𝖲𝖺𝗅𝗍𝖺 𝗌𝗈𝖻𝗋𝖾 𝗆𝗂 ʰʸᵘⁿˡⁱˣ

20.Jeongin, no me pegues

Luego de haber dejado impecable el lugar, ambos chicos emprendieron camino a la casa del menor. Sin embargo; ninguno se atrevía a hablar sobre lo sucedido.

Hasta que Felix dio el primer golpe.

Hyunjin suspiró.

-¿Simplemente lo vas a ignorar?

-¿Qué quieres que te diga Felix? -contestó irritado. No sentía correcto sentir lo que sentía. Él se había juntado con ese niño solo para ganar más popularidad y caerle bien a todos, fin.

El plan se había salido de sus manos y ahora decidía su corazón.

Mentiría si dijese que no amó sentir esos labios, mentiría si dijese que no se derritió el primer momento que observó esa sonrisa de caramelo y oyó esa armonía que tenía por risa.

Pero no quería aceptarlo.

A no ser lo suficiente para ti...

-Déjalo Felix -cortó empezando a acelerar el paso. Pero un agarre en la muñeca lo detuvo.

Se volteó molesto, mas al ver a su acompañante con la mirada herida quiso retroceder el tiempo.

Tonto. Tonto. Tonto. Tonto.

—¿Fel-

—¡Cállate! —explotó. —¿Era eso lo que querías? ¿Qué me gustaras y me dejaras en la mierda? —rió sarcásticamente. —Bien. Lo lograste ¡Bravo Hwang! Yo te quise ayudar sabes, con lo de tú mamá, tú papá, tus problemas de autoestima. Todo, maldición, creí poder ser yo quien podía hacer todo eso por ti.

—No es eso, relájate, resp-

—¡No me digas que hacer! —resbaló una lagrima por su mejilla. —¿Sabes qué? Es mi culpa; yo te besé, y yo me ilusioné aun sabiendo por donde empezaron las cosas.

—Felix, no hagas esto. —No me alejes, no cuando hemos avanzado un poco.

Felix viró los ojos. Sabía que talvez estaba haciendo un drama por un simple beso pero, para él no fue solo un beso, fue especial e importante. El beso que le hizo darse cuenta que también había caído por Hwang Hyunjin.

Uno más del montón.

—Puedes hacerlo.

El ceño de Hyunjin se frunció confundido.

Lee soltó un bufido. —Mófate. Difúndelo por toda la institución, hasta has carteles si quieres. No me voy a molestar; es más ¡Felicitaciones!

Hwang Hyunjin eres un idiota.

—¿Enserio piensas así de mí? — jaló de la muñeca que sujetaba su brazo, juntándolos— ¿Enserio crees que te trataría como un premio? Hemos pasando semanas juntos y ¿Todavía piensas así de mí?

Felix tembló y pasó saliva.

Eso no era cierto, sabía que Hyunjin no sería capaz de hacerlo, pero a la vez se encontraba confundido. ¿Él que era para Hwang?

Bajó la cabeza.

—¿Si yo no te hubiera besado, tú lo habrías hecho?

—Responde.

—¿Qué tiene eso qu-

Sï. Si lo hubiera hecho.

Más su boca no se movió. No soltó ni un sonido y frustrado volteó la mirada hacía la calle.

Felix lo observó con una sonrisa triste.

Él se había hecho una historia solo.

—Eso era todo lo que quería saber Hwang. — conectaron miradas; le regaló una dulce. —Anda a casa, quiero estar solo por favor.