Te escribiré mejor que la última vez...

-Capítulo 17-Dadaísmo-

–––Llamada entrante–––

–¿Hola?

–Cariño, ¿Ya llegaste?

–Sí, ya llegué estoy saliendo del aeropuerto en este momento.

–¡Qué alegría tesoro! Tienes que apresurarte en llegar a casa, te hice tu comida favorita.

–Me tardaré un poco, debo ir a un lugar antes de llegar a casa.

–Bueno, te estaré esperando Liam.

–Nos vemos pronto madre...

–––

–Llévame a Yeong dae, edificio Jaehong.

–¡Sí Señor!

"Ya ha pasado suficiente tiempo Jeon, es hora de hablar por las buenas o las malas"...

–––

Taehyung abrazó a Jungkook con lágrimas en los ojos. Entre lágrimas preguntó.

–Mi Jungkookie, ¿Qué fue lo que te hicieron..?

–Me-me... m–e...

–¿Qué dices amorcito? ¿No puedo entenderte? –Dijo mientras besaba a Jungkookie en su frente suavemente.

–Trataba de decirte que me...

"Ding... dong... ding..." (Interrupción por el timbre de la puerta)

La presión le ganó a Jungkook y no pudo terminar de hablar.

–Ya casi hablamos amor, voy a ir a ver quién busca afuera.

–No Jungkookie, primero dime lo que me ibas a decir.

"Ding... dong... ding..."

–Puede ser el doctor que vino por algo, tal vez es importante amor, prometo que te lo diré después, ¿Sí?

–Bien... –Respondió mientras volvía a acostarse en la cama.

Jungkook se dirigió rápidamente a la puerta de entrada para ver el inter comunicador y así abrirle a la persona que tenía tanta urgencia. El timbre no paraba de sonar cosa que le estaba comenzando a asustar, cuando se acercó a la puerta, tocó el botón para contestar el comunicador y así poder escuchar a la persona que estaba abajo, sin pensarlo mucho presionó y la voz a través del aparato lo dejó helado.

–¿Conejito eres tú?

Jungkook perdió la fuerza en sus piernas y solo cayó Junto a la puerta, su respiración se aceleró y así el ataque de pánico comenzó. Eran demasiados traumas, preguntas sin responder y miedo... "¿Cómo me encontró? ¿Por qué volvió al país? ¿Qué haré ahora?.. Taehyung había escuchado el golpe y rápidamente salió del cuarto para encontrar a Jungkook.

–Conejito, sé que estás ahí, abre la puerta, déjame verte bebé, debemos hablar.

Esa voz seguía y seguía, Jungkook solo podía tapar sus oídos mientras seguía tratando de encontrar aire para respirar pero, en ese momento llegó su ángel.

–¡Amor! ¿Qué haces en el suelo? ¿Qué pasa?

–Yo... yo no... yo no puedo respirar, amor yo–o él él es él es... –Jungkook no podía hablar, no podía, necesitaba callar esa voz. –¡Haz que pare, por por fa–vor haz que pare!

–Amor; ¿Quieres que se vaya?

–Sí, sí, sí, sí. Y que se vaya; ¡Ya!

Inmediatamente Taehyung tomó a Jungkook en sus brazos y lo llevó a la habitación, luego de dejarlo, salió cerrando la puerta detrás de él para acercarse al comunicador ya que seguía encendido y la voz detrás de él seguía ahí.