Campos de Oro

Capítulo 23 - El tío más joven llega a casa

–Ella realmente tiene el cuerpo de una noble joven con la vida de una sirvienta. ¡Es imposible encontrar a otra persona en todo el pueblo que se levante tan tarde! ¡¿De verdad cree que es una niña preciosa?! – Madame Li chilló en un tono brusco, burlándose de ella disimuladamente.

Xiaocao estaba algo familiarizada con la personalidad de esa mujer gorda. Cuanta más atención recibía, más emocionada se volvía. Todos en la Aldea Dongshan sabían que quienquiera que hablara con la nuera mayor del Viejo Yu tendría que soportarla al menos la mitad del día. Era una persona habladora que molestaría a cualquiera que interactuara con ella.

– ¡Oh, mi precioso nieto! Ven y dale un abrazo a tu abuela, ten cuidado con el umbral de la puerta, ¡mi precioso nieto es increíble! ¡Pudiste cruzar un umbral tan alto! – La señora Zhang, que por lo general se trataba a sí misma como la jefa de la familia, en realidad había hablado con una voz tan suave y gentil. Además, había incluso una ligera sensación de halago en su voz.

Yu Xiaocao miró hacia el sonido. Vio a la señora Zhang inclinándose para ayudar a un bebé regordete de dos años a caminar por el umbral de la puerta, mientras una pareja joven caminaba detrás de ella.

El hombre tenía una apariencia refinada con una tez clara. Había heredado su buena apariencia de la familia Yu, la mujer tenía rasgos normales, pero tenía la piel pálida y suave. Su tez clara realzaba sus rasgos, por lo que no tenía mal aspecto. Había una niña, que parecía tener unos doce o trece años, que los seguía con un gran equipaje en las manos.

Se preguntaba por qué estaba tan silencioso en el patio, así que resultó que fueron a buscar a la familia del tío menor. Yu Xiaocao sonrió burlonamente porque ya estaba acostumbrada al trato diferencial de Madame Zhang.

– Xiaocao, no te quedes ahí como un tronco. Date prisa y ve a decirle a tu madre que vuelva a cocinar. ¡¿Cómo puede seguir siendo indolente en este momento?! – La actitud arrogante y mandona de Madame Zhang emergió de nuevo al enfrentarse Xiaocao.

Yu Xiaolian salió de la cocina inexpresivamente y dijo: –Mi madre fue a lavar la ropa. Ella tiene que lavar la ropa de toda la familia, entonces, ¿cómo podría terminarla tan rápido?

– ¡Cuida tu lenguaje! ¿Eres tan capaz ahora que estás refutando groseramente a tus mayores? ¿Es eso lo que te enseña tu madre? –. Madame Zhang se tragó rápidamente las vulgares maldiciones que estaba a punto de escupir y miró por el rabillo del ojo la expresión de su nuera más joven.

La esposa de Yu Bo, Zhao Meilan, no dijo una sola palabra desde que entró al patio. Tenía una expresión débil en su rostro, que no parecía ni feliz ni enojada.

Yu Xiaolian no era fácil de convencer y replicó: –Abuela, solo estaba diciendo la verdad. ¿Cómo estaba siendo grosera contigo? ¡Mi madre ciertamente había salido con una palangana llena de ropa!

Yu Xiaocao fue a la cocina, luego salió de nuevo, –Abuela, la familia del tío menor acaba de regresar de la ciudad, así que deben estar cansadas. Deberías llevarlos a su habitación y dejarlos descansar un poco. Xiaolian, ve a buscar el pescado rápidamente. ¿No estábamos planeando agregar algunos platos para la familia del tío menor?

Su tía más joven, Madame Zhao, finalmente miró a Xiaocao después de escucharla hablar. Ella preguntó en voz baja: –¿Esta es... La hija menor del segundo cuñado?

El tío menor, Yu Bo, finalmente notó a la joven delgada y pálida. Felizmente dijo: – ¡Eso es correcto! Xiaocao, parece estar de buen humor hoy. ¿Saliste a tomar el sol?

Yu Xiaocao no tenía ningún resentimiento hacia su tío y su tía menores, por lo que respondió con una sonrisa: – ¡Tío menor, mi salud ya está mejor ahora! ¡No he estado enferma durante más de una semana!