siempre estaban cristalizados...no buscaban nada en específico, sólo veían a la nada, estaban perdidos, al igual que los sueños que no podía encontrar, al igual que sus esperanzas, pérdidas. Toda ella era una persona perdida en si misma, en...