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Finalmente uno de nuestros protagonistas había descifrado y confesado sus sentimientos. No lo había planeado, no lo hizo de una manera romántica, ni tampoco lo hizo en un buen lugar, pero esos detalles no tenían importancia para la menor de los Silva.

La pequeña mano de ella se extendió hasta tocar el rostro de él manteniendo sus rostros aún mas cerca. Ninguno sabia con exactitud lo que ocurría, él ya abia declarado su amor pero ¿qué ocurría con ella?, Asta realmente le resto importancia a eso porque solamente disfrutaba de los cálidos labios de Noelle.
Pero el momento no duró mucho hasta que Asta comenzó a percibir un Ki no muy lejos de la entrada de la base.

Asta: Alguien viene.

Pronunció él luego de haberse separado con algo de dificultad de los labios de Noelle.

Noelle: ¿Como que alguien viene?

Ella de inmediato comenzó a sentirse muy nerviosa, miles de escenarios donde Vanessa, justamente Vanessa podría llegar e insinuar miles de cosas que podrían a ver sucedido por estar Asta a solas con ella.

Asta por su parte se dio media vuelta y acercándose a la puerta del armario tomó el picaporte e hizo fuerza para que la puerta se elevara un poco del suelo y dandole un pequeño empujón la abrió.
Salió de ahí y extendió su mano hacia Noelle para que ella la tomara, cosa que ella hizo sin dudarlo. Él dió un estirón con la mano que sostenía la de Noelle causando que ella perdiera un poco el equilibrio pero sin caerse ya que Asta la atrapó entre sus brazos.

Noelle: Pe-Pero ¿que haces!?

Asta: ¿no puedo abrazarte?

Noelle: ¿No se suponía que venia alguien?

Asta quedo en silencio, solamente pasó a un mas sus brazos por la cintura de ella presionando sus cuerpos entre si, dándole un pequeño beso en la mejilla de ella.

Noelle sentía todo su cuerpo temblar, Asta solía ser algo cariñoso con ella pero ahora podía sentir que su abrazo le transmitía algo diferente. ¿Enserio le gusto? Se pregunto ella misma mientras otro beso llegaba a su mejilla que estaba roja como tomate.

Asta: Es el Ki de Yuno, seguramente viene a verme.

Otro beso llego a Noelle pero estaba vez sobre su frente. Asta le mostró una de sus mejores sonrisas intentando calmarla, porque la conocía lo suficiente como para saber que ella en ese momento estaba teniendo muchas emociones juntas y lo último que él quisiera es causarle un desmayo.

Asta: Luego seguimos con lo que hablábamos, mejor dicho con lo que te dije.

Asta paso su dedo índice por la nariz de Noelle dandole un pequeño toque causando que las mejillas de ella se pusieran aun mas rojas en antes.
Él se separó de Noelle, aún con una sonrisa en su rostro se dirigió a la salida de la habitación.

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Yuno: Porque debo ser yo el que lo invite?

Habló para si mismo Yuno mirando de mala manera la puerta de la base de los Toros Negros.

Asta: Yuno!

La puerta de la enorme base fue abierta dejando ver a Asta son su típica sonrisa, como si nunca tuviera un mal día.

Yuno: Ni siquiera toque la puerta aun, no me digas que percibes mi magia.

Asta: Ya quisiera poder percibir magia, aun uso la técnica del Ki que te comenté hace tiempo.

Mientras ambos amigos de la infancia hablaban de un tema que casi no tenia importancia, una figura femenina observaba todo mientras estaba oculta detrás de una columna de la base. Sin tomar en cuenta que ella también estaba siendo observada.

Bell: ¿Que haces escondida viendo a mi Yuno?

Noelle emitió un pequeño chillido de susto evitando que Asta o Yuno, la oyerán y pensaran que ella estaba espiandolos, aunque eso mismo hacía.

Noelle: Me quieres matar de un susto!

Bell: Si fuera posible si, menos rivales en mi camino.

Noelle: Como que menos rivales, puedes quedarte con tu Yuno, a mi no me interesa.

Bell: No lo decía por eso, pero te mantendré vigilada.

Mientras Bell hacía una pequeña seña con sus dedos de que sus ojos estaban puestos en Noelle, Noelle solamente con una expresión natural en su rostro le tiró un chorro de agua con su magia.

Bell: Yuno! Esa chismosa me mojó!

Noelle: Ella fue la que tenia pensamientos macabros.

Noelle y Bell, que ya estaban justo en medio de Yuno y Asta, discutían y decían comentarios que seguramente ni ellas mismas entendían pero sabían que si una paraba le daba la razón a la otra.

Yuno: Bell, no molestes a Noelle.

Bell: Ehhh!?

El pequeño espíritu del viento se puso totalmente pálido y fue callendo lentamente hacia el suelo de forma dramática.

Noelle: ¿Se murieron?

Noelle se inclinó hacía el suelo mirando detenidamente a la pequeña Hada.

Bell: Ya vez! Seguro embrujaste a mi Yuno.

Noelle: Me estas diciendo Bruja, Hada Frentona!?

Asta se acercó a Noelle y con algo de fuerza intentaba alejarla de Bell.

Noelle: Dejame Bakasta! La pisaré así vea la magia.

Asta: Vamos, tranquila Noelle, si la matas seguro Yuno se pondrá triste.

Noelle: Que Yuno aprenda que no todo en la vida de feliz.

Noelle mientras iba siendo jalada por Asta para apartarse de Bell, estiraba uno de sus pies intentando tocar al hada que solamente sonreía pero en pocos segundos cambió a una expresión sería y le enseñó a Noelle el dedo del medio de su pequeña mano.

Yuno: Bell, eso es irrespetuoso.

Habló finalmente Yuno, que solamente había estado viendo la escena riendose internamente.

Noelle parecía que explotaría del enojo que sentía por no poder pisarla y haber recibido esa seña de parte de la hada.
Su rostro se tornó rojo y Asta ya sabia que significaba. Tomó con fuerza a Noelle e hizo que ella pusiera todo su rostro en el pecho de él que estaba cubierto por una camisa blanca. En pocos segundos se escuchó un grito proveniente de Noelle. Se estaba desahogando gritando sin razón y Asta solo había acercado el rostro de ella a su pecho para que el sonido disminuyera.

Asta: Con gusto aceptamos la cita doble, Yuno.

ꨄ︎𝐀𝐒𝐓𝐄𝐋𝐋𝐄ꨄ︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora