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–¿Será Sanzu? –mencionó ganándose una expresión confundida por parte de su amigo y cuñado –. Bueno es que ustedes siempre estaban juntos.
Manjiro negó con el ceño fruncido – Claro que no es él.
–¿Qué? ¿Entonces quién es?
–Alguien –Draken sintió una vena saltarse, se estaba comenzando a desesperar –. No importa, me gustaría que me acompañaras mañana a un lugar... –dijo desviando la mirada para evitar el interrogatorio, peor será cuando Emma se entere de que será papá – a la escuela de mi sobrina.
–Nunca te has acercado, ¿por qué ahora? –preguntó dejando la botella de agua en la mesa, no bebería más hasta que las sorpresas dejen de salir.
Manjiro se giró a verlo con una sonrisa que denotaba orgullo –Iré a ver a la madre de mi hijo.
Ok, eso fue una cachetada directa a la cara.
–¿Qué?
–Ah, no te lo había dicho –alzó sus hombros en un gesto despreocupado recargando su espalda en la silla –, pronto seré padre.
¿Qué demonios? ¿En qué momento su amigo había llegado tan lejos con alguien?
Exhaló apretando el puente de su nariz. Sí, su amigo es responsable de su propias acciones, pero sinceramente Mikey no estaba preparado para ser padre mucho menos criar a un cachorro. Por experiencia propia podía decir que era una tarea titanica.
–Él es maestro de Azami.
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Su vista no se podía despegar del cuaderno donde se supone que debía tomar notas de la reunión de docentes, no había parado de escribir el nombre de Manjiro o 2-Gyō.
