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Ya son las tres de la madrugada y Lisa aún está despierta. Ahora se encuentra acostada en el sofá, mientras Jennie ocupa su dormitorio. Su mente parece no poder olvidar lo que Jennie le había dicho antes.

¿No puede enamorarse de mí?

¿Qué quiere decir con eso?

¿No puede o no quiere enamorarse de mí?

¡Aargggh! Pero quiere que sea su amiga.

¿Para qué?

A lo mejor no le gustan las chicas.

Lentamente, sus profundos pensamientos la llevaron al país de los sueños.

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Jennie se despertó al ver el rayo de luz matinal que entraba por la ventana. Estiró los brazos y miró a su alrededor. Se levantó inmediatamente al darse cuenta de que estaba en un dormitorio desconocido.

¿Dónde estoy?

Se llevó la mano al pelo al sentir un terrible dolor. Intenta recordar lo sucedido.

Kai, Rosé, Lisa y yo salimos anoche. Rosé y Lisa estaban muy acarameladas. Conocimos a Jisoo, amiga de Lisa y dueña del bar.
Nos ofreció su bebida especial casera. Sabía tan bien. Me tomé unos tragos. Sentí que se me entumecían las piernas. Además, recuerdo que Lisa y Kai me llevaban en brazos hasta el aparcamiento. ¿Qué pasó después?

Jennie escaneó la habitación. Vio un despertador de mesa en la mesilla de noche.

Mierda, ¡son las diez de la mañana! Tengo que llamar a mamá. Se va a enojar.

Encontró su bolso cerca y buscó su teléfono móvil. Pero frunce el ceño porque se quedó sin batería.

Tsk. Estoy en problemas.

Se levanta de la cama y se pasea por la habitación, queriendo averiguar en qué casa está ahora mismo. Vio un marco fotográfico en la mesa cerca de la ventana. Es la foto de la graduación de Lisa con un hombre mayor a su lado, probablemente su padre.

Ooh. Así que esta es la casa de Lisa.

Sus ojos se abrieron de par en par.

Espera, ¡estoy en casa de Lisa!

Entró en pánico. No puede contener la idea de que Lisa la haya visto en esa situación. Además, le da más vergüenza la idea de que Lisa la vea ahora con su aspecto demacrado. Y lo peor es que no recuerda nada de anoche. ¿Y si hizo algo que se suponía que no debía hacer?

Espera, ¿hicimos... ¡Dios, Jennie! ¿En qué estás pensando?

Se abofeteó mentalmente.

Pero estoy sola en la cama, y esta es mi ropa de ayer. ¿Dónde está Lisa?

Salió de la habitación y encontró a Lisa en el sofá, con todo el cuerpo cubierto por una manta. Jennie se inclinó un poco para ver más de cerca el rostro de Lisa.

Ooh, todavía está durmiendo.

Tocó la nariz de Lisa con la punta de un dedo. Lisa no se movió. Jennie sonrió.

Qué tonta soy. ¿Qué estoy haciendo?

Miró fijamente a Lisa y se dio cuenta de algo.

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Lisa está de pie cerca de un abismo.

Mira a su alrededor para comprobar si hay alguien con ella. No hay nadie. Se siente sola. Siempre se siente sola. Desde que murió su madre, su padre se ahogaba trabajando para sobrellevar su duelo. Siendo una niña de su edad, Lisa no conocía el proceso para superarlo.

HERSHEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora