-𝘔𝘺 Carl.- 𝖢𝖺𝗋𝗅 𝖦𝖺𝗅𝗅𝖺𝗀𝗁𝖾𝗋. (Corrigiendo)

...

¡𝐀𝐥𝐞𝐫𝐭𝐚!
𝐒𝐞𝐱𝐨.

Una noche fría y oscura, sentía el maravilloso sonido de la brisa pasar por mí ventana, mis sueño se vieron perturbados al sentir una mano en un lugar indebido. Abrí mis ojos lentamente y me encontré con la figura más preciosa del universo. Mí querido Carl estaba allí, me levanté lentamente y él me miró.

"¿Qué haces aquí? ... Pensé que estabas en el reformatorio."se acercó a mí mientras palabras salían de mí boca, se acercó hacia mí boca y susurrando levemente hablo.

"Sí, estaba... Pero las ganas de verte y sentirte, hicieron que saliera de ese lugar."sentía su respiración, está se volvía agitada con cada palabra, poso una de sus manos en mí mejilla e hizo que me acercará a él.

"Carl..." Un suspiro salió de mis labios, ya que con su dedo formaba círculos en mí feminidad.

"No tienes idea de cuánto te espere, cuánto espere sentirte, por favor Anne, entrégate." Sin más, lo bese, fue un beso apasionado y se sentía el amor que nos teníamos. Nos acercamos cada vez más y luego de un momento apasionado, la cosa se volvió desesperada. Él bajaba mí brasier para empezar a masajear uno de mis senos, mientras yo bajaba mis pantalones y los de él.

Él tocaba mis caderas y cintura mientras con su lengua lamía mis senos yo solo disfrutaba mientras tocaba su pecho. Luego de unos segundos comencé a mover suavemente mis caderas sin su miembro dentro, él comenzaba a desesperarse, yo lo sé. Hasta que de un momento a otro, él ya no aguanto y sintió que era el momento.

Me acostó e introdujo las cosas donde debían de ir, comenzó leve, hasta que hice algo que hizo que él sintiera que debía dejarme sin caminar por una semana.

"Carl..."No lo susurré. Lo gemí y eso si que le excito mucho. Sus embestidas eran demasiado fuertes y la velocidad era impresionante, sentía como si el mundo no existiera. Tan solo nosotros dos. Hasta que un alivio y satisfacción inundó todo mí cuerpo y él paro.

"Guau, no sabía que tenías todo eso dentro" bromeo, sonreí y me senté mientras el se sentaba al lado mío.

"Te extrañe demasiado"dije mientras lo miraba a los ojos.

"Yo también... Cómo no tienes idea."Nuestros labios volvieron a encontrarse y me subí a su regazo. "Okay, veo que me extrañas te demasiado, cariño" sonreí mientras me sentaba en su miembro y comenzaba a saltar, "Oh, Dios" comencé a saltar muy rápido mientras miraba como él levantaba su cabeza y sostenía mi cintura, luego de unos segundos, me sujeto fuertemente, de esta manera penetrando me de una manera inexplicable. Una satisfacción inundó todo mí cuerpo y luego de al rededor de dos minutos, me soltó y luego me acosté a su lado.

Tomé una manta y nos acostamos, sintiendo aún el calor del otro.

"Uff, lo que daría para hacer esto cada noche." Sonrió mientras sacaba un cigarro y comenzaba a fumar. Lo mire enamorada y luego de unos segundos caí dormida.