¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Ansu : Nunca había tenido un cumpleaños tan horrible. Mi humor es del asco y la culpa me come la mente. Han pasado 8 días y aún no sé nada de Sofía . Me levante, la llamé y sigue su teléfono apagado, los chicos tampoco saben nada de ella. No poder pasar mi cumpleaños con ella y tampoco tener noticias de ella me tiene de un mal humor horrible... hicimos el entrenamiento y volvemos al hotel, hay muchas fans afuera del hotel pero no me siento de humor para poder salir a verlas, en el pasillo del hotel hay algunas chicas con las que nos sacamos fotos pero rápidamente me escabullo con nuestro guardia y subimos a mi habitación. -¿Qué es lo que te pasa?- dice Jean, uno de los chicos de seguridad con el que tengo una gran amistad.
-No estoy de humor, hoy no es mi día- suspiro molesto.
-Estoy seguro que el regalito que te dejaron los chicos en tu habitación te cambiará la cara- dice sonriente y lo miro con mala cara.
-Les dije que no quería ver a nadie y sé que no es mi madre porque hace poco hablé con ella por video llamada y está cuidando de mi abuela que está delicada de salud- le respondo y él asiente- entonces porqué nunca me...- nisiquiera me deja terminar de hablar y sale del ascensor en nuestro piso con una sonrisa burlona.
-Sé que lo agradecerás- me guiña un ojo y se va.
Entro a mi habitación que me tocó solo y la luz está encendida pero no escuchó ruido, no veo a nadie ni nada, quizás solo me estaba jodiendo. De pronto veo una sombra a mi lado y me quedo parado en shock.
-Feliz cumpleaños cabezón- dice Sofía con una sonrisa. Siento unas enormes ganas de lanzarla por el balcón por haber desaparecido tantos días, pero la tranquilidad y felicidad de verla son más grandes. Doy un paso y le doy un fuerte abrazo estrujandola.
-Te odio- le susurro y la escucho reír, me separo un poco de ella sin soltarla y con una mano acaricio su mejilla- ¿estás bien?
-Sí... han sido días difíciles pero ya, estoy aquí y estar contigo en tu cumpleaños me hace estar bien- dice con una hermosa sonrisa. Siento unas enormes ganas de besarla, pero sé que eso arruinaría el buen mom... Sofía me leyó la mente.
-Lo siento...- dice luego de haberme dado un beso que despertó todos mis sentidos- fué un impulso y...- y no la dejo terminar, ahora quien la besa soy yo. Después de miles de besos, terminamos haciendo el amor como nos gusta. La necesitaba y no solo hablo del ámbito sexual, hablo de tenerla conmigo, su presencia me da paz y mi estado de ánimo siempre mejora. Me cuenta todo lo que le a pasado y solo me queda rondando en la cabeza lo del tal Diego. Ese maldito le hizo mucho daño. Estamos en la cama desnudos y hablando cuando de pronto suenan unos golpes en la puerta. Ambos nos tensamos de inmediato, me visto rápidamente mientras Sofía estira las sábanas de cama, recoge su ropa y se mete al baño. Abro la puerta y los chicos se meten rápido a mi habitación.
-¿Dónde está esa pequeñaja?- dice Pedri y sonrío por como le llama. Sofía odia ese apodo y este man lo hace para fastidiarla.
-Porfavor dime que no la hechaste- dice Gavi serio y con su actual cara de asco.
-¿La asesinaste?- pregunta Pique y niego con mi cabeza. Nico solo me mira serio hasta que Sofía sale del baño, vestida y peinada. Todos la saludan hasta que Nico habla. -Hay un olor raro aquí- dice Nico y se sienta en la cama. Miro a Sofía y se sonrroja evitando mi mirada.
-Es cierto, ¿porqué habrá ese olor?- dice Gavi entre cerrando los ojos.
-Uy sí, qué será ese olor- dice Sergio intentando no reírse, nisiquiera sé qué decirles.
-Ya déjense de gilipolleces- les digo y cojo mi botella de agua, necesito disimular.
-¿Tuvieron sexo?- dice Nico y escupo el agua mojando a Gavi.
-Asqueroso- dice mi amigo secándose la cara. Pique y Pedri ríen a carcajadas y Sofía no sabe donde meterse. Como si fuese un milagro nuestra entrenador nos llama y me salva de una incómoda charla con los chicos, ya tenemos que ir al partido . Nos dejan solos y la observo esperando que me diga algo, pero nada. A veces siento que necesito alejarme de ella para no hacerle daño, pero pasan algunas semanas y me desespera no poder tenerla, no poder abrazarla o besarla. Asumo que me gusta mucho, pero no quiero arruinar nuestra amistad.
El Partido sale perfecto y más aún cada vez que miraba a un lado de la grada y veía sonreír feliz a mi mejor amiga. Ya estamos listos para irnos a una discoteca a celebrar mi cumpleaños y el buen resultado del partido de hoy. Xavi se encargó de pedir un lugar discreto de la discoteca y todas las chicas nos miran, esto me gusta. Varias chicas se nos acercan, hablamos, y cuando estoy bailando con una morena espectacular, me doy cuenta de que Sofía está hablando con un tipo. Ese asqueroso le pone una mano en la pierna y siento que quiero arrancarle los dientes de un golpe, maldito. De pronto la toma de la mano y la saca a bailar. Todas mis ganas de bailar se acabaron, estoy sentado en los sillones como Gilipollas o metido en mi teléfono.
-¿Qué sucede?- dice Sofía sentándose a mi lado.
-Nada- respondo cortante y no la miro.
-Parece que fué mala idea venir, mejor volveré al hotel- dice y me pego mentalmente. Cuando se pone de pié para irse la tiro de su brazo y cae en mis piernas sentada. Ella me mira con asombro y sin pensar en nada la acerco a mi y escondo mi rostro en su cuello. Su olor y sus mimos que me hace en el pelo me relaja, y lo que más me gusta de ella es que no me cuestiona, me da mi tiempo y cuando estoy listo le doy las explicaciones que ella merece.
-Lo siento, solo estaba enfadado por algo que escuché y lo tomé contigo, ¿me perdonas?- le digo haciendo un tonto puchero, solo lo hago porque sé que a Sofía la convence. Ella sonríe tan guapa como siempre.
-Obvio que sí bobo, y ahora vamos a bailar y celebrar, que a eso vinimos- me toma de la mano y bailamos.
¡Dios! Como me duele la jodida cabeza. Siento que me va a explotar. Creo que se me pasó la mano bebiendo anoche. Poco a poco abro los ojos y a mi lado hay una chica desnuda dándome la espalda. Me levanto sin hacer ruido y mientras me visto me doy cuenta de que esta no es mi habitación, y también de que no era solo una chica la que estaba en la cama, sino que eran dos. Salgo sin despertar a las chicas, al menos estamos en el mismo hotel. Espero el ascensor que baje y cuando se abren las puertas me quedo de piedra al ver al mismo tipo que le coqueteaba anoche a Sofía y si no me equivoco tiene puesta la misma ropa.
-¿Subirás al ascensor?- me pregunta, asiento y subo en silencio hasta que el se baja en el primer piso. Por mi mente solo ronda una cosa... Sofía pasó la noche con ese tipo.
[...] Sitieneapoyosubootromañana y otra cosa que no suelo decir gracias a todos por leer mi historia y por seguirme❤️🫶🏼
