Capítulo 7

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1

La semana transcurrió y Touya no podía estar más agradecido, por fin tendría sus benditas vacaciones. Había dejado todo en orden en la oficina así que sus preocupaciones se limitaban a su hogar, nuevamente pensaba como toda una mamá.

–Shoto, ¡enano ya levántate! –quito las cobijas del cuerpo ajeno y abrió las cortinas dando paso a la luz solar.

–¡Deja de hacer eso! –el menor le lanzo la almohada a la cara, sin embargo, su hermano termino por atraparla– vete.

–Te espero abajo.

Pudo alcanzar a escuchar como su menor lo maldecía desde su habitación haciéndolo reír. Si bien Touya era un chico dramático y en su adolescencia lo consideraban alguien "rebelde" no evitaba que en algunos momentos podía ser algo... Nostálgico, recordando como jugaba con Natsuo o cuidaba de Shoto, probablemente él era el que lo había criado, pues su madre no había estado presente en su crianza y su padre se la pasaba golpeándolo y entrenándolo todo el tiempo. No podía evitar recordar como iba a su habitación con miedo o pesadillas, como lo había llevado a su primer día de escuela o como llegaba emocionado mostrándole algún dibujo o el sobresaliente de un examen.

Sonrió al recordar todo aquello mientras acomodaba lo último del bento de su menor, el desayuno ya estaba en la mesa y escucho como Shoto bajaba las escaleras.

–¿Estarás aquí toda la semana? –pregunto el bicolor mientras comía su desayuno y veía como el albino colocaba el bento en su mochila.

–Si, Tenko insistió en que necesitaba vacaciones así que me verás aquí todo el día.

–¿Se supone que eso es bueno?

–Claro que lo es, soy tu hermano favorito.

–No lo eres.

–¿Te crió y así me pagas?

–Ya me voy.

–Te llevo.

–No es necesario –Shoto viró los ojos tomando su mochila con un Touya detrás de él– de verdad, no es necesario.

–No me importa lo que digas, te llevaré.

2

Shoto era famoso, era guapo, era inteligente, tenía ese aire misterioso y era hijo y hermano de los héroes más famosos, decir que era popular era poco; sumado a ello llegar junto a su hermano mayor hizo que todos comenzarán a murmurar y lo viesen con curiosidad.

–Te dije que no era necesario –replicó el chico incomodo por la atención recibida.

–Ya entendí... No te enojes –sonrió avergonzado entrando a su lado.

–¿Entrarás?

–Bueno... No tengo nada que hacer, solo charlaré un poco con tus profesores.

–No te gustan las vacaciones, ¿cierto?

–No, las odio, estoy acostumbrado al estrés –suspiro abatido entrando con ojos curiosos a la UA– hey, Eraser.

–¿Dabi?

–Ese soy yo, ¿qué tal?

–¿Puedo pedirte un favor?

–Claro.

Shoto dejó a ambos hablando en los pasillos, fue directo al salón y tomo asiento donde siempre, su rostro más malhumorado de lo habitual.

No lo mal interpreten quería mucho a Touya, era su hermano, lo había criado, lo había cuidado y apoyado en todo momento, pero la escuela era su momento de descanso. Si bien Touya le caía bien, había momentos en los que simplemente no lo soportaba, siempre lo hostigaba, buscaba contacto físico al que no estaba acostumbrado y era sumamente dramático.

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