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Narrador omnisciente Sofia ya tiene 6 meses de embarazo, y como suele pasarle, su vida volvió a cambiar. En el último tiempo Ansu volvió a alejarse de ella, evitandola, pero Diego se a encargado de hacerla sentir querida y mimada, él prácticamente vive en la casa de Sofía y la cuida como nunca nadie lo a hecho...
-Hoy debo entregar unos pedidos en el centro- Sofia le dice a Diego.
-Te pedí porfavor que no salieras- responde Diego enfadado.
-Pero no entiendo, ¿estoy presa en mi propia casa?- dice Sofía también enfadada- yo puedo salir donde se me da la gana y ni tú, ni nadie me lo va a p...
-¡Te dije que no!- grita de pronto el chico y Sofía retrocede unos pasos, no puede evitar sentir miedo y los recuerdos de años atrás vienen a su cabeza- yo... perdóname- dice más calmado al ver su expresión- yo no quería gritarte... porfavor, no me tengas miedo, perdóname- dice arrepentido y la chica solo es capaz de asentir, mientras intenta que sus lágrimas no caigan. Él la abraza y Sofía comienza a llorar desconsoladamente. Él la coge en brazos y la lleva a la habitación, la recuesta e intenta calmarla- ya cielo, tranquila, porfavor no llores así, que me parte el corazón- dice tierno, se recuesta al lado de su chica y la abraza mientras Sofía se acurruca en su pecho- lamento ponerme tan tonto, pero no quiero perderte, no quiero que te hagan daño, porfavor no salgamos este fin de semana y solo seamos nosotros tres- pone su mano en la crecida barriga de Sofía y la acaricia- las amo.
-Y nosotras a ti- dice más calmada.
Ansu por su parte está más estresado que nunca. Ángela está más irritable que al principio y tener a la madre de ella en su propia casa, lo tiene saturado.
-Podrías cambiar esa cara, sé que no te gusta mi madre, pero apenas volvamos del viaje ella habrá acabado con sus asuntos y se irá- dice Ángela enfadada y el moreno rueda los ojos- ¿acaso no te alegra nuestro viaje?
-Estoy cansado porque trabajo todo el maldito día, pero esa palabra tú no la entiendes y te fuiste a jugar los partidos por 3 ciudades, ¿quieres que te aplauda también?- dice Ansu enfadado.
-No sería mala idea- responde la chica sin darle importancia- te servirá para quitarte ese humor de perro que llevas siempre, ahora haz tu maleta que nos vamos en una hora.
-Vamos por dos días, ¿es necesario que lleves esa maleta tan grande llena de ropa?, nisiquiera te pondrás la mitad de eso...
-Lleva lo que te venga en gana, yo llevo mis cosas que a ti no te importan asique solo estate listo en una hora- dice la chica y sale de la habitación. Ansu al fin en tranquilidad saca su teléfono y abre el chat de Sofía , como siempre, solo para ver su foto de perfil en donde se le ve radiante con su tripa de embarazada.
-Cuanto daría por que fueses tú...- dice con nostalgia el moreno.
-¿Que fuese quién?- dice Ángela y Ansu salta del susto.
-¡Mierda!- dice asustado- nisiquiera te escuché entrar, yo... estaba escribiendo un mensaje para Pedri que se quiere declarar -estaba tan nervioso que habló demasiado rápido.
-Ok...- responde Ángela, coge una chaqueta y sale nuevamente de la habitación.
-Joder...- susurra el castaño. Luego de dos horas ya iban sentados en un avión, Ángela con la sonrisa pegada en el rostro y Ansu serio mirando hacia afuera. Le tenía mucho cariño a su chica, pero solo estaba con ella por su hijo. Nunca pudo enamorarse de Ángela porque ya había otra mujer en su corazón... Sofia .
Al día siguiente Ansu no daba más del dolor se cabeza. Tenía un mal presentimiento y no pudo dormir muy bien, y lo peor de todo era que en la ciudad que estaban no tenía muy buena señal.
-Relajate ya, pregunté al guía y en una hora haremos parada donde hay cabinas telefónicas para que llames a tu madre- dice Ángela preocupada.
-Gracias- responde el chico y la chica se apoya en su pecho. A pesar de todas sus diferencias, ella era quien le daba cariño e intentaba contenerlo en sus días malos cada vez que se alejaba de Sofía , aunque nunca sería lo mismo, al menos sentía que Ángela le daba esa atención y cariño que necesitaba, claramente él no sentía lo mismo pero por su bebé y ese cariño que sentía de parte de ella no la dejaba. Ansu apenas pudo llamó a su madre y todo estaba bien, asique ya un poco más tranquilo comenzó a disfrutar del viaje.
Sofia por su parte llevaba un día tranquilo, Diego la había ayudado con la limpieza de toda la casa mientras ella cocinaba, sin duda hacían un buen equipo y eso ponía contenta a la chica, aunque en su corazón siempre estaría Ansu , él se encargó de hacerle ver que nunca sería tan importante para él y sabía que Diego sí la valoraría y cuidaría como el castaño no supo hacer.
-Cielo, iré a comprar unas cosas a la tienda, ¿quieres que te traiga algo?- pregunta Diego abrazando a su novia por la cintura mientras acaricia la tripa de ella. Sofia sonríe enternecida y lo besa.
-Mmm creo que hoy se nos antoja un pastel de chocolate- dice como niña pequeña porque sabe que Diego la consentirá.
-Ya vuelvo, cierra bien la puerta ¿sí?- dice Diego preocupado y Sofía rueda los ojos.
-Que sí pesado- responde la chica sonriendo, los últimos días Diego se a comportado muy nervioso y sobre protector. Finalmente el chico sale de la casa y suspira, hoy acabaría con ese sucio negocio que había comenzado hace meses... Pasaron algunos minutos y unos suaves golpes en la puerta interrumpen a Sofia.
-Dios mío de mi alma, este cabeza de pollo ya olvidó sus llaves- dice Sofía y lava rápidamente sus manos, vuelven a tocar la puerta- ¡ya voy pesado!- grita sonriendo. Se da prisa en abrir la puerta y su sonsira se desvanece de inmediato.
-Nisiquiera se te ocurra gritar o mato a la cosa que tienes hay - dice un hombre alto y gordo, que nunca había visto en su vida, con una pistola en mano apuntando a la barriga de Sofía - retrocede dos pasos- Sofía hace lo que el tipo pide- muy bien preciosa, si haces lo que digo no sufrirás- el hombre entra en la casa y cierra la puerta.
-¿Q... qué quieres?, ¿quie... quieres dinero?...- dice apenas la chica, está aterrorizada.
-Calladita te ves más bonita, ahora junta tus manos y no hagas nada estúpido porque no dudaré en matarte- dice de forma intimidante. El hombre ata de manos y pies a Sofia y la hace sentarse en el suelo, la mira con una sonrisa que le pone los pelos de punta a la chica- esperaremos a que tu lindo Dieguito llegue para que empieze el juego, así será más entretenido... [...] No me tengáis en cuenta lo que tardo en subir capítulos 😅
