NARUTO, LA CAÍDA DE UN HÉROE.

Epílogo: La Maldición De Ser Un Dios

Lágrimas, dolor, agonía... Todos estaba vaciando sus lagrimales llorando por una gran pérdida, naruto uzumaki, el gran héroe de la cuarta gran guerra mundial shinobi había muerto, el rubio había sacrificado su vida en una batalla mortal, contra tres otsutsuki, urashiki, ishiki y momoshiki.
Era aterrador el poder de esos seres de otro mundo, pero sus campeones naruto uzumaki y sasuke uchiha habían peleado con fiereza, demostrando también que eran dignos de ser llamados dioses shinobi.
El el fragor de la batalla El sexto hokage fue herido de gravedad, por lo que su compañero decidió contra la voluntad del uchiha dejarlo en la tierra, para ser curado por su esposa, karin uzumaki.
Mientras que naruto se paró con firmesa frente a tres seres que fácilmente eran dioses. Con sus ojos brillando con poder sin límites, su manto de chakra dorado era majestuoso.
La batalla fue brutal, y durante horas el rubio y su compañero bijuu se mantuvieron a flote frente a estos seres.
Si la batalla hubiese ocurrido en la tierra, está hubiese sido devastada.
Pero naruto creo un sello de espacio tiempo mezclado con el poder de su rinnegan para enviarlos a todos a otro mundo, un mundo sín vida inteligente, o cualquier vida para ser precisos.
Todo ese mundo fue destruido por la batalla legendaria, mientras en la tierra los uzumaki le brindaban su poder por medio del ninshu, no les importaba morir, querían que su líder prevaleciera.

Naruto estaba de rodillas, no tenía mucho chakra a pesar de que constantemente absorbía energía natural,(no es que hubiese mucha) había perdido su manto dorado y sangraba profusamente.
No había opciones, tendría que usar esa técnica.
Ni siquiera un dios sobreviviria a la monstruosidad que había preparado como ultimo recurso, dado que el había sellado con fuinjutsu todas las salidas incluyendo las técnicas oculares, estaba seguro de que morirían los 4,
Pero no importaba, al menos su mundo estaría a salvo.
Sintió como el chakra de kurama llenaba sus reservas, a la vez que su modo sabio shinju volvía a la vida, ya que había parpadeando un poco  creó clones de madera para distraer a sus oponentes.
Necesitaba al menos 3 minutos para preparar la técnica definitiva.

Sus ojos rinnegan brillaron con determinación cuando una esfera de pura oscuridad se formaba en cada una sus manos, eran tan pesadas y densas que podía distorsionar el espacio aún con su barrera.

Sakura miraba con horror mientras el amor de su vida estaba a punto de sacrificarse para que la humanidad pudiera sobrevivir. Odiaba está, situación, odiaba a esos malditos otsutsuki, ni siquiera le había podido decir a naruto que estaba embarazada, quizás el lo sabía, pero le desgarraba él alma saber que su amado Sol, jamás podría ver al fruto de su amor, que no podría ver crecer a esos hermosos niños que ella amaba como si fuesen de su sangre.

Cuando las dos esferas colicionaron ella rompió en llanto, no pudo soportarlo más, su amor estaba muerto, al igual que su padre antes que el, se había convertido en el héroe más grande, no de konoha, no del país del fuego, sino de toda la humanidad, sin importar su nacionalidad,
Todas las naciones ahora mismo lloraban a su héroe.
Todos estaban seguros de que el rubio jamás volvería.
Los miembros de uzumaki que ayudaron al rubio brindándole su poder, estaban desmayados e incluso al borde de la muerte, según uno de ellos que logró estar consciente un par de minutos.
El rubio había roto su conexión justo antes de crear la técnica que terminó la batalla.

Los días pasaron y se organizó un funeral para los caídos en la llamada "batalla de los kami". No habían sido tantos en realidad, no tantos como en la cuarta guerra mundial shinobi. Ni siquiera eran mil ninjas, pero se sintió como si hubiesen perdido la guerra,
Todos, sin excepción lamentaban la muerte de su más grande héroe,
El llamado *shinobi no kami*/*dios shinobi*
O simplemente.  *kami no kage*/*sombra divina* este último como un doloroso recordatorio para konoha de que le negaron su sueño a naruto.

Se transmitió en cada rincón al que la tecnología había llegado,
Y fue desgarrador ver a los gemelos, herederos de naruto llorar desconsoladamente mientras una sakura de aspecto decaído trataba inútilmente de calmar a sus "hijos".
A la vez que frotaba su vientre con una mirada nostálgica en su rostro.
Ahora realmente sabía que su rubio los había estado complaciendo, formando vínculos fuertes con ella y sus hijos, por ello la obsesión con las fotos, si, en los meses que estuvieron juntos, se tomaron al menos 1 foto por día con cada uno de sus seres queridos.
Incluidos en algunas, sasuke y su familia.
A decir verdad incluso itachi y sarada lloraban por su tío naruto,
Sasuke sólo tenía una mirada vacía en sus ojos oscuros,
Parecía indiferente y calmado, pero una lágrima traidora caía por su mejilla mientras el alzaba la vista hacia un cielo despejado,
Ni siquiera cuando el rubio estaba muerto el sol negaba su luz, era como si kami les dijera con ese sol cálido y brillante que naruto siempre estaría ahí, que su luz siempre brillaria para dar esperanza y su sombra los protegería de la tempestades.