Campos de Oro

Capítulo 8 - Antecedentes extraordinarios

Ese día, la pequeña piedra divina había querido mostrar sus habilidades curando su herida, pero usó todos sus poderes para curarla. Por lo tanto, no pudo mantener su forma espiritual y había desaparecido durante muchos días. Xiaocao bañaba la piedra arcoíris en agua de manantial todos los días, pero todavía no veía la apariencia de la forma espiritual de la piedra divina.

¡Es tan preocupante! Sin embargo, después de que la pequeña piedra divina exhibiera sus poderes místicos, Yu Xiaocao ya no lo dudaba. Hervía el agua de manantial, en la que se bañaba la piedra, para que su familia bebiera. Parece bastante efectivo hasta ahora, al menos para ella. Su salud no estaba tan mal como cuando acababa de transmigrar aquí.

– ¡Está despierto! ¡El despertó!– La voz de Xiaolian interrumpió sus pensamientos.

Se volvió hacia el sonido. Las gruesas pestañas del joven se agitaron ligeramente antes de que abriera lentamente los ojos. Sus ojos eran deslumbrantes y cautivadores, y parecían tan profundos como el mar y tan brillantes como las estrellas.

– ¿Fueron ustedes... los que me rescataron?– La voz del joven era muy clara, con una leve sensación de indiferencia y frialdad. Era como el agua de manantial de un antiguo estanque que se encuentra dentro de una montaña profunda, excepcionalmente fresca.

Yu Xiaocao sonrió levemente y dijo en voz baja: –Estábamos recogiendo mariscos junto al mar cuando de repente te vimos. Mi padre es un excelente nadador, así que fue a salvarte. Tú... ¡Es genial que estés bien!

La mirada indiferente de Zhu Junyang se centró en la joven frente a él, que parecía tener unos cinco o seis años. (Nota del autor: ¡Tengo ocho años! ¡¡Ocho años!!) Su piel era aún más clara y más impecable que la nieve del invierno, mientras que su cabello se veía ligeramente marchito y amarillo. Sus labios eran delicados y suaves, como pétalos de color rosa claro.

Claramente era solo una chica delgada y débil de la familia de un campesino pobre. Sin embargo, ella le dio una sensación de calma y dulzura, como una brisa primaveral. Este sentimiento era muy diferente al de aquellas nobles damas, que eran como perros rabiosos tras un hueso cada vez que lo veían. Obviamente querían saltar sobre él, pero aun así actuaban repugnantemente pretenciosas. ¡Al menos, esta campesina no era molesta!

– ¡Muchísimas gracias! ¿Viste a alguien más?– Zhu Junyang lamentó profundamente no haber escuchado los consejos del experimentado capitán y eligió un día con ese clima para probar los nuevos barcos. Como resultado...

Sin embargo, esto también demostró que este nuevo lote de buques del astillero no era adecuado para viajes por mar. Ni siquiera pudo soportar una tormenta tan pequeña. ¿Cómo podía viajar a las tierras extranjeras que había mencionado el tío real?

– ¿Otra gente? ¿Cuentan?– Preguntó Yu Hai, con asombro y admiración, mientras señalaba hacia un robusto barco de dos pisos en la distancia.

¡Definitivamente era un barco para viajes por el océano! Era varias veces más grande que el nuevo barco pesquero de su familia. Si también pudiera tener tal... ¡Ejem, necesitaba dejar de soñar despierto!

– ¡Maestro, mi pequeño antepasado! ¡¿Dónde estás?! ¡Por favor, manténgase sano y salvo! – El mayordomo principal del Estado Jing, que fue rescatado después del naufragio, realmente quería estrangularse con una cuerda en este momento. Si hubiera sabido que esto sucedería, ¡habría arriesgado su vida para evitar que el joven príncipe abordara el barco!

Después de que el barco naufragó, casi todos fueron rescatados, excepto el príncipe real Yang. ¡Este asunto estaba a punto de ser la causa de su muerte!

– ¡Rápido, ve a buscarlo! ¡Continúe con la búsqueda! – El mayordomo en jefe ordenó en voz alta con una voz aguda.

El viejo capitán, que había intentado detener el viaje de prueba antes, notó que se acercaban cada vez más al acantilado. Vaciló y dijo: –Mayordomo Jefe, hay muchos arrecifes sumergidos por delante y las olas también son más fuertes. ¡Si continuamos acercándonos, nuestra segunda nave también será destruida!